«Es una cita de mentira». «¿Por qué estoy tan nerviosa?». Apo se hacía esa pregunta mientras tiraba ropa sobre la cama.
Como todos los demás, no le gustaba. O eran demasiado elegantes o demasiado aburridos, o colores demasiado llamativos...
Frustrado, se pasó una mano por el pelo, deseando tener el estilo que tenía su hermana. Tara y Thorn siempre iban elegantísimos y llamaban la
atención, pero incluso antes de convertirse en la señora Romsaithong
todo el mundo decía que Tara parecía más una modelo que una pediatra.Apo miró su reloj, Solo faltaba una hora para las siete y aún no había encontrado una rooa que le gustase. El no salía mucho, y gracias a Casey Belvedere se veía obligado a salir con un hombre al que apenas conocía…
Por el momento las cosas iban bien. Belvedere no había ido a trabajar, y todo el mundo parecía respirar más tranquilo. Nadie tenía que mirar por encima del hombro, temiendo que el doctor Belvedere apareciese.
El no era la única que lo veía como un ser insoportable.
Pensando que debía seguir el consejo de Tara y pasarlo bien para variar, eligió unos pantalones vaqueros y una camisa 👚 verde. Estaban a mediados de marzo y en Florida la gente saldría a la calle en manga corta, pero en Dénver aún era invierno. Y dudaba que el pudiera acostumbrarse al frío.–Y por eso tienes que terminar tu residencia –murmuró para sí mismo mientras entraba en el baño para ducharse–.
Luego podrás volver a Florida.
Media hora después, duchado, arreglado y vestido, sonreía ante el espejo.
Mile debía haber cancelado alguna cita para salir con el esa noche, y lo mínimo que podía hacer era estar presentable. Pero cuando miró el reloj comprobó que solo tenía veinte minutos y aún no se había arreglado el pelo. Estaba sacando un Gel del cajón, cuando le sonó el móvil y en la pantalla vio el nombre de Mile.¿Llamaría para cancelar la cita?.
Hizo un esfuerzo para controlar las mariposas que le revoloteaban por el estómago.
–¿Sí?
–Estoy aquí.
–¿Dónde?
–Delante de tu casa.
–Pero… llegas temprano.
–¿No has terminado de arreglarte?
–Pues… –Apo se miró al espejo– aún no me he arreglado el pelo.
–Tengo tres hermanas, así que lo entiendo. Puedo esperar… dentro.
–Espera un momento, te abro enseguida.
Alegrándose de estar vestido, Apo se dirigió a la puerta.
«Tranquilízate, solo es Mile, Es casi de la familia», se dijo a sí mismo.
Pero cuando abrió la puerta, eso no le sirvió de nada. Tuvo que hacer un esfuerzo para disimular y fracasó
miserablemente. Estaba como hipnotizado. Si le había parecido guapo con un traje de chaqueta, esa noche era un escándalo. Había algo especial en un hombre alto blanco y guapo con pantalones vaqueros, camisa blanca y
chaqueta de pana oscura. Y el sombrero Stetson servía para dar el toque final.–Ah, ahora lo entiendo. Por favor, hazte algo en el pelo ahora mismo.
Apo se llevó una mano a la cabeza, Atónito. Pero al darse cuenta de que era una broma tuvo que sonreír.
–¿Tan mal está?
–A tu pelo no le pasa nada. Es precioso.
–No, qué va. Es demasiado liso.
–Unos lo tienen liso, otros lo tienen rizado.
Como he dicho, tengo tres hermanas.Apo conocía a sus hermanas y le parecían encantadoras.
–¿Quieres tomar algo mientras esperas?
–¿Qué tienes?
–Refrescos, cerveza, vino y limonada.
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Un Hombre Auténtico Y Unico
Romance¿Qué ocurre cuando un novio falso decide convertirse en un amante real? Ningún hombre de sangre caliente podría desaprovechar la oportunidad de salir con la guapísimo Apo Nattawin, y Mile Romsaithong era un hombre de sangre muy caliente. Para ayud...