Antonio y Erica son dos hermanos que quieren acabar con el tirano de Dios que ha creado a la humanidad solo para su entretenimiento.
Para ello, forman equipo con el ángel Sariellis, la Muerte y el arcángel Lucifer y estos viven aventuras para conseg...
Mientras tanto en el Vaticano, Dios usó el oráculo para comunicarse con Caela, un ángel hembra de rango 3, por lo que tenía en su poder el bastón sagrado de la esmeralda. Tenía un flequillo largo que le tapaba uno de los ojos y era de estatura baja y delgada, y tenía el especial puesto de secretaria de Dios.
-Caela, voy a hospedarme temporalmente en el Vaticano con mis socios de la iglesia para pasar desapercibido un tiempo. -Es una buena idea señor Dios- dijo Caela- Pero ¿quién se va a encargar del Reino Celestial mientras que usted está fuera? -Te dejo al cargo- dijo Dios.
Caela apagó el oráculo, se sentía bastante valorada, Dios no le había dado nunca tal responsabilidad, así que debía hacerlo correctamente. Cogió un papel y una pluma y fue anotando las tareas que tocaría cada día a cada ángel, luego los reunió a todos para anunciarles la noticia de que Dios se ausentaría un tiempo.
En el Reino Celestial había un total de 300 ángeles y 7 arcángeles, pero siempre era fácil reunirse todos.
-Chicos, Dios se va a ausentar por un tiempo y me ha dejado al cargo del Reino Celestial mientras él no este. -Pero cómo padre va a dejar al cargo a una simple ángel de rango 3 teniendo a su hijo más poderoso- protestó el arcángel Miguel. -Cállate Miguel, pernónale, ¡no seas ceporro!- dijo un chico de pelo plateado que le rozaba los hombros
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Después de que todos se fueran, Caela fue a hablar con ese chico.
-Gracias por defenderme, fue muy amable- agradeció Caela. -No fue nada, por cierto, me llamo Zadkiel, uno de los 7 arcángeles e hijos de Dios. {DIOS TUVO 7 HIJOS ÁNGELES A LOS QUE FUERON ASIGNADOS EL RANGO DE ARCÁNGEL (rango 5) Lucifer también pertenecía a este puesto, pero fue desterrado}
Caela se ha quedado impresionada, nunca pensaría que hablaría con un hijo de Dios, que no fuera laboralmente, nunca se había visto en tal privilegio. Pero por culpa de eso, muchas de las ángeles empezaron a odiarla, debido a que Zadkiel era el más guapo de los arcángeles, por debajo de Lucifer.
-Por cierto Caela, mi padre me ha hablado mucho de tí. -¿A si?- dijo Caela sorprendida. -Si, me ha dicho que eres muy responsable, te tiene en muy alta estima y te valora mucho- dijo Zadkiel- por cierto, busco esposa. Por si te interesa.
Antes de irse, Zadkiel le dió un beso a Caela en el cuello, ella no sabía como reaccionar, se fue al despacho y encendió el oráculo para contárselo a Dios.
-Buenas Caela, ¿cómo te ha ido?- dijo Dios. -Eh, me ha pasado una cosa increible- dijo Caela sonrojada- su hijo Zadkiel me ha besado. -Vaya, eso si que es una sorpresa, Zadkiel es muy popular con las chicas, pero nunca ha besado a una. Estará interesado en tí.
Lo que le dijo Dios le ha impactado, y se pregunta "¿Estará bien salir con el hijo de mi jefe?"
-Caela, si tanto le interesas a mi hijo, te haré su prometida, total tiene edad de casarse- anunció Dios. -¿¡Qué!? Señor Dios ¿seguro que está bien?- dijo Caela muy nerviosa. -Claro. Te conozco y veo que mejor que seas tú que otras ángeles del montón. Además, sientes algo por mi hijo.
Caela apagó el oráculo y ahora no solo se tiene que hacer cargo del Reino Celestial si no que está prometida con el arcángel Zadkiel.
