Eren tomó a Mikasa de los hombros —Tranquila, todo saldrá bien...tenemos cada punto asegurado.
—Eren...no, no sé si pueda hacer esto.
—Recuerdo el plan, hablamos de todo esto. Cuando lo veas, no vayas a él, has que él venga a ti...y si intenta hacerte daño mis hombres actuarán de inmediato...
—Él no me haría daño—refutó Mikasa de inmediato.
Eren inhaló procurando mantenerse sereno—Tal vez no lo hizo antes, cuando sólo le interesaban sus propios fines, pero si se da cuenta de que has contrarrestado su estrategia podría actuar diferente.
Un escalofrío recorrió el cuerpo de Mikasa.
—Por favor Eren, asegúrate de que no lo lastimen.
—No quiero que nadie salga lastimado. Sólo hazlo venir. Dentro de poco todo habrá acabado...vamos respira y avanza.
La dejó ir y Mikasa tomó aire, pero al dar el primer paso los nervios empezaron a apoderarse de ella.
Su mente perdida en algún punto lejano, adormecida en todo el dolor, preocupación y llanto que había dejado salir los días anteriores.
Sólo debía avanzar un poco más y detenerse, eso era todo. Eren se encargaría del resto.
Un par de pasos más y todo habría acabado.
Jean había dejado a Connie y Floch a cargo de los caballos unos pasos más atrás, escondidos detrás de algunas rocas y arbustos entre el camino.
Estaban ahí desde el alba y habían observado cada movimiento, todo parecía intercambio y cruce normal de comerciantes con sus animales y carros de carga.
Al acercarse la puesta de sol, avanzó hacia el puente, en cuanto Mikasa lo cruzara, nadie podría detenerlos y haría lo necesario para ganar tiempo si lo intentaran.
Fue entonces cuando la vio, resaltaba fácilmente entre todos, ataviada en ese vestido de mangas anchas en color blanco y corpiño desde la cintura hasta sus pechos en color vino tinto. Similar a la bata blanca con la que la había encontrado aquel día en el bosque.
Buscó su mirada, pero ella continuaba con la vista fija al frente. Se detuvo a esperarla y le observó avanzar. Respiró profundo mientras sentía cómo su corazón golpeaba fuertemente en su pecho.
Sólo un poco más y todo habría acabado.
Pero Mikasa se detuvo a la mitad del puente, su cabeza girando de izquierda a derecha buscándolo.
«Por favor que no lo lastimen, por favor...pronto habrá acabado todo, pronto» Se repetía
Un hombre alto cubierto con una capa y capucha pasó a su lado, su corazón latió con fuerza, elevó la mirada...pero no era Jean. Su respiración se aceleró mientras volvía la mirada al suelo.
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Confía en mi
FanfictionLas naciones de Hizuru, Marley y Eldia, conviven en paz después de años de guerra. Mikasa Ackerman, la heredera de Hizuru, es comprometida en matrimonio con el Barón de Eldia, Eren Yeager, pero un desafortunado evento desata la guerra de nuevo. Mi...