Mi primera vez

CUARENTA

*Entrada épica papus*

Si, llegué, y esta vez, dejaré ilustración de mi bello terremoto ÙwÚ. Si todos los que leen este famstic no han leído el manhwa que utilize para la referencia, déjenme decirles que, ¡¡ME HAN DECEPCIONADO UnU!!

SI ALGUNO DE USTEDES SI LE SABE, NO LO DIGAN Y DEJEN UN CORAZÓN MORADO JAJAJ :3

RECUERDEN VOTAR Y HACERME BRUJERÍA PARA COMER 👀

FINAL DE LA HISTORIA DE SENJURO TT.TT

EL CAPÍTULO SERA LARGO, Y ESPERO LLOREN CONMIGO ;^

No era una buena señal en lo absoluto, para nadie lo era, tener un ciclo de calor a esa edad no era bien vista, por lo general, a esa edad a los jóvenes se les va inculcando lo básico.

Senjuro Rengoku ya se encontraba de maravilla, no tenía ningún daño, todo en el se encontraba sano. Su sistema respiratorio mejoró mucho luego de su primer ciclo.

No conforme con eso, su padre empezó a moderar su tono de voz, ya no escuchaba gritos, ni ser llamado inservible, ahora, en aquella casa solo hay silencio cómodo para el. Sin maltrato ni miedo.

Para Senjuro, era muy extraño ser tratado de esa manera, fue un cambio que ocurrió de la noche a la mañana.

Estaba sumergido en sus pensamientos, mientras barría, no se percató de la presencia de su padre.

—¿Qué estás asiendo? —Preguntó.

Senjuro se detuvo en seco, aunque ya se estaba enseñando al tono bajo y precavido de voz de su padre, no podía dejar de sorprenderse.

—Yo... yo solo limpio la entrada, cuando salí a comprar unas cosas, noté mucha basura. —Respondió, apretando la escoba y bajando la mirada.

Bien, cuando termines, duerme, tus ojeras están cada vez peor. —Indaga, sin darle tanta vuelta al asunto.

Senjuro asintió.

Su hermano no había vuelto de su misión, y no conforme con eso, los elogios y regalos no dejaban de llegar, cuando todos los chicos y chicas alfas jóvenes se enteraron de que es omega, no dudaron en empezar a cortegearlo, le dejaban dulces y telas suaves, aunque al principio no quería recibir nada, para no darles falsas esperanzas a ninguno, su padre dijo que le sacara provecho.

Senjuro se siente mal por eso, y más por que sabe lo que significa aceptar los regalos de Alfas interesados.

Mordió su labio, y siguió barriendo, luego de terminar, una chica más alta que el, de aproximadamente 17 años, le entregó una tela, la chica lo a estado cortegeando desde hace muchos meses. De hecho, aún si sabia que no sabía su género, ella estaba dispuesta a tenerlo.

—Mu-muchas gracias. —Nervioso, tomó la tela con cuidado—. Es suave, con esto, podré hacer un kimono o una sábana. Es preciosa. —Sin darse cuenta, sus mejillas se tornaron de un color rosado, no tan evidente, pero lo suficiente como para que la chica se diera cuanta.

—Lo sé, por eso la compre, solo para ti. —Afirmó.

Senjuro estaba más que agradecido con la chica alfa.

—Me da pena no poder darte algo, siempre soy el que tiene que recibir obsequios tuyos... Me siento muy apenado. —Habló, su voz estaba siendo tan suave, que a la chica alfa se le hizo adorable.

—Me puedes dar algo a cambio, no será nada más que un simple abrazo... ¿Se puede?

Sus cortejos han estado presentes desde hace ya tres años, y aunque sabia que era muy temprano para hacer eso, no dudo en hacerlo. Era más que obvio que Senjuro Rengoku iba a ser un Omega, y uno muy adorable.