Almas Reencontradas - Freenbecky

Sorpresa de cumpleaños

Pov de Becky.

Habían pasado unos cuantos días después de la pequeña discusión que habíamos tenido respecto al problema de alcohol de Freen. Ella me dijo que de verdad trataría de superarlo. Cuando ella regresaba de trabajar, le pedía que soplara para comprobar que no había tomado. Yo confíaba en ella pero eso no era algo que ella pudiera controlar. Sabía que yo tenía que poner de mi parte para ayudarla. También le rellenaba una botella con agua antes de que saliera, que por supuesto, revisaba cuando la traía por la tarde. Ella no había estado bebiendo, pero sabía que quería hacerlo.

Yo cumplí con mi parte y estuve asistiendo a todas las consultas y citas de fisioterapia. Hasta ahora no había ningún cambio.

Lo más importante en este momento es que era siete de agosto.

Al día siguiente sería el cumpleaños de Freen.

Ella nunca lo había mencionado pero lo tenía claro ya que ella tenía un calendario en sus oficina con todos los cumpleaños de los niños, también estaba anotado el de Freen y Nam. Un día quise tomarle foto al calendario para felicitar a los niños cuando llegara el suyo y me encontré con el de Freen en agosto.

Quería salir desde ahora para prepararle una fiesta sorpresa en el orfanato, pero no quería dejarla un día entero sola. Me daba miedo que no pudiera controlar por su cuenta las ganas de beber.

Esta mañana, cuando salió a trabajar, le llamé a Nam.

-Nam, sé que mañana es el cumpleaños de Freen. -Dije después de que ambas nos saludámos. -¿Cómo le gusta celebrarlo normalmente?

-La verdad es que no lo celebra nunca. -Admitió. -Solo lo tiene anotado en el calendario porque los niños se lo pidieron para que pudieran felicitarla.

-¿Crees que se moleste si le preparamos una fiesta sorpresa? -Pregunté.

-Si lo haces tú, no lo creo. -Aseguró. -Ella ama todo lo que haces.

Sonreí.

-¿Me ayudarías con los preparativos? -Le pedí. -Quisiera salir pero ya sabes que tengo que supervisarla con el alcohol.

Nam accedió.

Le mandé una lista con todos los aspectos que habían que cubrir.

También, le llamé a mi hermano y le conté. Le pedí que mañana en la mañana estuviera aquí para que me llevara temprano a un par de lugares.

No sería una fiesta ostentosa ni nada por el estilo, sería una pequeña celebración con sus amigos y con los niños. Sabía que eso la haría feliz.

Cuando ella llegó por la tarde, me saludó como de costumbre.

Entró, me dio un beso corto y me preguntó cómo había estado mi día.

-Freen... -La llamé.

Ella se dio la vuelta.

-Es verdad. -Recordó. -Lo siento.

Regresó a donde estaba yo y sopló.

No olía a alcohol.

Íbamos bien.

-¿Cómo te fue con el agua? -Pregunté.

Ella me extendió la botella que yo le rellenaba todos los días.

Había tomado más de la mitad, era un avance.

La destapé y la probé.

Sabía que solía rellenar las botellas de agua con alcohol, tenía que comprobar que no fuera así.