★𝐌𝐢𝐬 𝐨𝐣𝐨𝐬 𝐧𝐮𝐧𝐜𝐚 𝐡𝐚𝐛í𝐚𝐧 𝐦𝐢𝐫𝐚𝐝𝐨 𝐚 𝐚𝐥𝐠𝐮𝐢𝐞𝐧 𝐜𝐨𝐧 𝐭𝐚𝐧𝐭𝐨 𝐚𝐦𝐨𝐫, 𝐚𝐬í 𝐜𝐨𝐦𝐨 𝐭𝐞 𝐦𝐢𝐫𝐚𝐧 𝐚 𝐭𝐢
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Berk, tierra de los vikingos, un lugar impregnado de mitos y leyendas, dos jóvenes destinos se entrelazaron...
Por otro lado, Valka Haddock, se llevo una gran sorpresa al darse cuenta que miles de barcos con jaulas iban en dirección a donde ella junto a los demás vikingos y jinetes se encontraban
Varios dragones asesinos trataron de atacar a ella y Brinca nube, aunque ambos fueron más ágiles y fuertes, logrando así escapar de aquel lugar
—Vamonos Brinca nube— ordenó la mujer
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Las hermosas nubes rodeaban el cielo, Chimuelo rugia para intentar encontrar a aquella hermosa Furia Luminosa, no pasó mucho tiempo para que ambos dragones enamorados pudieran estar juntos de nuevo
Ambos estaban felices de estar juntos, volaron juntos por varias horas, ambos en una hermosa sinfonía, Chimuelo nunca había experimentado algo parecido a eso, pues a pesar de ser un dragón fuerte y poderoso, jamás había viajado solo, sin la compañía de su mejor amigo
Aunque aquel dragones debía aceptar que estar junto a aquella Furia Luminosa era algo maravilloso para el
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Todos en Berk estaban celebrando y festejando por estar nuevamente acentuados en aquel lugar donde habían arribado hace pocos días
—Hijo, pensé que estabas perdiendo la razón, pero este lugar no estaba nada mal— balbuceo Bocón quien ya se encontraba algo ebrio
—Se suponía que fuera una solución temporal— dijo Hipo
—Hubo democracia... todo el mundo piensa que esta fue una mejora, bien hecho Jefe— felicito Ereth
Hipo no decía nada, pero el sabía que aquel lugar no estaba ni cerca de ser el lugar que quisiera
—Hipi, un momento, oye... te he estado viendo como caminas, no cojees amigo, nadie se casara con eso— indicó Brutacio con una risita
—¿Qué quieres que haga?, tengo una prótesis— protestó Haddock
—Si, yo también— secundo Bocón
—Y yo una gemela parásito y no me ven cojeando por la vida— recalco el rubio con enojo, Hipo solo rodó los ojos, ignorando completamente lo que decía su amigo
Mientras Brutacio le daba indicaciones de cómo caminar, Valka llegó preocupada por lo que había visto anteriormente
—Mamá, ¿Estás lastimada? ¿Qué pasó haya afuera?— preguntó Hipo al mirar a su madre agitada
—No se como, pero, Grimmel... esta rastreandonos— declaró Valka
—Esto es culpa de esos Hobglotones— afirmó Bocón con preocupación
