En los pasillos encantados del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería, T/N Crimson, una bruja de 16 años con un espíritu indomable, se embarcó en su quinto año, un capítulo fundamental en su viaje mágico. Los ecos de los susurros resonaron a través...
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Y/N salió de su dormitorio, su corazón latiendo en el pecho, sus pasos resonando a través de los pasillos de Hogwarts mientras la lluvia bajaba por las paredes del castillo. Con cada paso, su desesperación creció, su único enfoque estaba en encontrar a Hermione. Ella siguió el sonido de los sollozos de Hermione, sus ecos inquietantes que la guiaban hacia el patio.
Cuando llegó al espacio abierto, el aliento de Y/N se le atrapó en la garganta al verla. Hermione se quedó sola en el centro del patio, su cuerpo temblando de emoción, sus túnicas se aferraban a ella como una segunda piel. La lluvia cayó en cascada sobre ella, remojándola hasta los huesos, reflejando las lágrimas que corrían por su cara.
El corazón de Y/N se rompió cuando se dio cuenta del peso de las palabras que se habían dicho. "Hemos terminado". Las palabras repercutieron en su mente, cada repetición tallando una herida más profunda en su alma. No podía soportar la idea de perder a Hermione, el amor de su vida.
Las lágrimas brotaron en los ojos de Hermione, mezclándose a la perfección con las gotas de lluvia que adornaban sus mejillas. Y/N llamó el nombre de Hermione, su voz lentada de desesperación y amor, con la esperanza de que sus palabras llegaran a la chica destrozada antes que ella.
Pero mientras Y/N estaba en el umbral, a solo un paso del aguacero, ella dudó. La lluvia, que se derramaba implacablemente desde los cielos, parecía reflejar la agitación dentro de su propio corazón. Se sentía como una metáfora de su situación actual, la incertidumbre y la renuencia que la impiden de sumergirse por completo en la tormenta que los rodeaba.
Por un momento, el tiempo se detuvo. La mirada de Y/N se detuvo en Hermione, su corazón dividido entre el deseo de correr hacia ella y el miedo a empeorar la situación. Ella anhelaba abrazar a Hermione, para ofrecer consuelo y tranquilidad en medio de su amor destrozado. Pero el dolor en los ojos de Hermione, la cruda vulnerabilidad grabada en su cara, le dio una pausa.
Con un fuerte suspiro, Y/N dio un paso adelante, cerrando la brecha entre ellos. Ella abrazó la agridulce verdad de que a veces la lluvia debe caer, y los corazones deben capear la tormenta. Y mientras las gotas de lluvia se mezclaban con sus lágrimas, se acercó a Hermione, desesperada por sentir el cálido abrazo de la chica.
"Hermione, por favor". La voz de Y/N temblaba con una mezcla de desesperación y dolor mientras corría hacia la chica que amaba.
En ese momento, todo lo demás se desvaneció, y todo lo que podía ver era a Hermione de pie frente a ella, su cara manchada de lágrimas grabada de angustia. Los brazos de Y/N envolvieron a Hermione en un abrazo desesperado, buscando consuelo y conexión en medio de su mundo desmoronado.
Por un momento fugaz, Hermione se inclinó hacia el tacto, permitiéndose engullir por la calidez y el amor de Y/N. El abrazo familiar se sentía como un santuario, un refugio de la tormenta que hacía estragos dentro de ellos. Pero tan pronto como Y/N la sostuvo, la determinación de Hermione se endureció, y ella empujó con fuerza a Y/N, rompiendo la frágil conexión que habían recuperado momentáneamente.
