𝗦𝗼𝗺𝗲𝗼𝗻𝗲 𝗢𝗹𝗱𝗲𝗿 || Baby, am I a little secret?
Eighteen, I'm old enough to keep it
Yeah, guys my age just aren't the same
I'm young and that's okay.
Regina Menccina se enamoro del mejor amigo de su hermano, se emborrachó en su fiesta de cu...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
⋆｡˚𝖤nglish Class˚｡⋆
Matteo usaba los lentes y mordía la pluma mientras leía su libro. MI hermano me había ayudado un poco con Inglés pero no eran tan buen profesor. En el examen supongo que me fue bien, recibo los resultados el lunes. Veo que encierra algo con la pluma y vuelve a morderla. Me quité los audífonos y lo imite. A leer. Era fácil de entender hasta que me pedía tiempo verbales. Mierda. Me acosté sobre mis brazos y observé a mi hermano. ¿Cómo le hacía? Se concentra y entiende.
—Deja de verme y esta atenta al timbre, Enzo vendrá a ayudarte con Inglés.
—¡¿Qué?!
—Se ve que le agradas, yo no lo haría.
—Idiota, ¿por qué me ayudaste ayer?
—¿Conoces la lástima?
Rodé los ojos. Diez minutos después Enzo estaba a mi lado hablando y hablando pero yo solo prestaba atención a lo ronca que a veces sonaba su voz. Seguía sin superar que lo bese, que tiene novia y que nos peleamos siendo solo conocidos. Todo en unos días. Se veía tan atractivo concentrado en la lección. Chasqueo los dedos y reaccioné.
Me puso a hacer unos ejercicios los que logré por milagro. Seguimos estudiando una hora más. Eran las ocho, temprano para dormir y tarde para salir. Los dos siguieron en otras cosas y yo los observé. En especial a él. ¿Debería pedirle perdón? Estuve enojada con el por una estupidez. No debo enojarme que el tenga una vida. ¿Quién será la chica? Me muero de curiosidad pero Matteo no hablará, ni torturandolo con cosquillas habla. Es demasiado fiel.
Aburrida por oír susurros matemáticos subí las escaleras. Prendí la televisión y me di un baño. Bajaría a cenar pero solo lo vería a él. No tuve que hacer eso, pues de nuevo estaba en mi habitación muy serio y con una distancia prudente.
—Últimamente te la vives en mi habitación, ¿te gusta?
—Es linda, me gusta la decoración.
El chico se veía despreocupado, tranquilo, ordinario. Su vida no había cambiado luego de aquel beso, y puedo sentirme celosa. Mi vida dió un giró tremendo, pero Enzo seguía como siempre. ¿Nada cambió en su mente? ¿Nada? Que el me viera en pijama era normal, mis padres nunca notaban esos detalles. En realidad nunca estaban en casa. Enzo era un integrante más, todos querían que nos viéramos como hermanos aunque claro, no es posible.
El chico sacudió su cabello y coloco las manos en sus caderas. Sonrió de lado y señaló el televisor. El era el único que no se burlaba de mí obsesión con las novelas, ¿ahora lo hacía? Asentí mirando embobada al actor.
—Ese chico... Lorenzo —suspiró...
—¿Cómo se llama tu novia? —elevo las cejas sorprendido —. Tu sabes de Lorenzo, ¿por qué no puedo saber de ella?
