𝑺𝒐𝒚 𝒆𝒍 𝒗𝒊𝒍𝒍𝒂𝒏𝒐, 𝒑𝒆𝒓𝒐 𝒆𝒔𝒕𝒐𝒚 𝒆𝒎𝒃𝒂𝒓𝒂𝒛𝒂𝒅𝒐.

Capítulo 18

Yoon Tae-soo, quien estaba en cuclillas en la alfombra de la sala de estar de la casa de Kang Se-hun sin Kang Se-hun, tenía dos preocupaciones. En primer lugar, se despertó brevemente cuando Kang Se-hun se fue, pero fue solo por la tarde cuando el sol se estaba poniendo que se despertó por completo. Estaba desconcertado por cómo había podido dormir tanto tiempo, pero la tranquilidad de la habitación parecía ser la causa. También ayudó que, por primera vez, la cama le pareciera bastante estable.

Lo siguiente era su celular, que aún no había encendido. Mientras miraba la pantalla en negro, Tae-soo se revolvió el cabello.

—No sé qué hacer.

Había cometido un error y no se me ocurría cómo arreglarlo. Habría sido mejor si hubiera tomado el camino fácil y hubiera poseído a Yoon Tae-soo de niño. Entonces no habría intimidado a Seo Da-rae por llevarse a Kang In-hyuk, y nada de esto habría pasado.

—¿Por qué tengo que lidiar con todo?

Ni siquiera soy el alma de quien lo hizo. Estaba frustrado y me estaba volviendo loco, pero no había otra manera. Ayer huí de mis padres, pero esta no era una solución fundamental. Si mañana iba a la universidad, el secretario podría aparecer. Entonces no podía evitarlo, y no podía insistir si no quería ir.

Tae-soo, que había estado pensando una y otra vez, inmediatamente tomó su celular como si hubiera tomado una decisión. Apagar su celular no era una forma de ganar tiempo. Cuando lo encendió, la compañía que fabricó el teléfono y el operador aparecieron en la pantalla a su vez.

—Esto…

No lo sabía porque lo acababa de usar hasta ahora, pero era un celular fabricado por KH. Eso significa que este dispositivo podría haber sido aprobado por Kang Se-hun. Tae-soo agarró su estómago hambriento cuando pensó en Kang Se-hun.

—¿Comprará sushi?

Cuando se lo dije en la mañana, se fue sin decir nada...….

—No, no nos hagamos ilusiones.

Tae-soo, que solo pensaba en quedarse en silencio en su habitación mientras estaba allí como ayer, tomó su celular que había terminado de cargarse. Después de hojear las muchas llamadas y mensajes perdidas, Tae-soo miró la información de contacto de su padre. No tuve el valor de llamar. Así que ingresé a la aplicación de mensajes y puse por escrito lo que le había estado preocupando.

En la última palabra, Tae-soo no podía mover el pulgar con facilidad. Solo tenía que presionarlo, pero no fue fácil. No sé si me entenderá por enviar esto, y podría hacerlo enfadar más. O puede rastrear mi celular de inmediato y venir a buscarme. La expresión de Tae-soo se oscureció notablemente mientras sus pensamientos fluían negativamente.

Está bien que me regañe, pero no quiero morir...…

Fue entonces. El cuerpo de Tae-soo dio un respingo de sorpresa al oír abrirse la puerta. Tae-soo giró la cabeza e hizo contacto visual con Kang Se-hun, que acababa de entrar, y lo miró con la boca abierta, y luego a su celular. Creo que toqué mi celular por la sorpresa, y como de esperar, el mensaje se envió.

—Ah…

Tae-soo dejó su celular. Iba a enviarlo de todos modos, sólo dudó un momento, así que fue lo mejor. Tae-soo se levantó y miró a Kang Se-hun.

—¿Estás aquí?

—¿Por qué estás ahí habiendo un buen sofá?

—La alfombra es muy suave y agradable.

—Supongo que es un perro después de todo.

—¿Qué?

Tae-soo, que no entendió las palabras que Kang Se-hun murmuró, preguntó, pero no obtuvo respuesta.