Guilty [Hyunlix]

10

Félix secretamente estaba muy emocionado por la fiesta a la que Hyunjin muy amablemente se ofreció a llevarlo, pasó los últimos 4 días pensando en eso, se decidieron por ir un viernes en la noche, así no tendrían que preocuparse por hacer algo importante el día siguiente.

El rubio miraba con mucha emoción el lindo anochecer por su ventanal, muchas veces prefería quedarse horas viéndolo que pasar sentado con la mirada en la televisión.

Le escribía a Minho varios mensajes demostrando lo feliz que se sentía, y su amigo le contestaba con stickers de gatos o mensajes cortos con mucha información, no sabía cómo explicarlo bien, Minho era especialito.  (Ni en el buen ni en el mal sentido)

Escoger lo que se pondría era muy difícil, no era tonto, sabía que con "fiesta" estaban hablando de una tonta excusa para ir a un bar/discoteca a tomar y ligar, porque según él, una fiesta era algo así como un cumpleaños o una boda. Bueno, en realidad no tenía idea lo que era ir a un lugar como eso.

Una camisa de lino y unos pantalones le servirían bien, se veía lindo. Se miró algunas veces en su largo espejo, incluso dio algunas vueltas para verse los 360 grados, pero aún le faltaba algo y no entendía que podía ser, se había puesto algo de maquillaje en especial en las pecas, a él y a sus conocidos les gustaba, pero sabía perfectamente que en Corea aún era un estigma.

Cuando el timbre de su casa sonó se acercó rápidamente al teléfono donde se podía comunicar con el pequeño parlante para que pudiera hablar con la persona en la puerta.

— ¿Hola?

— Lix soy yo, Hyunjin.

— Uh, aún no estoy listo, si quieres puedes pasar.

— Por mi bien. — fue una respuesta instantánea.

— Edificio 4-C Piso 14, departamento 126-N — y colgó.

Desde afuera el complejo no se veía tan grande, era por lo menos una cuadra de edificios prácticamente pegados y solo separados por los estacionamientos, a Hyunjin le causaba bastante impresión, él no podría vivir ahí, se sentía como una cárcel. Seguro en esos por lo menos 10 edificios había más de 5 mil apartamentos.

El edificio 4-C era particularmente bonito, se veía más cuidado que los demás y tenía una vista perfecta a la ciudad, además de un camino para pasear o algo así fue lo que supuso Hyunjin.

El ascensor era viejo y muy apretado, al punto de que se balanceaba con cada piso que subía, pero siempre era mejor usar el ascensor a usar las escaleras.

Sería mentira decir que no se perdió, aun así cuando estaba ya en el piso indicado, habían cientas de puertas y para un punto sentía que solo daba vueltas, hasta que por bendición del cielo se encontró con la puerta 126-N.

Apenas la tocó fue abierta dejándolo pasar, era un lugar más agradable y no tan apretado como se esperaba, la cocina estaba al lado de la puerta, unos pasos para el frente, una algo espaciosa sala de estar que contaba con un ventanal precioso y un pasillo por dónde supuso que habría un solo cuarto y un baño.

— ¿Por qué tardaste tanto?

— Este lugar es como una ciudad entera, no sabes cuánto tiempo pasé dando vueltas en círculo.

— Hyunnie. — le revolvió el cabello, esa era su forma de saludarlo después de haber hablado. — ¿Te gusta lo que me puse? — Félix estaba acostumbrado a la forma en la que Hyunjin vestía, casi siempre eran cosas extremadamente grandes y de colores grisáceos, no le gustaba, pero extrañamente le quedaba bien.

Hyunjin se lo quedó mirando de arriba para abajo por varios segundos, haciendo que Félix se pusiera nervioso y que por siguiente su cara se colorara. Él más alto se acercó y entrelazó sus manos atrás del contrario, haciendo que queden muy cerca, le dejó un casto beso en los labios antes de hablar.