Perth se sorprendió al entrar a su casa, el bebé había despertado, lloraba como de costumbre en una de las habitaciones. Aún estando cansado camino por el pasillo hasta la pequeña habitación que habían adaptado para el bebé.
Se detuvo al ver la puerta abierta y la luz encendida.
Saint sostenía al bebé en sus brazos, lo arrullaba para calmarlo, podía notar que estaba nervioso y asustado en ese momento. El la sujetaba con miedo, le cantaba en voz suave mientras la mecía en sus brazos y besaba su frente. Era una hermosa imagen que había soñado vivir algún día con el. Pero no todos los sueños se volvían realidad.
Lo estás haciendo bien - dijo con calma para no asustar a Saint al entrar, se acercó a ellos y sonrió notando el leve sonrojo. Ese cosquilleo seguía allí, esa sensación de satisfacción al verlo.
Es hermosa - murmuro Saint volviendo a ver al bebé. Quería preguntar que estaba haciendo allí, en su casa. Era de madrugado y Mark se había ofrecido para ayudar a bas, y que el pudiera irse sin preocupaciones. Saint estaba en pijama con el cabello alborotado, su chico no pudo haber dormido bien durante ese tiempo separados, así como a él le había estado pasando- Ella...lloraba mucho...- sonrió para si mismo cuando noto sus labios temblar y soltar un leve suspiro.
El estaba llorando, sus ojos rojos y labios temblando.
- Cariño has hecho llorar a Saint - dijo perth con ternura, su chico no pudo haber soportado calmar a la bebé.
No te rías -
Al escuchar la llegada de perth Bas regreso a la cocina con el biberón de la bebé, sabía que esos dos debían hablar tarde o temprano.
Estás aquí - El silencio se instaló entre ellos pero no era incómodo, sino tranquilizador, perth quería abrazarlo, saber que sería de ellos. Verlo solo había confirmado que Saint era quien amaba y con quién quería estar para formar una familia.
Yo.. - No podía, no quería escuchar un rechazó, no creía poder soportarlo, no en ese momento. Sin más beso esos labios suaves que había estado extrañado, dudo en el momento que se rozaron pero Saint no se alejo, eso lo impulso a seguir y profundizar un beso. Era como volver a la vida, podía sentir su amor era correspondido.
Una queja externa los hizo separarse antes de convertir ese beso tierno en uno obsceno. Ambos rieron al ver a la bebé viéndolos, había olvidado a su hija en brazos de su pareja.
Te amo... - al fin lo había dicho, una palabra que significaba mucho y que Saint había estado esperando tanto.
También te amo -
Tal vez aún falta conversas pero saber que aún tenía un lugar en el corazón de saint era suficiente para espera por el, podía conformarse con el simple hecho de estar a su lado. Estaba bien por el momento.
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El Secreto De Tanapon
FanfictionCreas una gran mentira que tú mismo comienzas a creer en ella. ¿Como decir lo que quiere sin lastimarlo? #8-Perth