TE AMO NERU, LA VILLANA DEL FANFIC MÁS HORRIBLE QUE HE LEÍDO Y DONDE REENCARNÉ

Las esperadas audiciones

Una semanita larga ha pasado, las audiciones oficiales para el concierto Vocaloid se harán el día de hoy más tarde. Durante estos últimos días me he estado viendo con quienes serán los jueces, entre ellos están el profesor Big Al, y los otros alumnos estrella que él escogió por sorpresa para pasar sin hacer audiciones, quienes son Gakupo y Luka. El presidente del consejo estudiantil y la chica más admirada de la academia, ese dúo tenía que pasar sí o sí. Por otro lado, sé que Neru ha estado practicando muy duro para poder pasar las audiciones, yo le prometí que no metería mano para que pasara, sé que seguramente lo hace bien. Sin embargo, en la historia Neru por un solo punto no logró entrar, y se quedó como participante de repuesto, por eso en el penúltimo capítulo lanzó a Miku de las escaleras, quería cantar en su lugar. ¿Si le doy 10 logrará pasar? Seguro lo hace de 10... ¿¡Y si no!? Cómo sea, en el fanfic entendí que lo más probable era que la Miku  original le daba nota baja a Neru porque no le caía bien, y yo dije que seré sincera con mi calificación. Así que supongo que no habrá problema alguno.

Estoy en el receso, necesito un buen descanso porque sé que estaré aún más estresada cuando las audiciones comiencen, estoy con los Kagamine y Gumi, con quién también me he juntado últimamente. Con ellos ahora, simplemente hacemos pláticas mundanas que van acorde a la historia.

—Y en resumen, esta es mi patética historia de cómo fue mi primer beso... ¡Con Piko! Y me arrepiento mucho.—Gumi decía casi que llorando.

—¿Y tú Miku-chan? ¿Ya tuviste tu primer beso? — Me preguntó Rin; mierda, ni en mi vida pasada tuve la oportunidad de besar a alguien con 18 años, y si no hubiera muerto, muchos años más seguiría así.

—Pues no... Lo admito, no he besado a nadie.—Traté de sonar dramática, aunque en realidad no me importa.

—Vaya, 16 años y no has dado tu primer beso, que patética.—Neru se unió a la conversación y yo volteé muy feliz al verla.

—¡Tú puedes tener el honor para dármelo! — Hice mis labios como piquito y me acerqué a ella, que de inmediato me alejó.

—Iugh ¡Que asco! Ni te atrevas.—La cara de repulsión hacia mí que tenía Neru se me hacía tan linda.

—Oh, Miku-chan entonces era verdad que eres de esas chicas Yuri.—Me dijo Gumi; ¿Chicas Yuri? ¿Así les dicen a las lesbianas aquí? Bueno, supongo que es el equivalente de decirles tortilleras o lenchas, como solían hacerlo en mi mundo, chicas Yuri no suena tan mal.

—Seh, ¿Aquí no hacen bullying por admitirlo, verdad? —Se me salió decir eso de los nervios, como si repentinamente recordara tiempos oscuros.

—¡Oh! ¡Claro que no! Sé que aquí hay chicas Yuri o chicos Yaoi y suelen tratarlos bien.—No, Gumi, no lo digas así que no me lo puedo tomar enserio... ¿¡Chicos Yaoi!? Que carajo.

—Miku-chan, ya sabemos cómo eres y para nada te trataríamos mal —La gemela me abrazó.— ¿Verdad onichan?

—Perdí toda oportunidad con ella... ejem, digo, somos tus amigos desde siempre Miku-chan, y jamás dejaríamos que alguien te trate mal por tus preferencias.—Sentenció Len, y de alguna manera al escucharlos, no pude evitar sonreír, me recuerdan un poco a mis únicos amigos que solía tener.

—¿Y tú Neru? ¿Qué dices? —Gumi le preguntó.

—A-así que iba enserio...—Muy apenas alcancé a escucharla porque lo dijo en bajo. A este punto más bien se niega a creer que lo que le digo es cierto.

—Ay, Neru, aunque admito que a veces disfruto decirlo para molestarte, cuando digo que me gustas va muy enserio, pero no te preocupes, no te obligaré a hacer nada que tú no quieras.