Una simple mirada...

Quedate...

Anna :

Llegue del trabajo con el tiempo justo para ducharme y preparar la cena antes de que llegara Theo. Ya tenía casi todo listo cuando el timbre anunció la llegada de mi hermano. Theo entró, dejó un beso en mi mejilla y una botella de vino en la mesa.

Llevé dos copas a la mesa, serví e invité a Theo a que acompañara mientras esperábamos que estuviera lista la cena.

-No vienes porque me extrañas, ni mucho menos. Así que sin vueltas, dime qué pasa -pregunté como siempre; nuestras conversaciones nunca iban por las ramas y él lo sabía. 

-¿Ni siquiera te alegra que esté aquí? Pregunto con media sonrisa

- Sí, y lo sabes. Últimamente, nos vemos más a menudo, pero ambos sabemos que algo te traes y necesito saberlo -dije mirándolo seriamente.

- Está bien, sí... necesito saber cómo estás, y no es una pregunta retórica, sino que quiero saber cómo estás con respecto a que alguien esté cerca de ti. Alex es un buen sujeto, sé que jamás te lastimaría, o al menos no consciente, pero me preocupas tú, no él- Respondió sinceramente 

- Estoy bien, la mayor parte del tiempo... Supongo que algunas cosas nunca se irán...Supongo que es normal, no puedes pasar por una situación así sin que deje una huella -dije y me miró con ternura. 

-¿Qué vas a hacer con Alex? Si las cosas avanzan, deberías contárselo, Anna, la única manera de seguir adelante es con la verdad, y creo que ambos quieren estar juntos realmente- Añadió ya con más seriedad.

Me levanté en ese momento para sacar la comida del horno, mientras Theo me siguió para poner los platos y cubiertos en la mesa.Mientras servía la comida, trataba de no mirarlo a los ojos para que no notara que estaba afectada.

- Quizás sea una aventura para él, no debería adelantarme tanto -dije tomando asiento frente a él.

- Créeme, quiere algo más que simplemente llevarte a su cama -dijo Theo tranquilamente. -Si solo quisiera eso, lo puede encontrar en cualquier lado, sin esfuerzo- sentencio seguro 

- Sabes lo difícil que es para mí sentir esto por él. Es algo nuevo para mí, no pensé que me pasaría y tengo miedo... mucho miedo -dije obligando a mis lágrimas a no salir.

- A pesar de lo difícil que pueda ser, quiero que puedas pasar la página por completo, y eso significa en su momento enfrentar a Alex y contarle la verdad -dijo Theo en tono serio mientras probaba la comida.

- Yo también quiero pasar de página, pero por ahora es pronto para hablar de eso. Veamos a dónde nos lleva todo -dije empezando a comer.

-Pequeña -me llamó Theo tomando mi mano- solo quiero que seas feliz, y creo que puedes y debes serlo-

- Gracias, yo también lo deseo para ti -dije con media sonrisa. -Por eso quiero saber qué pasa con Marie -pregunté alzando mi ceja.

Mi hermano ha sido siempre un mujeriego de primera, nunca conocí una relación formal, ni tampoco me presentó a sus mujeres, pero sabía que había muchas en su lista de conquistas.

- No sé si estoy listo para hablar de ello -dijo mirándome seriamente.

- Pero es que eres el colmo. Vienes y hablas de mí, de superar cosas y avanzar, y sigues siendo un cerrado que tiene miedo de hablar de lo que siente. Theo, sé que no quieres una relación porque papá casi muere con mamá, pero ¿hasta cuándo, hombre? ¡Huyes más que yo!- Le regañe. 

- Es cierto, creo que ambos estamos fallados -dijo riendo- pero tú más que yo -dijo rompiendo en risa.

-Ya, ya, solo no la lastimes. Es una mujer excelente y la adoro- Le advertí tratando de dejar de reír