En los pasillos encantados del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, T/N Crimson, una bruja de 16 años con un espíritu indomable, se embarcó en su quinto año, un capítulo fundamental en su viaje mágico. Los ecos de los susurros resonaron a través...
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Y/N y Hermione pasearon por los pasillos, sus manos entrelazadas, encontrando consuelo en el reconfortante silencio que los envolvía. Fue en momentos como estos que el corazón de Y/N se hinchó de amor por Hermione, apreciando la simple alegría de su unión.
Mientras caminaban, la voz de Hermione rompió el silencio con un suave murmullo, capturando la atención de Y/N. "Oh, Y/N", susurró Hermione, su voz llena de calidez y afecto. Y/N se volvió para mirarla, sus ojos se reunían en un tierno intercambio.
"¿Hm?" Y/N respondió, con su voz suave y curiosa, ansiosa por escuchar lo que Hermione tenía que decir.
"Estaba pensando... ¿podríamos pasar el rato esta noche? Solo nosotros dos", sugirió Hermione, con una pequeña sonrisa que le adoraba los labios. El corazón de Y/N revoloteó a la invitación, una ola de felicidad lavó sobre ella.
Pero luego una sombra de arrepentimiento cruzó la cara de Y/N, su expresión flaqueó. "Oh, lo siento, 'Mione", suspiró Y/N, su voz teñida de decepción. "Tengo algo que hacer más tarde. ¿Puede esperar, amor?"
La sonrisa de Hermione se desvaneció ligeramente, reemplazada por un toque de tristeza. Ella negó con la cabeza, con un suave suspiro escapando de sus labios. "Oh, no, está bien", respondió, con su voz llada de comprensión. "No te preocupes. ¿Cuándo crees que podemos pasar el rato, cuando no estás demasiado ocupado?"
La mente de Y/N se aceleró, una mezcla de culpa y prioridades conflictivas que pesaban sobre ellos. Sabía que no podía dedicar tanto tiempo a Hermione como le hubiera gustado, ya que su enfoque se consumía al desbloquear nuevas habilidades con Hestia. El peso de sus obligaciones amenazaba con eclipsar la alegría de su relación, y le dolía a Y/N ver la decepción en los ojos de Hermione.
La voz de Y/N llevaba un toque de vacilación mientras respondía a la invitación de Hermione. "Uhm, te lo haré saber", dijo, con los labios enrollados en una pequeña sonrisa. Pero detrás de esa sonrisa, había un rastro de malestar. Hermione no pudo evitar notar la ligera desconexión, una pizada de decepción tirando de su corazón.
Mientras Hermione se inclinaba más cerca para plantar un pequeño beso, la anticipación llenando su pecho, echó un vistazo al ceño fruncido que empañó los rasgos de Y/N. La realización la golpeó como una ola que se estrellaba contra la orilla. Y/N estaba distraída, su mente consumida por preocupaciones y obligaciones. La chispa esperanzada en los ojos de Hermione se atenuó cuando Y/N se retiró instintivamente, sus manos separando.
"Oh, tengo detención con Umbridge", explicó Y/N, su sonrisa tratando de enmascarar su confusión interior. El corazón de Hermione se hundió, una mezcla de tristeza y anhelo asentándose dentro de ella. Ella anhelaba un simple beso, un "te quiero", un momento tierno al que aferrarse. Pero las obligaciones de Y/N tuvieron prioridad, dejando a Hermione de pie allí, sintiendo una sensación de vacío a su paso.
