Epílogo 3

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Curiosamente, su siguiente clase coincidía y se sentaron uno al lado del otro. Cuando Tae-soo preguntó si volverían a sentarse juntos, dinosaurio pidió el horario. Al darse cuenta de que era el único día en que sus clases coincidían, aceptó sentarse juntos.

Cuando se ofreció por primera vez a sentarse a su lado, se negó porque se sentía incómodo, pero después de tomar una clase juntos, aceptó sin dudarlo. Después de sentarse junto a dinosaurio, Tae-soo le envió un mensaje a Kang Se-hun para decirle que había venido a tomar otra clase.

Guardó su celular, sin esperar respuesta ya que probablemente estaba trabajando. Entonces, como no tenía nada más que hacer, volvió a mirar alrededor del salón de clases. Parecía que había las mismas caras y el mismo ambiente.

—¿Qué estás pensando?

Dinosaurio le preguntó, sintiendo curiosidad por los pensamientos de Tae-soo.

—¿Por qué?

—Tu expresión es muy extraña.

—¿Cómo es?

—.....¿La expresión que pone un abuelo cuando ve a sus nietos?

Los ojos de Tae-soo se volvieron hacia dinosaurio.

—Así es como me ves.

—Solo digo. No estoy diciendo que seas un verdadero abuelo.

—¿Cuántos años tiene?

—Tengo 20 años.

—…….

El joven de 26 años pensó que era una pregunta estúpida. Pero preguntó de todos modos, así que respondió.

—Te envidio.

Dios mío, ni siquiera puedo imaginar lo que se siente tener 20 años ahora.

—¿De qué? 

—Debe ser agradable tener 20 años. Tienes toda la energía del mundo y mucha diversión, podrías ir a clase y trabajar y...... beber toda la noche.

—Cuando dices eso, realmente suenas como un abuelo.

—Dijiste que no antes.

Tae-soo miró al dinosaurio y murmuró.

—Pero creo que me gusta más.

—¿Yo?

—Sí.

¿Le conté al dinosaurio las ventajas de tener 26 años?

—Me siento relajado. Y…

Tae-soo ladeó la cabeza, sin comprender inmediatamente.

—Otras personas intentan tener sentimientos hacia mí que van más allá de simplemente agradarles, y tengo que preocuparme por eso, lo que me incomoda. Pero sunbae me observó.

—….¿se notó?

—¿Mucho?

—Lo siento.

Mientras el dinosaurio sacudía los hombros y reía, Tae-soo también sonrió. No sé qué tiene de gracioso esto, pero su expresión era mejor que antes y no se veía mal.

—Así que hablé con sunbae y creo que fue algo bueno.

—Dijiste que te gusto, pero incluso si no te gusto tanto…. me quedaré a tu lado solo por un día.

Tae-soo sabía que sería agotador tener que recibir atención no deseada durante horas, ya fuera favorable o desfavorable, por lo que Tae-soo aceptó de inmediato.

𝑺𝒐𝒚 𝒆𝒍 𝒗𝒊𝒍𝒍𝒂𝒏𝒐, 𝒑𝒆𝒓𝒐 𝒆𝒔𝒕𝒐𝒚 𝒆𝒎𝒃𝒂𝒓𝒂𝒛𝒂𝒅𝒐.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora