Capítulo 20

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Un revolucionario

Usopp y Franky parecían bastante involucrados en su competencia con Vanda; sin duda, la Usopp era claramente superior a los otros dos.

"¡Estoy SÚPER seguro de que esta vez seré yo quien gane!" La frustración del cíborg por la derrota era evidente; toda su concentración no servía de nada, y la arqueóloga que los observaba desde lejos lo sabía bien.

Robin, por otro lado, estaba aburrida, no porque no hubiera nada que hacer en esa isla, ni mucho menos porque los Minks fueran mala compañía; simplemente se podía decir que estaba de mal humor y, con la batería social casi completamente descargada, apenas toleraba estar entre tanta gente; no se le podía culpar a nadie más que a su carácter y a su necesidad habitual de encontrar un momento de paz para ella misma.

Pensó que dar un paseo por el bosque de la ballena sería una buena idea, no porque tuviera algo que ver con la repentina desaparición del espadachín, que desde que Luffy se lanzó desde Zunisha parecía haberse volatilizado; quizás simplemente se había perdido como de costumbre, pero lo más probable es que algo hubiera sucedido; lo vio durante la partida de su capitán, y esa expresión en su rostro era difícil de malinterpretar. Zoro se estaba claramente isolando.

"Oi, ¿crees que deberíamos ir a buscar a Zoro?" Usopp se acercó a Robin junto a Franky, aún con la mirada victoriosa de quien ha ganado por enésima vez. "¡Seguro que está SÚPER perdido!" - "Deberíamos construir un GPS e implantárselo en el cerebro." - "¡Auuuu! ¡SÚPER idea!" Robin los observó a ambos con una pequeña sonrisa en los labios. "Por supuesto que te estarás aburriendo sin libros, sin Nami y sin Zoro para molestar."

"¿Molestar a Zoro?" Tal vez fue demasiado fría al formular su pregunta, o al menos eso pudo imaginar al ver a Usopp y Franky intercambiar una mirada de crisis -"No, nada, es solo que tengo la impresión de que te diviertes poniéndolo en aprietos." Robin sonrió ampliamente frente a sus compañeros en apuros, haciéndolos relajarse al instante; por alguna razón, Usopp temía que con sus poderes, Robin lo reduciría peor que Spandam aquella vez en Enies Lobby, pero afortunadamente le estaba sonriendo.
"Es divertido, un poco como asustar a ti y a Nami." Se rió apenas, y Usopp forzó también una risa como Franky, por alguna razón aún temía por su vida.

Cuando Robin se puso de pie, Usopp dejó escapar un grito de terror, que el cíborg interrumpió tapándole la boca con una mano, tan grande como estaba, parecía que iba a sofocarlo.
"Creo que daré un paseo por el bosque." Anunció, limpiando la ropa de los restos de tierra.
"¿Quieres que vaya contigo?" Franky se ofreció amablemente, pero ella negó con la cabeza, explicando que prefería explorar sola, recibiendo como respuesta un enorme pulgar hacia arriba frente a su rostro; ella, después de despedirse de los dos, se puso en marcha, sin un camino preciso, o al menos eso quería creer.

Caminó por algún tiempo, sin poder decir bien cuánto, todo el viaje lo pasó reprimiendo el impulso de agarrar su vivre card y alcanzar al espadachín. "¡Este papel dice que volvamos atrás!" Esa voz fue suficiente para perturbar el frágil equilibrio emocional de la mujer, que no pudo evitar sentirse más nerviosa; él, a unos diez metros más adelante, se rascaba la cabeza, exasperado y confundido: hasta ese momento siempre había logrado moverse con ese pedazo de papel sin perderse, ¡pero ahora parecía que ya no funcionaba! ¿Por qué diablos ahora el papel le decía que volviera atrás? De hecho, ya llevaba un rato dando vueltas en círculo... ¿Se habría roto acaso?

Su Haki respondió por él; esa maldita carta aún funcionaba perfectamente y él la sostenía en la mano mientras trataba de señalar cuán cercana estaba realmente Robin.

Ella, dando algunos pasos, pudo admirar la escena de ese hombre en total dificultad, intentando esconder su Vivre Card. Normalmente, una escena así la habría divertido, sin embargo, se mantuvo seria, incluso cuando decidió hablar primero: "Has desaparecido." - "Lo sé."
No era necesario que preguntara en voz alta algo como '¿qué pasa?' porque su mirada inquisitiva era más que suficiente, y sin embargo, terco como era, quiso evitar su mirada, como si eso pudiera bastar para escapar de ella. Se sentó en una gruesa raíz cruzando los brazos, decidido a recoger toda la calma que tenía en su cuerpo.

Ella, empeñada en descubrir más ahora que lo tenía frente a ella, se acercó, manteniendo cierta distancia, preguntándose si era más porque se sentía irritada por su comportamiento o porque él evidentemente estaba irritado con ella.

"Te oí hablar con Nami." Esta vez, la mirada se había encajado en sus ojos, con una dureza que casi nunca le había pertenecido, al menos no en estas últimas semanas.
"¿Puedo saber exactamente qué escuchaste?" - Zoro se preguntó si ella se estaba burlando de él - "¿Por qué no me dijiste que hay otro?" - "Porque no es así." - "Me dijiste que no te acostaste con nadie mientras estabas con los revolucionarios."

Robin lo observó, conteniendo un suspiro que sabía que solo irritaría más al espadachín, quien la miraba con una expresión reprobatoria, esperando. Recordó esa noche en Baltigo y una pequeña sonrisa amarga encontró espacio en su rostro, apaciguando de inmediato los nervios del espadachín.
"Es así." Dijo él. La sonrisa se apagó por completo en el rostro de ella y Zoro pudo observar cómo esos ojos comenzaban a vagar en su mente, mirando un punto impreciso del bosque.

***

"Oh, mira, ¡viene Sebastian!" Koala había guiñado un ojo; Robin se fingió indiferente sin apartar la mirada del libro; podía engañar a la chica, pero no a sí misma, y para ser honesta, se sentía un poco nerviosa.

"Koala, Nico Robin." Siempre la llamaba por su nombre y apellido, lo hacía a propósito ser tan formal.
Habían pasado algunos meses desde su primer encuentro, y Robin tenía que admitir que sentía un cierto interés por él. Lentamente, incluso el pensamiento de Zoro parecía volverse menos obsesivo, y Robin comenzaba a considerar la idea de seguir adelante, no tanto porque pensara que podría ser una historia con futuro, sino más bien porque esperaba dejar atrás de una vez por todas la historia del espadachín...

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Holaaaa

Lamentablemente tenía que interrumpir el capítulo aquí, ¡pero prometo que voy a actualizar pronto!
Soy muy emocionada por la historia de Robin y Sebastian 🥳🥳

De verdad me enamore de ese hombre (casi me da gañas de escribir una historia con él PERO no lo haré no se preocupen) 🥹
Y ya que yo estoy enamorada de Sebastian aquí algunas informaciones extra sobre el:

Es un poco major que Robin, aquì Seba tiene 33 años y Robin casi 29 (ahora tienen 34 y 30)
Sebastian es un hombre muy robusto: tan musculoso como Zoro y más alto (1.95 m)
Tiene ojos verdes, es moreno con piel morena y parece muy masculino.

Le gustan mucho las cerezas y el color rojo (tiene algo a que ver con su infancia pero nadie sabe de eso)
Y le gusta mucho Robin (¿Cómo culparlo?)
No utiliza frutas

Se ve algo así y besa muy bien 🫣

Se ve algo así y besa muy bien 🫣

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Nos leemos pronto 👩🏼‍💻

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