1

829 40 6
                                    

✨Capitulo I✨

—¿Chimo? ¿Así te llamas? —

Alto, de cabello largo y negro, ojos profundos de un color gris, piel ligeramente morena y entre blanquita, como café con leche. Así era el aspecto del nuevo criado de TN Villavicencio, hija única y heredera de toda la riqueza Villavicencio.
Aunque su familia eran ricos, no eran muy poco conocidos por sus logros, sino por ser familia lejana de su prima Teodora. Que es unos años menor que ella.

El chico no respondió a su pregunta, simplemente frunció el ceño por la presencia de la chica, que con su aspecto, daba a entender que tenían la misma edad, no sólo eso, sino que también era una niña malcriada. O eso veía él, sin embargo, TN es una niña linda, amable y muy humilde con todos, cosa que casi no se ve en la gente de la alta sociedad.

—Te hicieron una pregunta, responde niño—regaño la criada adulta de los Villavicencio.

Chimo soltó un suspiro molesto, estaba claro que no quería estar en ese lugar. —Si, así me llamo.
Hablo con una voz hostil.

TN no podía apartar la mirada de él, pues a parte de que era alguien atractivo, le daba mucha curiosidad su forma de vestir y ser. Serio y gruñón, era lo único que veía en el en ese momento, pero estaba segura que era más que eso y quería descubrir ese lado tierno que todos tienen.

—Bien, mucho gusto soy TN Villavicencio—se presento la chica haciendo una pequeña reverencia. Cosa que hizo fruncir el ceño el chico, se supone que él es el que se debe inclinar ante ella, no al revés.

—No sea modesta señorita—hablo Laura, su nana. —Su nombre completo es TN Jacinta Maria Josefina Vicente de la purisima Concepción de la inmaculada trinidad Villavicencio duquesa de ora verás y marquesa del Jujuy—. Incluso se le fue el aire a la pobre señora por decir todo su nombre.

Por otro lado el chico abrió los ojos como platos por tal largo y exagerado nombre que tenía su ahora señora. Tanto en TN solo soltó un suspiro cansada por tal presentación.

—Por eso dime solo TN, sí no es mucha molestia—murmuro dándole la espalda al chico.

El chico no dijo nada, solo mantuvo su mirada sobre la chica.

Baja, cabello ligeramente largo y ondulado de castaño oscuro, ojos del mismo color y piel ligeramente morena como la de él. Vestía un vestido ajustado de alta sociedad de un hermoso color morado opaco, que hacía resaltar su belleza. Debía admitir que la chica era linda, sin embargo, estaba molesto tanto con ella y su familia. Pues había sido separado de su hermana menor.

—Señorita Laura, por favor dele ropa y una habitación estable al Joven Chimo—pidio la castaña viendo de reojo a su Nana, quien asintió, hizo una reverencia y se marchó jalando del brazo al chico con ella.

La casa de la chica era grande y muy linda, pero era tan grande que daba miedo. Pues no había mucha gente viviendo ahí. Los padres de ella habían ido de viaje por cosas de negocios, a una hacienda por Oaxaca. El camino era largo y pesado que no querían que su pequeña fueran con ellos, así que ella se quedó en su casa junto con 10 de sus criados de sus padres y 2 de su confianza.
Estaba feliz de poder convivir con alguien de su edad y no con adultos como siempre ha sido. Estaba claro que el Jóven Chimo no hablaría con confianza con ella los primeros días, así que tenía que ganarse su confianza poco a poco. Realmente quería a Chimo como un nuevo amigo y como no salía para nada de su casa, sería su único amigo.

Por Tí || Chimo y túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora