Capítulo trece.

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Su día había ido de completa maravilla.

Despertó en el departamento de Yeonjun, no habían dormido juntos ya que el mayor insistió en quedarse en el sofá, aún así compartieron el desayuno y la caminata hacía la escuela, tomados de la mano. Disfrutó con sus amigos el receso, porque al parecer que Yeonjun estuviese de buen humor hacía que todos estuviesen de buen humor.

Como cereza del pastel a su maravilloso día Yeonjun le había dado un pequeño beso de despedida, muy rápido y a escondidas ya que no querían que sus amigos se enterarán por el momento.

Pero ahí se encontraban, a unas pocas calles de su casa. La ilusión de felicidad se desvaneció, sabía que su día iba a arruinarse en cuanto cruzara la puerta de su casa.

La noche anterior se había olvidado completamente de mandarle un mensaje a su padre para avisarle donde estaría y que no volvería a casa, todo porque la sesión de besos que tuvo con Yeonjun lo dejó muy relajado y adormilado.

La había cagado, porque si solía enojarse por retrarse con el horario de llegada estaría cabreado porque no había llegado.

Abrió la puerta con extremo cuidado intentando ser silencioso, de la misma forma la cerró, sin embargo supo que no tuvo exito ya que enseguida comenzó a escuchar fuertes pisadas que se acercaban en su dirección. No tuvo el valor de voltearse.

- ¿Dondé mierda estabas? -es lo primero que le dice, casi grita, su padre. Su voz está bañada en enojo y lo unico que logra es que Beomgyu se estremezca en su lugar.

No quiere voltearse pero sabe que si no lo hace solo logrará cabrear más a su padre, así que lo hace, arrepintiendose al instante cuando recibe una bofetada que lo hace girar el rostro por la fuerza. Su mejilla arde, la mano de su padre es pesada.

- Responde maldita sea -Beomgyu lo observa, sus ojos parecen inyectados en sangre por la ira. Respira profundo intentando calmarse.

- L-lo siento, fui a la casa de un amigo y me quedé dormido -es su excusa, pero para su padre no es suficiente.

Lo próximo que Beomgyu sabe es que su padre lo empuja contra la puerta y comienza a gritarle cosas que no puede comprender, su cabeza ha impactado contra la puerta de metal y se siente mareado. Intenta mantenerse enfocado en su rostro para que él no se enfade más y sepa que le esta prestando atención aunque lo único que quiere hacer es sentarse en el suelo a llorar.

- ¡Nooo! -escucha la voz de su hermanito Jungwon-. ¡Déjalo en paz! -grita desde las escaleras con los ojos llenos de lágrimas, sin saber que está desafiando a un monstruo.

Su padre intenta ir tras su hermano menor y eso es lo que hace reaccionar a Beomgyu, lo sigue tambaleandose y aún cuando se cae al suelo se aferra a su pierna para que no vaya contra Jungwon. Eso parece enloquecer a su padre, quién lo toma con fuerza de su cabello para alzarlo y golpear su rostro, sin importarle los quejidos de su hijo ni mucho menos los gritos del más pequeño.

Jungwon grita desesperado mientras corre tras su padre, golpea sus piernas gritando la palabra "Monstruo". Su padre lo mira con ira y antes de poder tomarlo del pelo como tiene a Beomgyu él lo detiene, sujetando su brazo con fuerza.

Beomgyu es lanzado al suelo, el hombre patea su rostro con fuerza y luego sus costillas dificultandole el respirar.

Minjeong aparece corriendo escaleras abajo para sacar a Jungwon de ahí quién grita y ruega por ayudar a su hermano mayor.

Beomgyu le pide entre lamentos a su padre que se detenga pero él parece estar muy enojado como para reaccionar, lo unico que escucha es a su madre quejándose del ruido en la sala, seguramente tirada en el sofá o suelo totalmente alcoholizada y drogada.

Your death » YeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora