HERMES IV

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He de admitir que podría haber llegado mucho más pronto a nuestro destino, la casa de Sally.

Pero en verdad ambos disfrutamos de charlas sin sentido 

Pero la verdad era que estuvimos dando varias vueltas a la manzana por unos cuantos minutos mientras manipulaba el tiempo y espacio a mi voluntad. 

No mucha gente sabía que yo al ser un dios de los viajes y básicamente el cartero del Olimpo tenía estas habilidades en concreto. 

Y aún así no daba a basto con la entrega de paquetes y mensajes a todo el Olimpo. 

Aunque ciertamente podría haberme dedicado hasta el fin de mi existencia a ser el cartero, un día decidí simplemente tener mis propios trabajadores. 

Los espíritus del viento podrían ser rápidos, pero pronto recibí quejas de que las cosas no llegaban a tiempo. 

Decidido a que mi nueva empresa no acabará yéndose a la ruina inventé nuevas formas de comunicación. 

A algunos en el Olimpo no les convencieron estas nuevas formas, por lo que optaron por el sistema de comunicación habitual. 

Por ejemplo Ares se la pasaba estupendamente creando el caos en Twitter y Afrodita vivía feliz creando tendencias de ropa a veces demasiado estravagantes. 

Otros, sin embargo, eran muy aficionados a la comunicación interconectada que había creado un día que estaba inspirado. 

Internet había tenido un éxito mundial. 

Pronto los humanos crearon sitios web de comunicación y yo les seguí con mi propia versión divina. 

Hermes Espress era un éxito en el mundo divino, tanto digital como presencialmente (aunque Amazon con las amazonas me estaban ganando terreno…).

Mientras mis trabajadores entregaban paquetes o cartas a cualquier ser que fuera del mundo divino, yo tenía la obligación de ser el mensajero oficial del consejo olímpico (con ayuda de Tritón cuando por algún motivo tuviera que estar bajo el agua). 

Después de mi monólogo y despotricar sobre las quejas que tenían algunos de los dioses, con Sally haciendo comentarios aquí y allá, ella me contó sobre su trabajo anterior y el actual. 

A continuación habló sobre que ella ahora había tenido la oportunidad de retornar sus estudios y que posteriormente quería escribir un libro basado en su vida. 

Yo la dije que estaba seguro que lo lograría, pero la indiqué que podría hacer un sacrificio a la misa de la historia, Clío, para reforzar sus esfuerzos. 

Ella me lo agradeció con una sonrisa que automáticamente respondí. 

Sin embargo de momento no hablamos del tema de los hijos extensamente, alguna mención pero nada más. 

Yo por supuesto que la conté que estaba orgulloso de todos y cada uno de mis hijos. Inmortales o no. Pero todavía sentía una brecha en el corazón por Luke, el hijo que tenía con May, quién había profetizado un horrible destino para él. También agregando que actualmente era el comandante del ejército de los titanes.

Y luego estaba Eliza… 

Me detuve de mis pensamientos fingiendo una sonrisa hacia Sally. 

Ella sólo me miro con cara comprensiva y menciono casualmente que ella había llevado a su hijo con unas amigas a pasar unos días de acampada. 

No sabía muy bien lo que pudiera significar eso con la mirada de reojo que me echó. 

Justo cuando iba a decir algo, ella me interrumpió diciéndome que llevábamos cinco minutos parados en frente de su apartamento. 

Of Bats and SnakesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora