Yami había decidido quedarse, por un rato después de ser libre, encontró trabajo como mesero en un restaurante. Kaiba como siempre iba a ese restaurante solo para molestarlo y tratar de humillarlo. Pero Atem siempre se defendía, sin embargo cuando llegó como de costumbre, alguien más estaba humillando a Atem.
Seto sin dudarlo lo defendió tomándolo del brazo, lo saco de aquel lugar.
-Que demonios fue eso?-
Atem no se atrevía siquiera mirarlo a los ojos y como culparlo, el comensal le había arrojado el espagueti a la cabeza, además de arrojarle la bebida a su ropa. Lo subió a la limusina y lo llevo a la mansión, lo llevo al cuarto de baño y mientras su ropa se secaba usaría ropa de Mokuba. Ya que eran de la misma estatura y complexión delgada.
Mientras lo dejaba bañarse, lo escucho sollozar, rato después ya estaba afuera con un cambio de ropa, mientras que su uniforme de mesero estaba en la lavandería.
-Yugi...-
-A...Atem...-
-Como te llames... ¿Por qué demonios dejaste que ese bastardo te hiciera eso?-
-Yo... No tenía elección...-
-Siempre hay una elección siempre, por que demonios no hiciste algo para...-
-GRACIAS A QUE SIEMPRE VAS A FASTIDIARME EL GERENTE ME LLAMO LA ATENCIÓN, NO PUEDO DEFENDERME DE UN CLIENTE SIN QUE MI EMPLEO O MI SUELDO SE VEAN AFECTADOS, LA SEMANA PASADA SOLAMENTE COBE 800 DE LOS 2000 QUE ME CORRESPONDIAN DE PAGO... TODO POR TU CULPA!!! QUEDE AMENAZADO DE QUE SI VOLVIA A CAUSAR PROBLEMAS ME IBAN A CORRER, PERO NO PUEDO PERDER ESE MALDITO EMPLEO... Se que no te importa pero mi abuelo está muy delicado de salud, Yugi no puede con los gastos el solo... No es mucho lo que ganó pero que más puedo hacer!-Atem se dejó caer de rodillas mientras lloraba lleno de coraje e impotencia.
-Que tiene el anciano?-
-Es su marcapasos... Y aparte su salud cada vez es peor, le detectaron diabetes y la insulina no es barata...-Seto miro un momento a Atem, quien lucía realmente destrozado, salió del cuarto tras una llamada, el abuelo estaba en un hospital de mejor calidad siendo atendido por los mejores especialistas, Yugi estaba aterrado pero para su sorpresa ya todo estaba pagado.
-Ven conmigo...-
Sin mucho ánimo lo siguió.
-Apartir de ahora, trabajarás conmigo... Te daré todas las prestaciones de ley más aparte otras comodidades, tendrás un sueldo de 60.000 a la semana, solo firma este contrato de confidencialidad. Serás un empleado sin conexión con la corporación Kaiba en pocas palabras solo trabajas para mí. Harás lo que yo te pida, si te pido que te arrojes a una piscina helada lo aras... Otra ventaja es que tendrás asegurado a tu abuelo y a Yugi, esto les garantiza a ambos una atención médica con los mejores doctores y especialistas de forma "gratuita" ya que tú estarás pagando ese servicio...-
-Y que tengo que hacer?-
-Solo firma...-Atem sintio como si vendiera su alma, firmó y Seto sonrió victorioso.
Después de que firmará, Seto le dió su primer trabajo a Atem, quien avergonzado accedió, su primer trabajo consistía en ir a una sex shop y conseguir un dildo grande y realista de silicona, lubricante, una moradasa y unas esposas. El segundo trabajo fue conseguir unas luces led de color rojo, el tercero era conseguir cortinas y cobijas moradas, después consiguió una cámara de video de tripie y otra un poco más pequeña, sin saber que el solo compraría lo que Seto usaría para verlo humillado.
Seto preparo un cuarto especial en el cual uso todo lo que Yami había comprado, sin embargo no había solamente una cámara había varias.
-Planeas filmar una película porno?-
-Si... Y tú serás la estrella!-
-KAIBA YO NO...-
-Tu firmaste un contrato.-
-Si pero no voy a perder mi dignidad por...-
-Tu abuelo se recuperó no es así? Con tu sueldo como camarero lo hubieras logrado?-
-No...-Atem lloroso accedió a las peticiones de Seto, quien veía extasiado como su rival gemía y lloraba, una marea de emociones invadió a Atem, vergüenza, dolor, excitación, alivio al saber que Yugi y su abuelo estaban bien, pero el estaba perdiendo su virginidad por dinero...
Sin poder seguir siendo espectador, Seto dejo a un lado la gabardina, y tomo a Yami quien estaba amordazado con las manos esposadas en la espalda, Seto lo deboro a besos y caricias haciéndolo suyo... Dejando en video lo que había pasado en aquella ocasión... Seto tenía un nuevo fetiche, y era ver desnudo a su rival, verlo gemir y jadear cuando estaba dentro de el, y dejar su semen dentro de la entrada de Atem... Aquello se repitio una y otra y otra y otra vez, volviéndose una adicción entre ambos.
El contrato había vencido hacía ya un tiempo, pero ambos se seguían buscando para darle rienda suelta al deseo.