Vientre alquilado. | James Maslow |

Capítulo 18.

[...]

Febrero 16/ Lunes 12:03 p.m.

-¿Te encuentras bien? -preguntó mientras se sentaba en una silla junto a la cama.

Habían pasado ya dos días desde que James le dijo lo que le dijo.

-Estoy pensando... -susurró recordando cada palabra que dijo James. Estaba dormida, no muerta.

-Escuchaste todo lo que dijo Maslow, ¿cierto? -levantó las cejas.

Lo miró y después vio los aparatos que traía en las manos.

-Cierto, no pude responderle a causa de la amnesia, pero vaya que lo escuché. Además de que no tenía idea de que responderle.

-¿Te quedarás con el bebé?

(Con James)

Después de haber dormido dos noches fuera de casa, se dirigió a ella para quitar preocupaciones en Miranda.

Con los ojos entrecerrados y una cara terriblemente triste, entró a su gran casa.

-¡James! ¡cariño! -corrió a sus brazos con los ojos hinchados-, ¿dónde estabas, amor? -comenzó a agarrar desesperadamente la cara de él-. No sabes lo preocupada que me tenías -abrazó a James con mucha fuerza.

-Déjame solo un rato... -subió las escaleras arrastrando los pies.

Se encerró en su recámara, pero eso si, con Miranda del otro lado de la puerta.

-¿James? ¿amor? ¿qué pasa? -dijo llorando-, ¿por qué lloras?

No respondió y ahogó sus gritos en la almohada.

-Te dejaré solo ahora, pero mañana me explicarás que sucede.

El silencio abordó las afueras de la recámara.

-¿Por qué, _________? ¿por qué me enamoré así de ti? -miró el techo y se puso la almohada en la cara.

(Con _________)

-Voy a tenerlo conmigo.

Carlos soltó un aire de alivio.

-No sabes lo feliz que me haces -sonrió y tomó las manos de su amiga entre las suyas-. Yo lo cuidaré... Puedo ser un padre para él...

-Eso no será necesario...

__________ volteó por instinto a la puerta. Sonrió.

-Estás aquí... -susurró.

-Estoy aquí... -sonrió.

-Los dejo solos -dijo Carlos y después salió.

-Tengo que pedirte perdón por haberme alejado de ti... Apenas me enteré hace dos horas que estabas aquí, y me vine tan pronto pude -se sentó con delicadeza alado de ella.

-No hay nada que perdonar. Fue mi culpa por amar a alguien que no debo amar.

-Yo te quiero en verdad, _________.

-Lo sé... Pero yo amo a James...

-Dame una oportunidad, por favor.

-Dame tiempo, ¿si?

Asintió levemente con la cabeza.

Acarició el cabello de ella y suspiró.

-También tengo que decirte que... Yo me voy a encargar de tu bebé.