缘分 | ÉPERDUMENT AMOUREUX || TANTAI JIN [𝐒𝐏𝐀𝐍𝐈𝐒𝐇 𝐕𝐄𝐑.]

𝐂𝐡𝐚𝐩𝐢𝐭𝐫𝐞 𝟐𝟒

Cang Jiumin sintió como Yuexing trataba de apartarse al principio, pero al final acabó simplemente llorando entre sus brazos mientras le propinaba suaves golpes.

— ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? —preguntaba una y otra vez.

— Porque eres la única capaz de derretir un corazón que ni siquiera debería existir, de hacer sentir a alguien emociones que no debería tener y de controlar a alguien que está destinado a hacer el mal para hacer el bien —contestó besando su cabeza.

— Mientes.

— No lo hago. Si lo hago, el cielo puede castigarme —murmuró—. Mírame, mírame y verás que no miento —pidió separándose un poco.

Yuexing no se movía hasta momentos después, ojos aún soltando lágrimas.

— No te creo, no te creo ni un poco —murmuró apoyando la frente en su hombro.

Quería ser capaz de decir eso de verdad, pero en el fondo no podía impedir volver a caer por él. ¿Era esto a lo que los humanos se referían cuando decían que el diablo era un ser seductor al que uno no podía decir que no?

— No te creo ni un poco, Cang Jiumin —murmuró pero aún así su cuerpo se movió solo en busca de sus labios.

Besando al diablo, cometiendo un pecado. Defraudando a su maestra una vez más.

— Te estoy dando mi corazón otra vez, ¿vas a volver a romperlo? —preguntó entre besos.

— Jamás, lo atesoraré por siempre. No soy el Dios Diablo, no soy Ming Ye, ya no soy Tantai Jin. Soy Cang Jiumin y jamás me atrevería a hacerte sufrir —juró haciendo que las dudas en Yuexing se esfumaran una vez más.

— Sigo sin creerte —murmuró aunque en realidad sí lo hacía.

— Puedo esperar siglos hasta que lo hagas —respondió antes de que Yuexing volviera a buscar sus labios como si se tratara de una droga.

Y era sin duda una droga, una tan dulce y suave que no quería dejar de saborear ni por un instante, pero debía hacerlo si quería saber.

— Si me das tu corazón, eso significa que… —comenzó a decir esperando que ella completara sus palabras.

— Significa —comenzó a decir soltando un suspiro inevitable mientras lo miraba con sus ojos aún enrojecidos por las lágrimas— que te daré una oportunidad, Cang Jiumin. Tan sólo... no rompas mi corazón como ellos, prefiero que mi maestra vuelva a castigarme que sentir esta opresión en mi pecho que no importa cuantos años pasen, continúa ahí como si fuese el primer día.

— Jamás —murmuró tomando sus labios nuevamente—, haré que olvides ese dolor. Haré que recuerdes los momentos felices a su lado con cariño y dejes atrás todo y puedas ser feliz a mi lado. No importa si no recuerdas tu vida como Ye Jinglei, todavía eres la persona que tiene mi corazón y puede hacer lo que quiera con él. Incluso si quieres romperlo para que sienta lo que ellos te hicieron sentir, puedo soportarlo.