Reanimando su corazón: FreenyBecky (ADAPTACIÓN)

05

2 semanas después

POV Freen

Estoy en pabellón con un caso complicado. Un hombre de casi 30 años comenzó con dolores de cabeza, visión borrosa, mareos y vómitos. La radiografía no nos mostró nada, como algún golpe pero cuando le hicimos el escáner, este mostro que un coagulo de sangre había reventado y está teniendo una pequeña hemorragia, que si no se paraba, moriría lentamente.

Estoy terminando de suturar, nos ha costado casi 8 horas poder controlar la hemorragia sin tocas nada. Ahora los últimos puntos y a esperar que se recupere.

La puerta del pabellón se abre bruscamente, dejando ver a una doctora Armstrong bastante enojada. Con todo lo que le he hecho estas últimas semanas, seguro que me odia.

-doctora Armstrong estamos en un cirugía, salga de mi pabellón- digo seria.

-el día que lo compre será suyo- me dice de vuelta. Cuando la miro hay algo que no me gusta. Algo me dice que lo que se viene no me gustara.

-¿Qué quiere?- digo. Termino de colocar el último punto en el cráneo del hombre.

-en este momento usted ya no me sirve- dice secamente. No hay sentimientos en la frase.

-Y entonces, ¿Qué hace aquí?- digo. Limpio la herida y coloco unas cuantas gasas para dejar los puntos limpios.

-mirar por última vez a la asesina de un pequeño niño- levanto la mirada y

-¿perdón?-

-lo que escucho. Gracias a usted y su estúpida guerra contra mí, un pequeño bebé de apenas 1 año de vida se está muriendo en una cuna- dice. Sus ojos están cristalizados y no entiendo nada.

-¿de qué está hablando?-

-si me odia y la cobra contra mí, no tengo problemas, pero cometió un error. Con la vida de un paciente no se juega. ¿Tanto le costaba revisar al pequeño? Dios... él se está muriendo... no puedo hacer nada... necesitaba una evaluación por un neurocirujano y aunque no nos llevemos bien, debo reconocer que eres la mejor. No sé cuántas interconsultas le mande pero todas ellas eran de vueltas y la mayoría escritas con estupideces que usted... -me indica con su dedo –escribía-

-pe...- me interrumpe.

-no hable. Solo escuche. Sé que no le caigo bien, pero, ¿Qué culpa tiene ese bebé? ¿Por qué él tenía que pagar por el odio que me tiene?... usted es un monstro y no estoy segura que sea el mejor madre para Aroon- dice llorando furiosamente.

-no le entiendo. ¿Qué me quiere decir?-

-que por su culpa un bebé de un año se está muriendo en una habitación de este hospital. Tuve que buscar a otro neurocirujano pero ya era tarde... hace unos minutos el bebé entro en estado de coma, de uno del cual no saldrá jamás- dice llorando. Detrás de ella aparece mi madre quien aprieta sus hombros para tranquilizarla.

-no entiendo- digo. ¿Dónde quiere llegar?

-por su estúpida venganza contra mí, un pequeño inocente se está muriendo. Me negó durante una semana sus conocimientos. Jamás le pedí a Freen Sarocha Chankimha que fuera a verlo. Le pedí varias veces a Doctora Chankimha que fuera a ver a Ángel, pero nunca llego, porque no supo separar los problemas personales con los del trabajo- dice llorando.

-mi niña no ganas nada con esto- le dice kanya.

-pero sabe algo. Usted gano. Yo me rindo. Siga en su mundo de egocentrismo que yo seguiré haciendo lo que más amo, salvando a pequeños pacientes que necesitan de un médico- dice. Pasa por el lado de mi madre y sale de pabellón.

Miro a mi madre, quien niega con la cabeza. ¿Qué mierda paso? ¿Qué fue lo que hice?

-mamá, me puedes explicar ¿Qué fue todo eso?- le pregunto. Acabamos de salir de pabellón, mi madre ha estado en silencio todo este tiempo.

-te dije hace unos días que dejaras esa estúpida idea de vengarte de Becky. Se cayeron mal, mutuamente pero ella jamás te trato mal-

-¿Cómo no tratarme mal? Me grito y me dijo que no era el mejor madre para Aroon- mi madre niega con la cabeza.

-Freen yo vi las interconsultas que te mando, por lo menos deberían a ver sido unas 15 y todas ellas volvían escritas con frases como "vallase al demonio", "no trabajo con niñitas", por Dios Freen, ¿Qué tenías en la cabeza cuando mandabas esas cosas?- dice mi madre.

-creo que nada. Pensé que eran para ellas- digo meditando en lo que le escribía.

-¿nunca viste el nombre de la interconsulta?-

-no. Cuando me decían que eran de ella, solo las devolvía- digo. En eso entra Charlotte hecha una fiera.

-Freen Sarocha Chankimha, ¿Qué has hecho?- me dice.

-¿Qué? ¿Acaso es el día de echarme la culpa de todo?- le digo.

-de todo no, pero de esto si- me lanza una carpeta a la mesa. La tomo y la abro. Abro mis ojos. Es la renuncia de la señorita Armstrong.

-¿Qué tengo que ver yo con esto?- digo.

-lee la hoja que sigue- busco la hoja y leo una carta escrita a mano, donde ella explica que no puede trabajar con gente que no sabe diferenciar los problemas y que por eso un ser inocente haya fallecido.

-no entiendo- le digo.

-El paciente que estaba tratando la doctora Armstrong acaba de fallecer. La ultima resonancia mostró que la masa que tenía en el cerebro se reventó matando más del 60% del cerebro. El pequeño hizo un shock séptico, ya que la masa infecto todo en su organismo, sobre todo la sangre. Ángel falleció en la compañía de sus padres- dice seria pero triste.

-escuche que lo vio otro neurocirujano- digo.

-sí, pero el hospital no puede pagar esos gastos. La doctora Armstrong pago esa consulta- dice Charlotte.

-pero ella tiene dinero, no tiene problema en pagarlo- digo. Por Dios, ella es millonaria. Tanto mi madre como Charlotte se dan una mirada -¿Qué?-

-es cierto que el padre era millonario y que es su heredera pero la abuela de Rebecca no quiere que sea médico y le ha cerrado las puertas de todo. Ella actualmente vive con unos poco ahorros que le queda y con el sueldo que pensaba ganar en el hospital, pero el neurocirujano que consiguió le cobro muy caro por ser una emergencia y tuvo que dar todos sus ahorros- dice mi madre.

-¿le crees ese argumento? Nunca pensé que fueras tan ingenua mamá-

-lo creo porque conocí a su abuela hace unos días. La mujer no puede ser más insoportable- dice mi madre.

-y testaruda y llevada de sus ideas. Me exigió que despidiera a su nieta, le dije que no y salió como alma que lleva el diablo. No entiendo porque es mujer no quiere que su nieta sea feliz- dice Charlotte.

-esa joven no ha tenido una vida fácil pero aun así ella está de pie, luchando. Por favor Freen deja de ser así con ella. No se lo merece- dice mi madre.

-en eso estoy de acuerdo. Ella a cuidado a Aroon como un hijo- frunzo el ceño.

-¿Por qué lo dices?

-porque lo va a ver todos los días, le habla y aunque no lo creas Aroon ha mejorado muy rápido. Está más activo, su abdomen ha bajado y la infección casi no está presente. Las mismas enfermeras de la Neo se han sorprendido. Hasta le compro un peluche- dice mi madre.

-¿el elefante gris que está en la cuna?- pregunto.

-ese mismo. Ella ha sido tan tierna con él y tan maternal, que si algún día me lo preguntaran, ella parece más la madre de Aroon que su propia madre- dice. En eso entra la secretaria de Charlotte pálida y muy nerviosa.

-¿Qué es lo que ocurre mujer, para traer esa cara?- dice Charlotte.

-señor, acaba de llegar una ambulancia-

-siempre llegan ambulancia al hospital, Laura- la regaña Charlotte.

-si lo sé, pero no siempre llegan con algún funcionario- dice seria.

-y ¿a quién trajeron?- le digo.

-a la doctora Armstrong- Mierda.