La Mansión Kim

Treinta y Cinco.

Abrí mis ojos un poco aturdido, me moví rápidamente en la cama asustado al no encontrar a Jin, me levanté y salí fuera hasta oír risitas del baño me acerque con cuidado notando la puerta entreabrierta, mire dentro a la JiSoo sentada junto a la tina en un pequeño banco ella estaba echando agua en la cabeza de Jin que estaba sentado en la tina haciéndolo reír, sonreí al ver la tierna imagen.

–Si el dolor es fuerte –me tense –Vienes a mí cuarto de telas así te doy un calmante

–Si está bien

–Te amo cielo

Dejando un beso en su cabeza se incorporó, rápido di algunos pasos como si recién saliera de la habitación,la mire salir y sonreí haciendo una pequeña reverencia.

–Madre buen día

–Oh JungKookie ,buen día –dio una caricia a mí mejilla –Jinnie está tomando un baño de agua caliente, tú sabrás porque

Me sonroje y baje mí mirada al suelo,  la escuché reír alto haciendo que me ponga aún más rojo que antes, volvió a dejar una palmadita en mí hombro para irse no sin antes aclarar que no debía apenarme. Tratando de calamar mis recientes nervios camine hasta la puerta del baño y entre mirándolo dar un pequeño salto del susto, le sonreí para cerrar la puerta con seguro tras de mí y colocarme junto a la tina mirándolo tiernamente..

–Buen día

–Buen día –sonrio –¿Despertaste hace mucho?

–Mmm na –rei bajito –Unos diez minutos e incluso menos , tú¿Dormiste bien? 

–De acuerdo –rio igualmente –Si yo dormí bien ,dormir a tu lado es cómodo

–¿Que quieres desayunar?

–No sé –hizo una mueca con su boca –¿Tú que quieres?

–¿Que tal si yo preparo el desayuno?

–¿Estás seguro?

–Oye –le salpique agua al verlo reírse de mí –Aprendi a cocinar gracias a ti,además no quiero que te esfuerces

–Lo se –volvio a reír –Me gusta molestarte, y aún debemos ir a la escuela quiera o no debo levantarme

–Le diré a mamá Ji que no iremos porque estás malito de tu espalda

–Tu podrías ir y copiar la tarea para ambos

–Jin –me queje –Me quiero quedar contigo

–De acuerdo pequeño caprichoso, ve yo iré a la habitación

Con una gran sonrisa lo tome en brazos cubriéndolo con una toalla, lo lleve cuidadosamente a la habitación y lo deje sentado en la silla, deje un beso en su mejilla para bajar a la cocina por su desayuno, decidí preparar algo ligero y suave para su estómago ,le prepare un rico de te hierbas y con la bandeja cuidadosamente subí. Lo mire sentadito jugando jueguitos lo que me pareció lo más tierno del mundo, me acerque a dejar la bandejita en sus piernas, me sonrió dulce para después soltar una súper risa al ver el plato con cereales de colores.

–¿Por qué te ríes? –intente hacerme el serio

–Mi Kookie –dejo las cosas en la mesita –Eres tan tan lindo

–No,no no empieces –dije dejándome abrazar

–¿Por qué no? –hizo apoyar mí cabeza en su pecho

–Porque tu solo me provocas luego no te aguantas –me acurruque bien

–Entonces ¿No debo ser lindo contigo?