7 MONTHS | Minsung

24. Ojalá estuvieras aquí

Narra Jisung

Me revolví agobiado en mis sábanas, la alarma sonaba sin parar y a mí se me hacía imposible hacer el esfuerzo de salir de mi cálida cama, lo que me hizo quedarme unos minutos más mirando al techo de mi cuarto sin tener gran cosa en mente.

Mis pensamientos estaban en blanco, y eso era un verdadero paraíso después del huracán de pensamientos que me había atacado la noche anterior, haciendo imposible que pueda pegar un ojo, al menos no hasta las dos de la mañana mínimo.

Pero de nuevo, mi paz fue interrumpida por el móvil otra vez, quién sonaba sin cesar y con un tono incluso más alto, debido a que era el tono de llamada.

Suspiré hondo y llevé mi mano al móvil frustrado, pero de pronto una sonrisa se formó por si sola en mis labios al ver de quién se trataba, era Minho hyung, de lejos la persona más indicada para darme los buenos días y la única que me haría despertarme sin queja ninguna incluso a las tres de la mañana si él lo consideraba oportuno.

— Buenos días hyung —dije mientras me arreglaba el pelo como podía, era una vídeo llamada y de ninguna forma me iba a ver mal delante de mi ahora novio.

— ¿Que tal está mi rayito de sol? —murmuró algo avergonzado, en el fondo se notaba que le costaba hablarme así.

Me había distraído tanto mirando los ojos de hyung que se me olvidó responder a su pregunta, por lo que pasados unos segundos él me volvió a preguntar.

—¿Por qué no estás vestido aún? Queda menos de media hora para las clases

— Mis clases empiezan un poco tarde hoy ¿y tú hyung? —pregunté al darme cuenta de que seguía en la cama también.

— Me desperté un poco malo hoy, me tomaré el día libre para descansar —se interrumpió un segundo escuchando la voz de fondo que parecía pertenecerle a Felix.

"¿No le darás un beso de despedida al enfermo?" Escuché como bromeaba Minho hyung recibiendo una negativa burlona de Felix quién nunca apareció en pantalla. Después de que el pecoso abandonará el lugar, hyung volvió a centrarse en mí, lanzándome otra pregunta.

— ¿Y si te pasas por casa hoy Sunggie?—asentí ante su pregunta y pude ver cómo se le iluminaba la vista como resultado.

— Me pasaré por la tarde...—dejé de hablar durante un segundo al escuchar un ruido en la puerta, Minho al notar como se desviaba mi mirada, se mantuvo callado también por si alguien se había metido a mi cuarto.

Después de un par de toques más en la puerta, esta se abrió enseguida sin dejarme oportunidad de contestar o averiguar quién estaba tras ella.

Era mi padre, quién me miró con los mismos ojos fríos de siempre antes de acercarse a mi cama, yo colgué inmediatamente de manera inconsciente, sin saber siquiera si había pulsado el botón, no sé qué reacción me esperaba de su parte al ver con quién hablaba, pero sabía perfectamente que no iba a ser de mi agrado.

— Buenos días papá.

— Buenos días... —soltó bufando, estaba claro que algo le pesaba— escúchame Jisung ¿tú te sigues llevando bien con el hijo de los Lee?

Mi pecho se encogió al eschuchar tal pregunta, pero me sostuve al único hilo de esperanza que tenía

— ¿Lee Felix o Lee Minho? —La pregunta era muy innecesaria e incluso estúpida, pero la hice solo para preparar la respuesta del segundo caso, ya que definitivamente iba a ser ese.

— Lee Minho.

— Sí, hasta vamos a la misma universidad.

— Bien —se veía algo aliviado al escuchar eso, hasta sentí como se relajado su brazo tenso que se apoyaba en mi cama, reacción que no supe qué tan a mi favor estaba— Necesito que consigas que yo hable con el padre de ese joven.