01

876 41 3
                                    

Me adentré a la base quitándome los lentes de sol, había aterrizado hacia un rato en San Diego y quise ir a por pura nostalgia antes de empezar la misión.

Sonreí un poco recordando los momentos que viví mientras estuve en Top Gun. En la galería de la entrada había fotos de muchos pilotos, incluyendo a mi padre; estaba mirándolas cuando noté una presencia a mi costado.

– Maverick – lo saludé

– Snow

– Escuché que estuvieron a punto de retirarte

– Así es – admitió con una leve sonrisa – Pero Tom hizo de las suyas de nuevo.

– Por supuesto

Sabía bien que realmente había obligado a Cyclone para que lo aceptara como parte de la misión, aunque realmente eso me daba igual.

– Aunque creo que el almirante no va a ser el único que no esté tan feliz de verte

– ¿A qué te refieres? – dijo confundido.

– Nada, solo digo – asintió con duda.

Su respuesta me dejó en claro que no tenía ni idea de que Bradley iba a formar parte de la misión, esto iba a ser divertido, aún con la posibilidad de que algo saliera mal entre ellos.

– Por cierto ¿Qué haces aquí? – me miró con una ceja alzada – ¿Tu padre te llamó?

– No – negué rápidamente – Ni siquiera sabe que vine, casi no he hablado con él últimamente, no he tenido mucho tiempo ya sabes que con las misiones es...complicado

– Claro – respondió vagamente – Tengo que ir a la oficina, te veo después

– Nos vemos Mav

Observé cómo se alejaba y justo en ese momento mi teléfono sonó, en la pantalla apareció el nombre de mi padre pero no contesté; seguramente ya se había enterado de que estaba en San Diego pero no podía verlo de momento.

Me quedé unos minutos más admirando las fotografías y después de ir al departamento a cambiarme me dirigí a la playa, donde sabía que estarían los demás; llegué al cabo de unos treinta minutos y me adentré al Hard Deck yendo directamente hacia la barra, donde se encontraba Maverick conversando con Penny, quién me observó emocionada.

– ¡Cassie! – me sonrió ampliamente mientras salía de detrás de la barra – No me esperaba verte por aquí linda – dijo mientras me abrazaba. Pete me saludó con la cabeza.

– Hola Penny, ya sabes, las misiones surgen de imprevisto

Me quedé unos minutos hablando con ellos cuando a lo lejos pude distinguir dos voces familiares, dejé a los mayores poniéndose al día y caminé hacia allá, me detuve a unos cuantos pasos de aquellas personas a las que no veía hace mucho tiempo.

– Te apuesto 20 a qué no logras tres seguidos – dijo con seguridad el moreno. El rubio lo sorprendió acertando dos dardos en el centro sin titubear y el tercero con los ojos cubiertos por la mano de su compañero.

– Parece que no has perdido el toque – dije llamando la atención de los dos amigos, que no se habían percatado de mi presencia.

– Snow, ni más ni menos – Hangman sonrió altanero – Y yo que nos creía especiales Coyote. Y ahora resulta que invitan a cualquier piloto

Le di una sonrisa sarcástica

– Qué tal Snow – me saludó el moreno

– Tiempo sin verlos Coyote

Lover Of Mine | Bradley BradshawDonde viven las historias. Descúbrelo ahora