Dulce deseo

Matias

Estaba limpiando todo en la sala por que hoy iba a venir Daniel y normalmente mi sala no estaba limpia nunca y eso es gracias a Mike obviamente.

-Hola amor que haces-Escuche a mi mamá

-Hoy va a venir un chico a estudiar y quiero que esté todo perfecto

-¿Te gusta?-Me preguntó con esa sonrisa sospechosa

-La verdad si, y creo que yo también a él

-Pues yo me voy a la casa de la vecina para dejarlos solos. Y ahorita mando a tu hermano por unas frituras para que coman

-¿Crees que quiera ir?-Pregunte inseguro

-Mike baja-Gritó mi mamá

Me sonrió y me guiño un ojo mientras escuchaba a mi hermano bajar

-¿Que paso?

-Ve a la tienda y compra unas frituras para tu hermano que hoy tiene una visita especial

-¿Y por que tengo que ir yo? Si es una visita tan especial que vaya el-Reclamo. Yo solo rodeé los ojos sabía que se iba a negar

-No reniegues y ve-Lo regaño

Mike solo suspiro y se dirigió a la salida

-Mike-Gritó mi mamá deteniéndolo-Llegas, dejas las cosas, y te vas

-¿A donde planeas que vaya?

-Véte de vago como sueles hacer siempre

El ya no dijo nada más y se fue

-Gracias ma.

-Todo para ti cariño, ahora me voy y me cuentas todo lo que pase

-Vale

Mi mamá siempre ah sido mi mejor amiga, le cuento todo y ella siempre me apoya, es la mejor mamá del mundo.

***

Escuche como sonó el timbre y corrí rápidamente a abrirle a Daniel

-Hola-Lo salude

-Hola-Me hice a un lado para dejarlo pasar

-Tu casa es bonita

-Gracias, puedes venir cuando quieras, siempre estoy en casa

-Bien-Hubo un momento de silencio-¿Donde estudiaremos?

-En la mesilla de la sala ¿te parece bien?

-Si

Nos dirigimos a la mesilla. Estudiamos como por unos 10 minutos y Mike aún no llegaba con los Snaks probablemente ni los había comprado. Si no llegaba le diría a mis padres.

-¿Quieres un poco de agua?

-Si por favor

Me levante para ir por los vasos. Cuando escuche cuando Mike llego, por fin, me apresuré a servir los vasos. Cuando iba llegando a la sala vi a Mike hablando con Daniel

-No me contaste que eras amigo de mi hermano-Lo oí decir

-Y no tiene por qué hacerlo-Ataque-Ahora si nos disculpas Daniel y yo estamos ocupados así que te voy a pedir que te vayas

-Bien ya me voy-Dijo mirándome fijamente-Entonces te veo mañana-Se volteó hacia Dani

-Si hasta mañana-Le dijo

Y vi que le dedico esa sonrisa, esa sonrisa que pensé que solo a mí me dedicaba. Mike ya no dijo nada más y se fue, yo me senté junto a Daniel

-¿Por qué se van a ver mañana?

-Me invitó a una fiesta, la va a organizar su amigo Diego

-Lo conozco, creo que es igual o más de imbecil que mi hermano. No retiro lo dicho nadie es más imbecil que mi hermano-Me reí, pero por lo visto mi comentario no le pareció gracioso

-La verdad yo no creo que él sea un imbecil-Dijo con voz firme

-No lo conoces

Se formó un silencio incómodo, y todo por el estúpido de mi hermano, así que por primera vez en mi vida decidí arriesgarme

-¿Te gustaría tener una cita conmigo?-Okay tal vez fui demasiado directo

-¿Que?-El solo me miró sorprendido

Creo que lo arruine

-No me tienes que contestar ahora

El solo me miro aún sin decir nada

Yo ya estaba preocupado Dios ¿Qué tal si no le gustan los hombres?, yo creí que sí y ahora no sé qué decir

-Esta bien-Lo oí decir

-¿Que?

-Tengamos una cita

-Enserio

Asintió

Yo no pude evitar que una sonrisa apareciera en mi cara

-¿El domingo te parece bien?

-Si

Seguimos estudiando hasta que acabamos y Daniel se fue. Me quedé viendo televisión cuando escuché cuando mi mamá llegó y le conté las buenas noticias.

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