La premiere acabó y Nadia insistió que que fuéramos a su casa ( aka la casa de Isaac ), a terminar la noche.
— Didi yo no voy a poder ir, pero id vosotros, ¿ vale ? — dije mientras sentía la mirada de Isaac clavada en mi perfil.
— ¿ Y eso ? — Me preguntó mi amiga.
— Si amores, yo creo que me voy también — Wiss siempre intentando ayudarme.
— Nooo chicas, venga, un ratititito — pidió Fati.
Wiss me miró para saber qué responder, así que de una manera u otra, acabé asintiendo.
Fuimos hacia la casa de Nadia y cuando llegamos nos instalamos en el precioso salón que tenían.
— Eh...Mery y yo vamos a coger...algo de la cocina — hablo mi mejor amiga.
Cuando entramos paso lo que sabia que pasaria.
— Tia puedo saber por que has desaparecido de nuestra propia premiere, por que el chico al que supuestamente odias y por el que te mudas a otro continente no deja de echarte miraditas y...?
— Wiss, relájate.
Y tuve que contarle lo de la conversación en la premiere.
— Es un egoísta, que injusto es que no me puedo creer que... — Y paro de hablar. Alguien había entrado en la cocina, yo estaba de espaldas a la puerta así que me di la vuelta para encontrarme a una Aya y con un Isaac con cara de pánico a su espalda.
No hablé, no dije nada. Agarre de la mano a Wissal y salimos de la cocina.
— Sis, ¿esa es...? — empezó mi amiga.
— Si, Aya — hable cogiendo mi bolso y sacando de él, mi lip gloss.
— Mery... — Me llamo Isaac.
— ¿ Qué me vas a decir ahora ? — Pronuncie mientras me repasaba los labios con mi brillo.
Me miró a través del espejo y pude ver algo...distinto.
— ¿ Qué pasa ? — Cuestione dándome la vuelta para mirarlo.
— Ven — me indicó una puerta y fui tras él, después de dudarlo un momento.
Me llevo a su oficina, muy minimalista. Me gustaba mucho su gusto, no podía negarlo.
Cuando entramos Isaac se alejó unos pasos de mi y se pasó las manos por la cara.
— ¿ Qué pasa ? — Le pregunté preocupada.
— Necesito que dejes de hacer...eso.
— ¿ Hacer que ?
— Olvídate de Aya de una vez. No es nadie.
— Te ibas a casar con ella.
— No la quería, ni la quiero.
— ¿ Y se puede saber que quieres ? Por qué...
— Quiero que te quedes. No me refiero a Madrid. Quiero que te quedes, en mi vida.
— Sabes que no...
— ¿ No que ? Dime que no sientes lo mismo que yo.
— Isaac...
— Dimelo
— No...no es así de fácil, ¿ vale ? — Logre decir.
— ¿ Por qué ?
— Te ibas a casar con ella — repetí.
— Sabes que esa no es la razón.
— Bueno, vale. A lo mejor esa no es la razón, pero eso no importa.
Isaac dio un paso adelante y yo di uno hacia atrás. Supe que eso le dolió, aunque no paró. Dio otro adelante. Y otro.
— Deja de hacerme esto. Sé que no es lo que quieres — hablo cuando estaba a menos de un metro del otro.
— Deberías dejar de acercarte.
— Esas no son las palabras mágicas, Mer.
— Isaac, me voy el mes que viene.
— Esas no son las palabras mágicas — y dio otro paso hacia mi.
— ¡ Vale ! Vale. — Accedí levantando las manos.
— Vale, ¿ que ? — Sonrió.
— Que no se te suba a la cabeza.
— No deberías hablarme así Mer, ¿ o quieres que me acerque un poco más ?
— Me voy a ir...a casa.
— Te llevo.
— No. — Solte — Osea, tengo que llevar a mis amigas.
Salimos de su oficina y nos encontramos con toda la gente que había en esa casa en medio círculo, mirándonos.
— ¿ Qué...hacéis ? — Pregunte.
Ya no había rastro de Aya
— Pues esperarte tía — dijo Wiss — Isaac, te la voy a robar ya, ¿ vale ?
Me despedí de Isaac, si no me habría secuestrado, y volvimos a casa.
Les conté a las chicas y a mi hermano lo que había pasado y casi me mandan de vuelta a casa de Isaac.
Nada más llegar a mi cuarto y sacar el móvil del bolso me llego un mensaje de un número desconocido.
Desconocido: ¿ Has llegado a casa ?
Mery: ¿ Quién eres ?
Desconocido: Sabes quien soy Mery.
Mery: ¿ Quién te ha dado mi número ?
Isaac: Tengo mis contactos.
Isaac: Vamos a cenar mañana.
Isaac: Pasaré a buscarte.
Isaac: Mery, si me sigues dejando en visto voy a ir a tu casa. Y sabes que no es broma.
Isaac: Me estoy poniendo los zapatos.
Mery: Como pongas un pie fuera de casa...
Isaac: Hasta mañana preciosa.
Fue después de ese día, cuando supe que nos íbamos a perder, uno en la mirada del otro.
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TODO LO QUE QUIERO ES UN MAKTUB
Storie d'amoreMariam es una actriz que soñó con casarse toda su vida. Isaac es un empresario exitoso que sueña con tener una familia Un día sus caminos se topan, y digamos que no se llevan del todo bien pero...¿ será uno el maktub del otro ?