𝐀𝐧 𝐀𝐫𝐜𝐡𝐞𝐫'𝐬 𝐏𝐫𝐨𝐦𝐢𝐬𝐞

Capítulo 47: Una tormenta que se avecina

Beta leída por Shigiya y Fluffy Slayer

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-Feoh-

Como Princesa Caballero y co-líder de Feoh, las responsabilidades de Alicia eran múltiples. Desde supervisar el entrenamiento de los Caballeros hasta gestionar los asuntos internos dentro del reino, era común que ella delegara esto último en Beardsley cuando sus deberes más urgentes lo exigían. Hoy, sin embargo, fue una ocasión especial. Beardsley la convocó para que se reuniera con un arzobispo que acababa de llegar de Thorne para negociar un acuerdo sobre tierras.

Como estaba ansiosa por impresionar a la Diosa Renacida que actualmente reside en su Reino, la Princesa Caballero rubia tomó todas las precauciones para garantizar que la reunión se desarrollara rápidamente bajo su supervisión. Con Beardsley acompañándola, recorrieron la parte oriental de Feoh a caballo, rodeados por guardias alineados en las calles ahora abarrotadas para su protección.

—Alicia-sama, Feoh ha prosperado enormemente durante estos últimos años. Tus alabanzas han sido cantadas por innumerables nobles y comerciantes en todo el país, incluso hasta Thorne —el arzobispo, Cecile Savant, declaró en voz alta, su inmaculada túnica blanca apenas ocultaba sus engañosas intenciones. Mientras hablaba, lanzó subrepticiamente una mirada a Alicia Arcturus, cuya máscara de falsa adulación era cada vez más evidente—. Un verdadero paraíso en la tierra de Eostia. Tengo la suerte de tener la oportunidad de establecer una catedral aquí en nombre de nuestra Diosa Renacida Celestine Lucross.

—Me elogia demasiado, Arzobispo. Mi hermana Prim y Beardsley han sido fundamentales para nuestra prosperidad. Y, por supuesto, fueron mis padres quienes pusieron los cimientos. Yo simplemente agregué los toques finales —Alicia habló con humildad, con los ojos brillantes. con orgullo mientras el arzobispo elogiaba su reino.

—Sí, de hecho, nuestra joven princesa ha demostrado ser una líder capaz. Enfrentarse a las fuerzas de la Reina Oscura y al mismo tiempo lograr mantener vigilada su reino es un testimonio de su perspicacia y resistencia —montado en el tercer caballo, Beardsley ofreció una amable sonrisa de abuelo y agregó—: Las familias nobles Pantielle, Monleigh, Talvan, Branmond y Davenmere se han establecido aquí. Dice mucho que incluso el Marqués Davenmere, quien una vez se burló de Ken como un pozo corrupto de hooligans y campesinos sucios, ha llegado a ver el valor del gobierno de Alicia-sama. Sin mencionar que Maia llegó al extremo de desterrar a la familia de sus tierras.

Alicia resopló, disgustada por las acciones precipitadas de su compañera Princesa Caballero.

—Humph, como se esperaba de Maia. Ella no comprende el concepto de nobleza, menospreciando a aquellos que han trabajado incansablemente para mantener a Eostia segura y próspera —una chica sucia como ella que creció en las calles nunca comprendería la sangre, el sudor y las lágrimas que las familias nobles han puesto para crear un reino estable. Era absurdo confiar la responsabilidad de administrar la tierra a alguien sin una educación adecuada ni antecedentes nobles. Esas personas sólo eran capaces de causar caos y saqueos—. ¿Es ésta el área que deseaba adquirir el arzobispo Cecile?

Al abandonar las bulliciosas calles rebosantes de vida y belleza, llegaron a una parte más empobrecida del reino. Miles de pequeñas casas de madera estaban apiñadas, muchas de ellas en estado de abandono y mal estado, y un olor fétido llenaba el aire, asaltando su nariz; era un marcado contraste con lo que había presenciado en la parte central de Feoh.

A pesar de sus intentos de permanecer imparcial, no pudo evitar sentir que este lugar era una monstruosidad en su reino.

—Sí, esta zona sería un lugar excelente para que la Iglesia erigiera una gran catedral en nombre de la Diosa —dijo Cecile, con una amplia sonrisa en su rostro.