The Dramatic In-Depth Journey of the Loveless Light

Pensemos Detenidamente

Alhaitham se toma un poco de tiempo para pensar. Y NO está preocupado.

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Alhaitham no sabe cuánto tiempo permanecerá allí, planeando su próxima sesión de sexo o su próximo asesinato, cualquiera de los dos. Un enigma tan común cada vez que Kaveh hace cosas de Kaveh.

Tampoco sabe si ha dormido. Pero supone que sí cuando unos pasos ligeros lo despiertan de su sueño.

Confundido, Alhaitham abre los ojos, luego endereza su espalda cansada con una mueca y estira los brazos para despertar sus músculos adoloridos. Dormir sobre frías piedras no fue la mejor decisión que ha tomado, admite.

Luego, sus ojos viajan desde la Maldita Carta de 5 Páginas (MC5P) en su regazo, a la pared opuesta de la caverna, ahora limpia de cualquier rastro de barro, (Extraño. ¿Llovió anoche? ¿O la zona es realmente tan húmeda?), antes de que se detengan ante un enojado Cyno.

Oh. Alhaitham está muerto.

De todos modos, intentará mitigar la situación. Su mente parece no poder encontrar qué causó la visita del general Mahamatra, pero eso no significa que no intentará negociar.

—Cyno. Me sorprende verte aquí. ¿Cómo estás? —Táctica 1: actúa con normalidad.

—Yo también estoy sorprendido, Alhaitham. Y estaría mejor si Tighnari no me hubiera pedido expresamente que "fuera a salvar a ese erudito idiota que salió solo a la selva tropical en medio de la noche".

Ah, por eso Cyno está aquí. Alhaitham se relaja. Todavía no se ha enterado del asunto de las cápsulas de conocimiento, ni de los informes misteriosamente mediocres que ha presentado, ni de ninguna laguna jurídica que el Escriba pueda haber utilizado o no durante los últimos años. De todos modos, Cyno está enojado, y eso no es bueno, incluso si no está allí como parte de la Matra (bueno... no del todo. Digamos que Tighnari está abusando un poco de su poder sobre el general, —con buenas intenciones, pero aun así...—). Es hora de la táctica 2: convencer.

La severa máscara severa de Cyno ahora luce un poco preocupada.

—¿Por qué estoy persiguiéndote, Alhaitham? ¿Por qué estamos en esta situación?

—No sé. Aunque agradezco tu preocupación y la de Tighnari... Como puedes ver, estoy bien.

—Correcto.

Cyno no necesita señalar que Alhaitham se encuentra sentado ahora mismo sobre una piedra húmeda dentro de una caverna. No necesita señalar que el Escriba, que generalmente es muy especial en cuanto a su comodidad, pasó la noche durmiendo afuera y ahora obviamente está todo dolorido. Pero la mirada impasible con la que el general se dirige a él dice que es suficiente. La táctica 2 no ha tenido un buen comienzo.

—Estoy bien, de verdad —Lo intenta de nuevo—: Sólo quería generar eficiencia y ayudar también con la búsqueda; Además, todos tenemos parte de la culpa por la situación de Kaveh, y no puedo permitir que la carga de ese tonto recaiga solo sobre Tighnari. Además, Kaveh me dejó una carta y parezco ser la fuente de su tonto acto de desaparición, por lo que me corresponde encontrarlo antes de que haga algo estúpido. No entraré en detalles, pero puede que tenga que disculparme con él o no, y puede que él quiera verme o no, por lo que la búsqueda corre el riesgo de resultar molesta. Conociendo a Kaveh, es posible que incluso ya haya huido a otro país, y si no lo alcanzamos, quién sabe cuándo o en qué estado lo encontraremos...

—Entonces, estás muy preocupado.

—No lo estoy.

Cyno frunce el ceño. Una vez más, no necesita señalar que Alhaitham acaba de lanzar un monólogo espontáneo, que puede haber sonado como una divagación nerviosa. Es impresionante cuánto puede sermonear el impasible general Mahamatra sólo con sus ojos y el movimiento de sus cejas. Pero en serio. Alhaitham está bien. Está genial. Lo está haciendo genial. Kaveh no tiene el corazón roto, está tomando decisiones puramente lógicas y lo que tiene en las manos no es una carta de ruptura.