Mi primera vez

TREINTAISEIS

NO QUERIA HACERLO, PERO TOCÓ VANDA XD, HICE UNA NUEVA CUANTA EN INSTAGRAM, ASI QUE, SI LO DESEAN, VALLAN Y ME SIGUEN, AUNQUE, NO E ECHO NADA DE NADA.

TENGO PENSADO HACER LAS ILUSTRACIONES A MI MANERA, DEJANDO DE LADO LOS DETALLES Y ESAS MADRES >;^

ME PUEDEN ENCONTRAR CON EL MISMO NAMECITO 7W7

YA SABEN, LA PEREZA ES UN DON QUE ME HAN DADO MIS PADRES :3

SIN MAS, LES DEJO EL CAPÍTULO

Ambos cazadores tomaron rumbos diferentes, Tanjiro saltó y se ubicó en la punta de un árbol, aunque la poca luz no le favorecía para detectar a un demonio, su excelente y desarrollado olfato si. El peli rojo miró a todos lados, la luna no había salido, y no había luz en el bosque. Sus ojos detectaron las luces del pueblo, a media milla del bosque donde se ubicaba.

Las pequeñas brisas sacudían su cabello, el aire era tan bueno, que cerró sus ojos y se concentró incluso más, tenía que matar por lo menos a cinco demonios esta noche, si los dejaba con vida, era casi probable que ese mismo demonio matara a decenas de personas inocentes, ya había dejado que muchos murieran, no podía permitir que más personas murieran.

Al cabo de unos segundos, un olor a sangre lo puso alerta, el peli rojo no dudo en saltar y empezar a correr tan rápido como podría, el olor a sangre era fuerte. Su corazón latía como loco.

(Maldición.)

Los árboles perdían su forma, la velocidad a la que iba Tanjiro Kamado no le permitía ver las hojas como mayormente las podía ver al caminar sin preocuparse de algo. La tierra se levantaba como polvo apenas el pasaba como un rayo. El olor era cada vez más fuerte.

-¡Ayuda! -Un grito de ayuda fue escuchado por el chico, los ojos de Tanjiro se abrieron ligeramente-. Por favor, ayuden a mi hermano -el gritó no era para el, su vida ya estaba acabando, el niño sabía que cuando el demonio terminara con el, iba por el pequeño niño de alrededor de cuatro años. Estaba agonizando, y entre su agonía, solo pensaba en que alguien pudiera salvar a su hermano-, por favor, alguien... Alguien.

Sin dudarlo, Tanjiro se abalanzó hacia el demonio, con su pie, lo golpeó en el pecho y lo lanzó, el demonio se estrellaba con unos cuantos árboles, las venas eran notorias en las manos del chico. Tanjiro tenía en sus manos el cuerpo del niño, ahora, muerto.

-... -No sabia que decir, el niño apretaba la mano de su hermano-, ¿estás bien? -Sabia que esa pregunta era tremendamente estúpida, el niño no estaba bien en lo absoluto-. Vamos.

-No. -Se negó de inmediato.

Tanjiro mordió su labio interior con fuerza.

-Tu hermano...

-No lo quiero dejar solo, quiero llevarlo a casa. -Dijo, su voz fue débil, el niño no se encontraba bien.

Tanjiro entendió, pero no podía llevar el cuerpo del hermano, ya muerto, con el, sería más carga, y además, le faltaba carne y un brazo.

-No puedo llevarlo -explicó, sintiendo pena por el niño, quien se aferraba más al cuerpo de su hermano-, no hay tiempo, vamos. -Tanjiro lo tomó del brazo, y trató de separarlo, pero el niño se rehusaba a ceder, aún si no estaba llorando, la mirada del niño estaba perdida, como si fuera un gran velo negro, el cual no podía penetrar la luz que todo lo ilumina.