Of Bats and Snakes

HERMES III

-Y…¿no os apetecerá unas partidas, verdad?

Pregunto mientras barajo mis cartas, con una sonrisa en mi rostro aunque por dentro tenía un gran cansancio.

Llevaba días viajando de panteón en panteón, buscando a Artemisa.
(Aunque se suponía que la había secuestrado alguien de lo nuestros pero…)

No era el único, por supuesto. Como dioses mensajeros, Tritón y yo teníamos esa “ventaja” de poder viajar y que no resultara raro encontrarnos allí.

Ahora mismo me encontraba en el Hotel Valhalla, en uno de sus numerosos bares que tenían los nórdicos.

Los otros tres dioses se sentaron alrededor de la mesa e invité a Tritón a sentarse a mi lado.

Entonces pusimos el dinero una vez sentados todos.

Yo y Tritón sacamos un montón de dracmas de oro, Thor tenía un montón de monedas de oro genéricas junto a Frey.

Jugamos como normalmente hacíamos durante algunos juegos, para no hacer sospechar nada.

No nos podíamos permitir admitir que habían secuestrado a una de las diosas principales de nuestro panteón, podría iniciar una guerra (según mi querido padre y hermana) aparte de la que teníamos encima. Sería la oportunidad perfecta contra nosotros.

Finalmente, esperamos a que una conversación informal llenara la habitación.

Le hice un gesto con la cabeza a mi acompañante para que se diera cuenta que teníamos que hacer ya nuestro interrogatorio.

-Así que allí estaba yo, solo en una colina, rodeado de enemigos hasta donde alcanzaba la vista.- dijo Thor.

-¿Y luego qué pasó? - preguntó Tritón con aparente entusiasmo.

-Morí, por supuesto. -dijo Thor con una gran risa, con Frey uniéndose.

-Dos pares. - sigue diciendo, dejando sus cartas.

Frey y Tritón resoplan.

-Escalera. -digo interrumpiendo al dios nórdico que había estado a punto de barrer la olla.

Los tres dioses refunfuñaron de buen humor.

Pasó otra ronda.

-Me retiro. -dijo Tritón, poniendo sus cartas boca abajo. Lo único que había conseguido era una mano de nada, y sentía que no había nada más en las cartas.

Él continuó su historia.

-Así que Kym y Padre seguían luchando entre ellos, ¿no? Y descubrí sobre lo que estaban discutiendo.-toma un sorbo de su bebida asgardiana- Naturalmente me puse del lado de mi hermana, ella tenía razón después de todo. Padre no lo vio así, por lo que terminó castigándonos.

El resto se ríe yo me uno, recordando las veces que me había puesto del lado de mis hermanos (especialmente Apolo) cuando discutían con Padre.

El juego continuó conmigo ganando, claro (no garantizaba que no estuviera haciendo trampas).

-Imagínense mi horror cuando mi padre se me acercó, todavía vestido con la túnica de mi madre después de perder esa apuesta.- dijo Thor. -Me miró detenidamente y luego dijo: 'No creo que eso te quede bien, hijo'. Me sentí mortificado.

Decidí empezar ya el plan.

-Ah, familia, qué haríamos sin ella ¿cierto?- Tritón asiente a mi lado, con lo otros afirmando verbalmente. Doy un suspiro teatral. - Aunque nos peleemos siempre volvemos a unirnos, aunque se haga la espera eterna.