4. Una cita perfecta

241 23 11
                                    

*Flashback*

Minho se encontraba sentado delante del escritorio de su médico que observaba los informes con el ceño fruncido y los ojos algo perdidos.

El chico, ya cansado de esperar suspiró cabeceando.

— Doctor ya lleva como diez minutos mirando la misma hoja, incluso de estar en chino ya la habría descifrado.

El médico miró con cierto recelo los papeles por última vez y levantó la vista finalmente para ver a su paciente, pero otra vez, se había quedado sin palabras.

— Solo hable, me está poniendo más enfermo ver esas expresiones de miedo .

— Minho a lo mejor...—el doctor había suavizado demasiado su tono, cosa que revolvía el estómago del joven— a lo mejor debería llamar a tus padres o un familiar, este no es un momento que deberías pasar solo por muy fuerte que quieras aparentar ser.

A estas alturas Minho ya sabía lo que se le venía encima, el chico se limitó a agachar la cabeza y sonreír sarcásticamente.

— Créeme que me matará antes ver cómo alguien de mi familia se retuerce del dolor por mi estado, solo suéltelo.

El doctor suspiró una última vez cambiándose de sitio, había dejado su silla del escritorio y se había puesto en una que estaba justo en frente de su paciente.

— Lo siento Minho, tu corazón no da para más, ha decaído muchísimo estos últimos meses, es como si apenas funcionará, lo siento tanto...

Minho asintió con la cabeza manteniendo su sonrisa amargada aún, sus lágrimas amenazaban con salir pero no se lo podía permitir, el se había prometido que no iba llorar cuando llegue el día y eso iba a hacer.

— No tiene por qué sentirlo ni que fuera su culpa que tenga un corazón deforme.

— Aún así...-lo interrumpió.

— Tampoco me voy a dejar mucho atrás, he conseguido entrar a la facultad que quería, he tenido buenos amigos toda la vida y en cuánto a mi familia...—suspiró— mi única hermana está a punto de casarse, ya no estará sola y juraría que mi madre se alegrará incluso por la noticia.

— ¿Y tu padre?

— Le va entristecer perder a su único heredero y poco más ¿Cuánto tiempo me queda?

— Como médico tengo la obligación de sugerirte un transplante de corazón, pero con tu estado lo más probable es que mueras durante la cirugía, así que no te lo recomiendo para nada, mejor aprovecha el tiempo que te queda, que sería menos de un año... Quizás unos siete meses.

— Para qué quiero yo el corazón de otra persona... —rió— ¿Me puede hacer un favor? No se lo diga a nadie, ya lo anunciaré yo cuando lo vea indicado.

El médico asintió y se lo quedó mirando en silencio por unos segundos, sus ojos llenos de pena aplastaban a Minho por dentro, no quería sentir pena por si mismo y la expresión de su doctor no ayudaba.

— Sabe, nisiquiera me sorprende escuchar esto, yo ya le había perdido el sentido a la vida hace mucho... A veces vivir también cansa ¿sabes?

— Como tú doctor solo puedo sentir impotencia, puede que tú te lo estés tomando bien pero — Lo interrumpió.

— Sabe, yo también tengo un médico en casa, estudia medicina y es más o menos como tú, empatiza demasiado con todos —su voz era suave, tranquila como si hablará de cualquier tema cotidiano— si se entera te aseguro que va a palmarla antes que yo —rió dulcemente— se le destrozará el corazón, dejará de comer y luego se enfermará y perderá su encanto —suspiró con pesadez— por eso no puedo permitir sentirme desvastado, porque lo último que quiero es ver a mis amigos apagándose poco a poco mientras cuentan mis días, he tenido una vida corta pero no quiero que mi recuerdo cicatrize tan dolorosamente en sus memorias.

7 MONTHS | MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora