Han pasado 8 días desde que Nicolas me abandono, cada vez estoy más deprimida nunca salgo de mi habitación, ni siquiera he comido algo, siento como si estuviera muerta en vida ¿Cómo es que me volví tan dependiente de alguien para ser feliz?
Tenía 7 llamadas perdidas y dos mensajes de Ruth, 4 llamadas de mi hermano y 2 de Ed, todos se enteraron de la pérdida del bebe, todo porque James estaba preocupado y pensó que con el apoyo de mis amigos me animaría pero.... No sirve para nada, el único que pude animarme es Nicolas
Un nuevo mensaje entró a la bandeja de entrada, lo revisé y era un mensaje de mi hermano Lucas, y decía:
"Porfavor contesta mis llamadas, sé que estas deprimida pero no tienes que sentirte de esa manera, recuerda que me tienes a mí, a Ruth, James, Ed y a tu novio Nicolas, sé que todos te ayudaremos a superar esto, te quiero hermanita"
Al parecer, James no dijo toda la historia, porque mi hermano piensa que aún estoy con Nicolas, la verdad es que no estoy de ánimos para contestar un mensaje, solo quiero dormir, porque en los sueños si puedo ver a Nicolas.
-- te traje el almuerzo –dijo James, cuando entro a la habitación- hotcake con jugo de naranja, está delicioso, espero que te gusten –me entrego una bandeja
-- no tengo hambre –le dije
-- porfavor come algo, lo prepare especialmente para ti, sé que no me amas como amas a Nicolas, o como yo te amo a ti, pero... si me tienes un poco de aprecio porfavor come algo
-- solo lo haré porque te quiero –acepté
-- hoy es mi fiesta de cumpleaños, cumplo 25 años, y el mejor regalo que pudiera recibir sería una sonrisa tuya, y ver a la __________ de antes
-- supongo que por una noche, puedo tener felicidad fingida
-- quiero que seas feliz, ____________ eso es lo que deseo
-- ¿alguna vez has amado a alguien que no te ama? –pregunté
-- sí, pero... he aprendido a vivir con eso, ahora tú también tienes que aprender vivir con eso
-- ¡James yo lo amo! Amo demasiado a Nicolas–lo abracé fuerte, y lloré en su hombro
-- me pone mal verte sufriendo por ese desalmado, ni siquiera lloraste así por tu padre
-- James... ¿tú me quieres?
-- yo te quiero mucho, y por eso te compre un vestido para esta noche
-- ¿me compraste un vestido?
-- si, ve a vestirte, la fiesta queda a media hora de aquí
-- espera... ¿no era sorpresa? O al menos eso me dijo Ed
-- al muy estúpido se le escapó
-- está bien, iré a vestirme
-- te espero, y quiero que te arregles linda como siempre
Subí a mi habitación, me di una ducha, y me puse el vestido azul marino que James me compró, también unos zapatos altos
Después de vestirme, me maquille y baje a la sala, donde estaba James bien vestido, me ofreció su mano y con gusto la tomé, cuando llegamos a la fiesta, vi una enorme casa con la música alta y llena de personas, suspiré y entre a la fiesta, donde estaban parejas besándose, y me hiso pensar en Nicolas y lo mucho que lo extraño
Estaba sentada en la barra del bar, tomando un jugo de naranja, odio el alcohol, después de un par de horas estaba totalmente aburrida, salí al jardín y me senté en una de las bancas a tomar aire, sentí unos brazos que me rodearon y unos labios en mi cuello, que me hicieron estremecerme
-- ¿Quién eres tú? -pregunté al chico desconocido
-- Soy Cameron –dijo el
-- déjame sola, no estoy de humor para soportar a imbéciles como tu
-- vamos, linda –me tomó de las caderas y me unió a el
-- suéltame, cerdo estúpido –intenté forcejar con el
-- ¿Por qué tan fría? –Dijo coqueto, y metió una de sus manos dentro de mi vestido
-- ¡suéltame! –grité
-- ¿y si no quiero? –subió su mano hasta mi muslo
-- ella dijo que la sueltes, o la sueltas o pagaras las consecuencias -se escuchó una voz entre las sombras de los árboles, esa voz lo distrajo y aproveché para pegarle en la entrepierna, el inmediatamente me soltó, y me aleje lo más posible
Salí de la fiesta y camine por toda la calle, el frio invadió mi cuerpo, la noche era oscura y silenciosa, escuchaba como la voz de Nicolas me llamaba, miré atrás y allí estaba el, parado en medio de la calle, el viento alborotaba sus cabellos, inmediatamente corrí a el
-- espera... -dijo Nicolas, cuando estaba a punto de abrazarlo
-- te extrañe tanto –le dije sin aliento
-- ¿quieres estar conmigo? –preguntó
-- sí, es lo que más quiero
-- ¿serías capaz de cualquier cosa por estar conmigo?
-- de lo que sea, ¿Por qué preguntas eso?
-- porque solo hay una manera de que estemos juntos
-- ¿y cuál es la manera?
-- ven, acompáñame –tomó mi mano, y me llevo hasta un puente- tienes que saltar
-- ¿QUÉ?
-- es la única manera que podemos estar juntos de nuevos, vamos hazlo
-- ¿tengo que suicidarme? ¿Cómo es que eso nos hará que podamos estar juntos de nuevo?
-- solo hazlo, ya verás que cuando lo hagas, nada nos impedirá estar juntos de nuevo
-- tengo miedo –dije cundo estaba al borde del puente
-- tienes que hacerlo, hazlo por nosotros, por mi
Estaba a punto de saltar cuando siento unos brazos rodeándome en mi cintura, jalándome para atrás impendo que saltara, siento como estoy contra el suelo y alguien está abrazándome fuerte y con amor, subo la mirada, es Nicolas.... No lo entiendo.
-- ese no era yo –dijo Nicolas
-- ¿de qué estás hablando? –pregunté sin comprender, el acaba de pedirme que saltara
-- Perra... -susurró mientras miraba al frente, el miraba a Megan quién aparentemente estaba con Nicolas, pero luego el cambia de apariencia, revelando a un hombre de cabellos oscuros y ojos color rojo intenso, era tan intimidante, vestía ropa negra – Will y Megan –dijo para sí mismo
-- ¿Quién es el verdadero Nicolas? –pregunté sin entender
-- Soy yo, el que le advirtió a ese chico que no te tocara era yo, como te prometí siempre te cuidare desde lejos, pero el que te dijo que saltaras del puente, no era yo, ese era Will, tiene la habilidad de cambiar de forma
-- Nicolas... regresaste –dije sin aliento
-- ¿Qué estabas a punto de hacer? ¿Estás loca? –me dijo agitado
-- creo que sí, ¿estás enojado?
-- ¿estabas a punto de suicidarte solo por mí? –preguntó suave-- ¡idiota! –Le pegué en el pecho- te fuiste cuando más te necesitaba –comencé a llorar
-- Shhh... tranquila, las princesas no lloran –besaba mis lágrimas y con sus labios las limpiaba-- no soy una tonta princesa –le dije
-- pero tú si eres mi princesa
-- Nicolas, no me vuelvas a dejar porfavor
-- no entiendo cómo es posible que estabas a punto de saltar solo por mi
-- porque te amo, y quiero estar contigo, y si eso es lo que tengo que hacer para estar juntos, lo haría de nuevo
-- no hace falta que hagas eso... vamos te llevaré a casa –me ayudo a pararme, me lancé a sus brazos y lo besé, el inmediatamente me correspondió el beso
-- te extrañe tanto, Nicolas
-- yo también te extrañe
-- prométeme que jamás me dejarás de nuevo
-- vamos a casa, debes tener frio
-- Nicolas... promételo
-- ahora... ese no es el problema -dijo Nicolas- vamos a tu casa, es importante
-- me dejaras de nuevo... -susurré
-- nunca te volveré a dejar, fue una estupidez