Pasaron un par de días tras lo sucedido y las cosas estaban bastante tensas. Axel contestaba de cuando en vez y lo único que recibía de su parte eran reprimendas o monosílabos. Habíamos tenido la misma conversación repetidas veces, y solo había causado más enfados.
-Tienes que pedir ayuda profesional- dijo nada más coger la llamada.
-¿Hola?- dije atónita.
-Sabes que estoy aquí para ti, te he intentado ayudar con tus problemas relacionados a la comida, y siento que no puedo hacer más nada. Deberías considerar la opción de hablar con un psicólogo, él sabrá mucho más que yo.
-No sé, a veces siento que puedo manejarlo pero otros días se me hace demasiado abrumador- respondí insegura.
-Si vas tendrás toda la ayuda que yo no puedo ofrecerte.
-No lo necesito, solo es una mala racha- negué varias veces.
-Una mala racha que afecta a nuestra relación- contestó él cortante- llevamos un mes juntos y esto me supera a ti, y a mí también.
-Pues déjame - respondí encogiéndome de hombros.
-No va por ahí la cosa Jade. Esto que te pasa hace que esté pendiente a ti día y noche, ¿qué pasa con el fútbol? te recuerdo que me han dado la oportunidad de ir a un equipo bueno de la comunidad, pero como no espabile me mandarán a la mierda.
-Pues céntrate en ello, yo sé cuidarme.
-¡Joder! No puedo creer que no quieras ir al puto psicólogo- chilló él - ¿Que pasa? ¿Quieres matarte?
-¿Qué dices Axel?- pregunté flipando con lo que decía.
-Que dices que me amas, pero si me amaras, no te estarías matando.
-No me estoy matando amor, no digas más eso.
-Pues come.
-¡Ya lo hago!- grité frustrada.
-Venga, vamos a merendar, coge una fruta o lo que quieras.
-¡Pues vale! ¿Quieres que coma? Verás cómo como.Desde ahí comíamos, merendabamos y cenábamos en llamada. Apreciaba ese gesto, pero odiaba que no confiase en mi. Ya era bastante jodido de por si, como para que no se fiase de mí.
Quedaban dos días para las fiestas de su pueblo y yo aún no tenía disfraz. Eran carnavales y en esas fiestas era obligatorio ir disfrazado, cuando alguien iba sin disfraz era objeto de burlas. Además intentaba convencer a mis amigas de ir pero ninguna quería, según ellas era muy lejos y no les rentaba nada.
—Chicas, ¿se enteraron de la fiesta esta de carnaval? —comencé a hablar, tratando de sonar entusiasta.
Ada frunció el ceño. —Sí, pero no creo que debamos ir. Estoy exhausta.
Elena asintió. —Yo también. Ha sido una semana llena de exámenes y lo único que quiero es quedarme en casa a descansar.
-Pero, ¿y si es divertido?- pregunté ansiosa de que aceptaran mi propuesta.
Ada se encogió de hombros. —No sé, no me suena tan atractivo.
—Y además, —intervino Elena—, no me gusta ir a fiestas donde solo hay gente que no conozco y aún por encima en disfraz, con él frio que hace de noche.
—Pero… ¡Axel estará allí! Hace días que no lo veo- exclamé frustrada.
—Lo entendemos, Jadie, pero no podemos obligarnos a salir solo porque quieras verlo- intentó sonar compasiva Ada.
—Podríamos ir solo un rato —sugerí, intentando cambiar de táctica.
Elena negó con la cabeza. —No, de verdad no quiero salir. Me siento más cómoda aquí.
—No os preocupéis, iré sola, entonces.
Sonreí débilmente y dejé que cambiasen de tema, no íbamos a llegar a ningún lado hablando de ello.
axeel ❤️
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¿Al final como haces?
¿Vienen tus amigas?
No, voy sola.
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𝘭𝘦𝘵 𝘮𝘦 𝘱𝘳𝘰𝘮𝘪𝘴𝘦
Teen FictionJade lleva soñando desde temprana edad una vida como la de los libros, fiestas, novio, un grupo de amigas, ser buena en un deporte y notas estables. Ella consiguió todo aquello pero nunca llegó a sentirse llena del todo, hasta que lo conoció a él. A...