19. Celos.

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Entramos a un local con apariencia de restaurante. Es pequeño, con unas ocho mesas redondas y pequeñas en total. El lugar está iluminado por la claridad que entra desde afuera a través de las ventanas, y algunos ventanales que se levantan desde el piso hasta llegar al techo. Una melodía discreta y animada ambienta el lugar. Decoraciones sencillas pero bien distribuidas, y los colores vivos adornan la pequeña pero agradable y acogedora estancia . Sin mencionar el delicioso aroma gastronómico que seduce mis sentidos.

Jared me guía a una de las mesas que están vacías, y es evidente que nuestros vestuarios no son los adecuados para estar en un lugar como este.

Los dos traemos ropa de oficina, y este pequeño espacio demanda informalidad. Un atuendo cómodo e informal.

-¿Qué hacemos aquí? - pregunto tomando el asiento que él me brinda.

- Ya te lo dije, vamos a desayunar - responde con simpleza - Espérame solo un momento.

- ¿A dón...? - se marcha antes de que siquiera pueda formular la pregunta.

Lo sorprendente es ver hacia donde se dirige.

Osea, porque no es normal que vayas tras el mostrador de un restaurante, Y te abraces efusivamente con el tipo del otro lado.

Aunque haya venido varias veces a este lugar, eso es un poco demasiado.

Hablan entre ellos con sonrisas imborrables en sus rostros, desde aquí se puede ver lo animado que están, Jared se ve feliz en este momento. Esa expresión la he visto pocas veces en su hermoso rostro.

Y me gusta verlo así, pero también aumenta mi curiosidad por no saber que está pasando exactamente.

Una chica y otro chico se unen a ellos, y igual que el muchacho de antes estos dos los abrazan y sonríen como si se conocieran de toda la vida.

Lo que pensándolo mejor puede ser posible. ¿Cierto?.

Miro a mi alrededor y las pocas personas que hay miran la escenas de esos revoltosos con casarse sonrientes.

E incluso empiezan a murmurar cosas que me hacen poner toda mi atención en sus conversaciones «privadas».

- Es bueno que sigan siendo tan cercanos como siempre.

- Creí que las cosas se enfriarían con el tiempo.

¿Tan cercanos cómo siempre?

¿Enfriar con el tiempo?

¿Eso quiere decir que se conocen desde hace mucho tiempo?

- Ella es la única...

¿Ella?

¿Quién es ella?

Demasiadas preguntas, y Jared no está para darme las respuestas.

-¡Jared Kinsley! - volteo inmediatamente como si de llamar mi nombre se tratara - ¡Eres un hipócrita desvergonzado! - grita una chica de pelo negro, alta con tez clara y muy hermosa apariencia.

¿Quién es ella...?

Y justo al hacerme la pregunta, llega a mi cabeza una posible respuesta.

¿Podría ser...ella?

Volteo a ver a Jared con un ligero dolor en el pecho.

Dolor que aumenta al ver como su cara de sorpresa pasa a ser una de sastifaccion por la presencia de la chica.

- ¿Jira? - pregunta la castaña que había estado conversando con Jared desde hace un rato, osea que la conoce. Y muy bien, ya que corre para abrazarla dando gritos de alegría.

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