🕺
No sé cuánto tiempo estuvimos fundidos en aquel eterno abrazo, pero ni un millón de años me hubiesen parecido suficientes. De pronto, me sentía confuso, débil y triste. Aferrarme a Hyunwoo, calmaba mis miedos.
―Creo que por hoy ha sido más que suficiente ―comentó Hyolyn, pasados unos minutos―. En cuanto a la segunda sesión... mañana tengo un hueco libre a las cuatro.
Me giré hacia ella, separándome de Hyunwoo y despertando de aquel letargo. Quise responder que no era necesario que acudiésemos de nuevo, no deseaba volver a enfrentarme a sus malévolas preguntas. Pero no pude hacerlo, me había quedado sin habla.
El momento de paz que acababa de vivir, se esfumó de un plumazo.
Desgraciadamente miré la libretita donde ella tomaba notas, a la espera de descubrir qué conclusiones había sacado, porque lo único que vi fue un prado verde donde corría un niño que sujetaba un globo rojo.
― ¿Eso es lo que ha estado haciendo durante la sesión? ―fruncí el ceño―. ¿Dibujar?
Hyolyn se levantó con cierta dificultad, frotándose las rodillas, sin dejar de sonreír.
―Sí. Deberías probarlo, es relajante.
Hyunwoo me pellizcó el brazo, indicándome que mantuviese la boca cerrada.
Caminamos por el estrecho pasillo hasta el exterior. Ya había empezado a anochecer.
― ¿Cuánto es la sesión? ―pregunté, sacando la cartera del bolso, mientras Hyunwoo se entretenía acariciándole las orejas al terrorífico gato negro.
―La voluntad ―contestó Hyolyn.
Oh mira, ¡qué amable!
Quizá, si me esforzaba lo suficiente, podría empezar a verla con buenos ojos.
Rebusqué algunas monedas en la cartera.
―Y la voluntad son setenta dólares ―añadió, sin perder su espléndida sonrisa.
Levanté la cabeza de golpe.
Bien. Ella había estudiado psicología, pero yo era licenciada en filología y estaba al tanto del significado de la palabra <<voluntad>>. Era bastante simple. Pues eso, lo voluntario, contrario a <<obligatorio>>.
Hyunwoo colocó varios billetes en la palma de su mano, que mantenía firmemente extendida, antes de que pudiese protestar.
―Nos veremos mañana, Hyolyn ―le dijo―. Gracias por la sesión.
―Sí, gracias, gracias ―farfullé―. Espero que le hayamos servido de inspiración... para sus dibujos... y eso.
Literalmente, Hyunwoo me arrastró hasta la salida.
Regresamos en silencio hacia la zona de la costa. Él estacionó la moto a un lado del paseo, antes de que llegásemos a la calle donde estaban las habitaciones. Se quedó allí quieto, con los brazos apoyados en el manillar y la mirada fija en el inmenso mar.
―No quiero que te sientas atacado, Kihyun―dijo finalmente―. Sé que quizá Hyolyn ha sido un poco brusca contigo, pero creo que podría ayudarnos.
― ¿Cómo podía saber ella el problema que surgió con mi traje? ―pregunté, percatándome de ese detalle.
Hyunwoo se quitó el casco y ladeó la cabeza para mirarme.
ESTÁS LEYENDO
Otra vez tú _Adaptación -Showki
FanficUna boda frustrada. Un cálido reencuentro. Adaptación Showki