Un inesperado amor

Capítulo 14

Livvie

Hoy me levanté tarde, pero no me importó ya que era domingo y no trabajaba. Me puse música de fondo mientras ordenaba mi habitación. Cuando sin darme cuenta alguien petó la puerta de mi habitación. 

-¡Adelante!-grité por encima de la música

La persona del otro  lado de la puerta la abrió y entró. Cuando ya estaba lo suficientemente dentro de mi habitación me di cuenta de que se trataba de Sunny.

-Ah, hola Sunny

-Hola Livvie

-Que tal dormiste?-le pregunte antes de que me acribillara con preguntas

-Bien, que escuchas??

-Siempre de 3AM

-No  conozco ese grupo

-Pues yo desde que los escuché no paro de escuchar sus canciones, es un grupo...

-Que siiii, ya me contarás, ahora lo importante-dijo poniéndose seria- Desde cuando cantas? Lo ensayasteis antes de subir al escenario? Sabes que teníais mucha química y...

-Oye, oye, oye, relájate, ve poco a poco. Canto desde que era pequeña pero nunca me atreví a cantar en público como expliqué ayer, no, no ensayamos fue espontáneo y sí se que en el escenario parecía que llevábamos muchísimo tiempo ensayando pero la verdad es que no. 

-De verdad, hacéis una pareja preciosa. Tienes que lanzarte, llevo trabajando con el el tiempo suficiente para saber que el no lo hará. Salvo que sea muy importante.  

-No seas exagerada anda

-Que  no lo soy

-Lo que tú digas

-Bueno que te parece si me das otra clase de Wattpad 

-Estoy encantada  

Y así nos pasamos el resto de la mañana entre una cosa y otra ya llegó la hora de comer. Mientras comíamos Ryan llegó junto a nosotras

-Livvie, traigo esto para ti

-Gracias Ryan, sabes que es?

-No, el señor Oliver me lo ha entregado y me especificó que te lo tenía que entregar a ti 

-Bueno pues muchas gracias

Y después de eso se fué

-Venga a que esperas, ábrelo 

-Ya voy- lo abrí y me encontré con una carta- esto es una carta

-Pues léela en alto

Buenos días Liv, que tal dormiste? Yo no pude parar de pensar en el beso que nos dimos antes de despedirnos. Y por eso es que te pido que tengas una cita conmigo esta tarde. Te estaré esperando a las cinco en la puerta trasera de la cocina. Si no vienes que sepas que estaré esperándote y si hace falta iré a buscarte a tu habitación. 

Espero verte luego.

Iver

-Pero que mono-dijo Sunny derritiéndose de amor 

-Debería ir?-pregunte dubitativa

-Estás de broma?-dijo Sunny incrédula 

-No se, es que todo me parece tan irreal...

-No seas boba, vas a ir quieras o no por qué te obligo yo

-Esta bien...

-Ahora, vamos a ver lo que te podrás- tiró de mi hacia la habitación y llegamos riéndonos a mi habitación 

Sunny sacó todo lo del armario que me podría servir y me obligó a probarme todo hasta que dimos con el modélico indicado.

Al final decidimos por un top blanco y una falda azul celeste con mis converse blancas, las que llevo siempre conmigo. Más tarde ella me ayudo a maquillarme y cuando ya se acercaba la hora me di cuenta de la realidad.¡¡¡ Voy a tener mi primera cita oficial con Iver!!! ¡es alucinante! Y si...

-Ya está, estás perfecta- dijo Sunny quitándome de mis pensamientos

Me dirigí a mi espejo y me quedé paralizada, esa era yo? Estoy alucinada. De la nada empezó a sonar un ruido que me sacó de mi trance. Cuando me di la vuelta Sunny empezó a gritar:

-Quedan diez minutos para las cinco!!

-Que!!! Como!!! Ya!!!-dije yo alarmada

-Si-dijo Sunny toda tranquila, como se nota que ella no es la que va a tener una cita, ya la fastidiaré yo cuando le toque a ella...

-Bueno creo que mejor es empezar a ordenar esto un poquito...

-Si mejor

Y así empezamos a recoger todo, cuando quedaban dos minutos para las cinco ya lo teníamos todo listo 

-Bueno, mejor me voy yendo 

-Suerte, seguro que lo pasáis genial

-Gracias por ayudarme Sunny

-Sabes que siempre estoy para ti- le di un abrazo y me fui corriendo 

Cuando estaba en la puerta de la cocina al fondo divisé a Oliver con unos vaqueros y una camiseta que le sentaban fenomenal. Cuando me vio se le iluminaron los ojos que rápido conectaron con los mios. Llegue hasta el y antes de decir nada me plantó un beso en los labios que me dejó sin respiración. 

-Estás preciosa- me dijo con una sonrisa pícara en la cara

-Tu tampoco te quedas corto- le dije siguiéndole el juego

-Nos vamos?- me preguntó

-Nos vamos- le afirme

Cuando salimos de la casa el me cogió de la mano cosa que al principio me sorprendió un poco pero que no fui capaz de quitar por que me sentia muy a  gusto. 

-Bueno, y... a donde vamos?

-Ya lo sabrás, aún que no te preocupes que no está muy lejos

-Debería de tener miedo?

-No, no voy a matarte ni mucho menos 

-Eso es exactamente lo que diría un asesino

-Bueno pues como asesino que soy te pido que confíes en mi

-Está bien, pero que sepas que si muero, mucha gente que se preocuparía por mi

-Ya me ocupare yo de eso...-dijo con picardía

Y así pasamos el resto del camino, entre broma y broma. Hasta que de repente...

-Ya hemos llegado- me dijo en la entrada de un parque forestal que no sabía que existía

-Que bonito, como lo encontraste?-le pregunté entusiasmada

-Digamos que al tener un padre como el mio a veces te dan gana de desaparecer y un día cabreado lo encontré y desde entonces cuando me enfado con el vengo a calmarme y luego me voy a casa de nuevo

-Que guay- fue lo único que se me ocurrió decir

Cuando nos adentramos más divise un parque en el que estaba jugando una niña de unos tres años con su madre que Oliver no tardo en saludar

-Hola Bea-le dijo alegremente

-Hola Oliver-le dijo sonriente, cuando se giró del todo y me vio dijo- ¿O-Olivia?-cuando la miré supe al instante de quien se trataba

-¿Mamá?