la tienda de helados de nightmare [ nightcross ]

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Epic había perdido por completo a su amigo, al principio lo seguía con la mirada, pero se distrajo solo por un momento y ya no lo encontro, esperaba que estuviera bien.

El de ropas moradas estaba junto a Dust, killer y horror, este último sujetaba feliz ese oso drogadicto que tanto quería.

Cuando se fijó en algo

—donde está cross?—

De la nada todos se pusieron a pensar en su amigo monocromático que hace un rato no se veía.

—debe estar en el baño— dijo dust convencido aunque no tenía ninguna prueba segura.

—somos esqueletos— horror aveces no entendía la lógica de su amigo

—ah. . . Entonces no sé—

—tranquilos, está con nightmare, pero, no se porque demora tanto, seguramente solo se atraso?—

—quizas está muerto—

—KILLER!—

—que desubicado de tu parte— dijo error que porfin se unía a la conversación, no tenía nada mejor que hacer.

Siguien y Seguin diciendo estupideces, una que otra broma y ya se olvidaron del tema inicial, que se podía esperar de ellos? Si apenas se acuerdan de dónde está la casa cada que salen a comprar.

Error no se había fijado en que alguien ya conocido lo estaba viendo de lejos, esperando el momento de aparecer y hacer lo que más sabe, meter la pata.

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Esto era raro, hace un tiempo ni una sola palabra escapaba de nuestras bocas, pero de igual forma todo estaba en tanto paz entre nosotros dos, no era uno de esos momentos incómodos como los tantos que tenemos a menudo, por primera vez, o segunda más bien, puedo decir que me siento cómodo al lado de nightmare.

Y creo que el igual se siente así al lado mío.

Después de lo que le dije, fuimos a comprar algo para comer, todos tendrían hambre, era bastante tarde ya.

Recorrimos varios de los puestos de comida, para encontrar algo que nos pueda gustar a todos, pero nada nos convencía, todo tenía pinta de plástico o simplemente no daba mucha confianza que digamos.

—agh todo aquí da asco— nightmare veía cada uno de los puestos sin encontrar nada que se viera decente —esto fue pésima idea—

—no lo encuentro tan malo, mira, ese lugar se ve bien, y venden cosas dulces—

—no me gustan los dulces—

—pero, vendes helados—

—y eso que tiene que ver?—

—emn. . . No se? —

La pesadilla se rió de el, en su mismísima cara, pero Cross no se podía enojar, porque era un cobarde y porque a él igual le había causado gracia su respuesta

—sera mejor que vayamos con los demas, se estarán preguntando dónde estamos—

—si, tienes razón— cross empezó a caminar al lado de nightmare, era raro, cualquiera que los viera pondría suponer que eran buenos amigos o hasta más que eso, pero eso no tenía nada que ver con la realidad, solo eran compañeros de trabajo, específicamente, el era su jefe.

Al llegar donde se suponía que se encontraba su equipo encontraron a otras personas.

—oh mier—

No me dió tiempo de terminar, cuando nightmare ya me había empujado sin ningún cuidado a un basurero bastante grande, cuando quise salir empujó mi cabeza hacia abajo impidiendomelo, con una seña me dijo que me callará, no se cómo nadie se atrevió a ver cómo estaba, estábamos en un parque público, habían muchas personas viendo como me ahogaba con basura y ninguna se movió, esa es mi fe en la humanidad.

Le hice caso, no me moví por un buen rato, después de un par de minutos, el olor a muerto no se siente tanto, aunque no se cómo me lo sacaré de la ropa, yo que me había vestido bonito.

Podía escuchar la voz de nightmare y la de los demás, estaban ¿Discutiendo? No no, teniendo una pelea de ¿rap? Escuché algo de una competencia, seguramente se referían a la copa de los heladeros, no entendía porque tanta emoción por esa competicion que no la conocía ni la persona que la invento, pero para ellos sonaba tan importante.

Todo acabo cuando escuché las sirenas de los policías, iba a salir a ver qué pasaba, no, no puedo meterme en problemas, no ahora, mejor me quedé ahí, tratando de entender que estaba pasando, no estaba funcionando.

El silencio se hizo presente en el lugar, por fin saque la cabeza, me daba asco a mi mismo, porque me tenian que pasar estás cosas a mi? Tanto me cuesta juntarme con gente normal?

Todo estaba vacío, los juegos, antes llenos de personas con filas bastante largas y luces que hacian que te doliaran los ojos, ahora estaban apagados, nadie los vigilaba

—cuanto tiempo me quedé ahí?—

No entendía porque hubo tanto cambio, ¿Me habré quedado dormido?

Me dirigi al estacionamiento, dónde estarían esperando, o eso suponía, pero me equivoqué, no había nadie ahí, me habían dejado solo, sin dinero y con hambre, lo que más le sorprendía era el hecho de que epic, epic su hermano de otra madre, su amigo desde kinder igual lo había dejado, maldecia a todos en este momento, los adiaba.

. . .

Nah, mentira, se sentía traicionado, pero no podía odiar a nadie, más o menos, al único que le tiene rencor es a su padre, que le dijo que iría a dejar las cartas para santa Claus y nunca volvió, el hijo de

Eso no era lo importante ahora, tenía que encontrar la manera de volver, si no tendria que volver a dormir en una banca en algún parque, no quería volver a vivir esa experiencia.

Trato de llamar a todos, epic, nightmare, horror y a quien sabe más, pero no había manera, sus teléfonos estaban apagados o no contestaban, que haría ahora? No tiene a nadie más.

Ahora era un chico que caminaba solo por las calles, con olor a basura y cáscaras de frutas en toda su ropa, que divertida era su vida, la amaba.

De una o otra manera encontró un auto lleno de hippies, como lo supo? Estaba pintado con flores y olía a marihuana, en un giro asombroso de eventos me aceptaron en su clan, y me llevaron a mi casita, además de enseñarme su filosofía y el como vivir como artista, el paso uno es aprender a comer absolutamente nada.

Cuando al fin pude llegar solo pensaba en darme un baño y en como fingire estar enojado con epic para que esté me compré un chocolate, mi plan era perfecto.

Al dia siguiente, cuando fui al colegio no encontré a mi compa en todo el lugar y mucho menor me respondia los mensajes, fue un día tan aburrido, no pude poner atención en ninguna clase por estar pensando en que le pasó algo, el nunca hacía eso.

Cuando al fin se termino la jornada quise ir a su casa, pero me acordé que tenía que trabajar dónde dream, estaba cansado pero necesitaba ese dinero, así que con determinación fui a trabajar, no había hablado con dream desde antes de ayer y ink no me había mandado mi imagen de piolín del día, tenía el presentimiento de que algo pasaba.

Y tenía razón, la tienda todavía estaba cerrada, no había rastro de esos tres, no sabía muy bien que hacer.

Nadie me contestaba.