Medianoche 5- Eligia

20- Puedo elegir

Beliar hablaba a Eligia y ésta sollozaba en el suelo al centro del salon circular.

-está hecho, cuando él llegue quedará atrapado aqui..  Ni siquiera el maldito de Yigal podrá envitarlo. - Beliar se río- Lorraine estará suficientemente cegada por la ira y cerrar el último el ultimo sello que aprisionara a Kaller y cuando cierre la puerta..sabes que Kaller caerá a manos de pura mujer rabiosa- su risa desquiciada sobresaltó a Mia.

-quien es yigal?- preguntó Eligia en tono quedo.

-la sombra que borrará los recuerdos de Kaller, para que en caso de que salga de aquí jamás me encuentre..el terrror que hizo el trato con él en la tierra de los sueños. -Beliar hizo una pausa.- seguro murió encantada la peliroja.

-porqué dices eso? Como sabrías eso?!- preguntó Eligia asustada.

Azbine y ella se miraron, a la brasileña le temblaba el labio y Azbine habia quedado pálida.
Escucharon la risa de Beliar.

-Yigal me mantiene informado..puedo ver lo mismo que él..

Mia se tapo la boca para ahogar un chillido y lloró pegaba a una pared, en silencio. Tras escuchar las palabras de Beliar, al escuchar el desdén en su tono y el desinterés por las personas involucradas. Todo lo que le importaba a Beliar era su conversión...y ahora Hage estaba muerta.

-Mía, matarás a Eligia a la primera oportunidad y huiras..-susurro Azbine tensa.

-no te quedes con Kaller...Azbine, no me vayas a dejar sola, me oyes?- amenazó Mia.

Azbine no dijo nada. Pero no pensaba irse de ahi hasta que no viera atado y encerrado a Kaller donde sea que lo fueran a poner o hacer.
Azbine apretó el tahali, era pesada para ser una espada comun...y de pronto pensó que matar a Kaller con su propia espada seria algo lindo. La tomó de la empuñadura y la empezó a sacar, pero no tardo en soltar un grito de dolor. Quemaba la palma de la mano, y el ardor se extendia hacia brazo, la tuvo que soltar y se miró la enrojecida mano. 

Eligia escuchó el grito de dolor y vio a Beliar sobresaltarse. Se puso de pie sin pensar y corrió por el otro tunel. El que no habían usado, ya que la brasileña y la italiana estaba llegando en uno y ellos, Beliar y ella habían llegado por otro. No podia irse, lo habia intentado, sus alas no respondían, no podia "irse"
Corrió, porque no podía soportar quedarse quieta, esperando morir. De cualquier forma entendía a Kaller, porque ella misma sólo queria ser una chica mortal, sin nada más que preocuparse que  unos exámenes y que se pondría al dia siguiente para impresionar a sus amigas.
Pero no, tenía que esperar a que la usaran, a ver como tres amigas perdían a una, a ver como un hijo de la sangre alejaba a un amigo de su lado por preferir a su amante...a no poder despedirse de su angel sin saber si lo volvería a ver.

Y un desquiciado brujo hacia planes en voz baja, murmurando y dibujando en paredes como un loco, con algo que ni siqueira parecia pintar, hacia dibujos invisibles acaso?
Corrió hasta que tropezó y se dio de bruces con algo suave.
Retrocedió de golpe y levanto la mirada.
El likan rubio la miraba sorprendido, sus ojos azules como un mar de tranquilidad le devolvieron la mirada.

-Eligia? Qué estás haciendo? Kaller esta contigo? - pregunto el likan.

-no! Me escapé del brujo, Beliar.. El hacía algo en las paredes y me llevó de lado de Kaller, no se dónde esta él!- respondió la chica rápidamente.

Silvan miro hacía atras, por el camino por el que él llegaba, Lorraine terminaba de dibujar en la pared y aun no los alcanzaba.

-Beliar le hizo algo a Kaller?- quiso saber el rubio.

Eligia tenía ojos humedos.

-si..pero pero el creo que mató a una de las cruzadas y no se que hará cuando llegue al salon! Beliar está loco! Quiere causar daño...