El guerrero del clan garra frente a él era un buen contrincante, estaba durando en el combate y le estaba dando la cara correctamente tal vez podría dejar salir más de su poder contenerse en medio de una batalla también era difícil, solía pensar que ayudaba a mejorar la concentración, pero ahora le parecía algo molesto e innecesario. Aunque matarlo por accidente también resultaría molesto, le estaba gustando bastante su modo de pelea cuerpo a cuerpo observó al felino qué se levantaba preparándose para atacar en su contra nuevamente, la fluctuación de magia en el lugar lo distrajo por un momento, su mirada se dirigió a la cima de la colina "Parece que uno de los descendientes dragón vuelve al nido"
"Basta"
Se dio la vuelta alejándose del felino caminando hacia la arboleda qué conoció la primera vez que visitó este lugar, sus pasos llevándolo al barranco. Si el descendiente de Ragnark volvía significaba eso que el resto de la familia volvería pronto.
"Siempre es un honor luchar con usted Majestad"
La reverencia del gato a sus espaldas fue perfecta y elegante, el silencio qué lo acompañó le permitió pensar de nuevo las dudas junto con los recuerdos acechándolo como de costumbre, el silencio y la soledad siempre traían consigo las voces en su mente. Su cabeza cuestionando todas sus acciones y decisiones como el hecho de porque seguía en el norte si no quería encontrarse con su viejo amigo. Curiosa pregunta, seguía sin encontrarle respuesta. Su mirada se alzó al sentir las tres presencias qué ya eran conocidas para él.
"Gran rey"
La voz dulce de la niña le llegó, los tres menores estaban frente a la cabaña qué había edificado en el acantilado después de aceptar quedarse, no quería estar cerca de la familia el ambiente amoroso lo molestaba, pero estos tres, estos tres mocosos no parecían dispuestos a dejarlo solo.
"Su hermano ha vuelto, largo"
"Lo sabemos, el hermano Damien está junto a madre y los demás hermanos ya lo hemos saludado"
Miró al niño Gavin qué respondió, aprendió a identificarlos hace mucho, abrió la puerta permitiendo la entrada de los mocosos sabía que no se irían hasta que estuviesen satisfechos de mortificarlo. Se adentro después de ellos, el interior de la cabaña cambió en cuanto entraron se veía como un piso enorme dividido en sala, cocina, baños y habitación. Frente a la puerta en el otro extremo de la habitación un ventanal enorme se alzaba dando vista del mar.
"Ja, pensé que solo vivías como un borracho moribundo, pero mira esto, después de todo un rey es un rey"
Su humor cayó escuchando la voz del mocoso Aiden, podía soportar a los otros dos incluso podía decir que los toleraba, pero ese mocoso ponía a prueba su paciencia.
"Estás aquí también bastardito, no te vi, casi te piso y le hago un favor a la raza"
El pequeño rugido molesto le causó satisfacción, observó el sillón frente al ventanal acompañado por la mesa con una botella y copa, la mierdita molesta no estaba tan lejos de la realidad. Las noches eran largas estos días.
"Gran rey ¿te molesta que te visitemos?"
La voz dulce de la niña lo sacó de sus pensamientos la observó mirar un banco frente a la mesa que dividía la cocina abierta del salón, se acercó y la ayudó a subir, cuando la vio segura se dio la vuelta un tirón en su pantalón llamó su atención.
"Por favor"
Gavin era muy tranquilo para su edad, se preguntó qué alma tendría dentro de ese cuerpo y que experiencias lo volvieron un ser de tal manera, lo ayudó a subir a otro banco junto a su hermana, suspiró al ver los bordes de las sillas. Inconscientemente los hizo con bordes y espaldar además de cojines para ellos.
ESTÁS LEYENDO
ARANDEL
FantasyDespués de ser engañado por la santa humana y crear un lazo contra su voluntad Arandel tendrá que recuperar la confianza de su pueblo, su raza, los compañeros y por sobre todo tendrá que recuperar la confianza en si mismo. Desconfianza y dolor que s...