IV - Molly

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Esther había salido de la habitación y se reunió con sus amigos nuevamente. Entre ellos, hubo una discusión.

- ¡Molly! ¡Anoche pusiste la caja musical de Arthur en la cocina y me metiste en un problema!.- Dijo Esther con una mirada de frustración. Temía que lo que ella dijo fuera cierto, pero no fue así. Molly, enojada de que le hecharan la culpa por algo que no hizo, le respondió gritando.

- ¿¡Qué?! ¡Esa no fui yo! ¿¡Para qué me acercaría a Arthur, cuando yo estaba con Cheng!?- Gritó y se le veía bastante molesta. Pero se calmó al escuchar a Isaac, quien le preguntó.

- ¿Estás segura que no estabas sonámbula?- Preguntó Isaac con preocupación, pensaba que Esther dejó la caja musical en la cocina. Pero logró notar unas marcas en su brazo, dándose cuenta que eran un apretón bastante fuerte. Él preguntó nuevamente el apretón del brazo.- Esther ¿Qué te pasó en el brazo? ¿Fue Arthur? ¿Él te agarró tan fuerte? Que extraño.- Su rostro preocupabas a Esther, parecía que ella les estaba escondiendo algo y estaban dispuesto a saberlo. Esther miró su brazo y se dio cuenta, ese apretón se sintió muy real, pero ella tiene que detener a este muchacho y tiene que hacerlo ya.

Pero Esther ignoró a Isaac y le gritó a Molly nuevamente sobre su carácter.

- Si intentaras dejar de ser una princesa y actuaras como una buena persona, nos agradarías a todos.- Dijo de una forma bastante seria, pero sus amigos no dijeron nada. Molly se enojó con Esther por llamarla de esa forma, refunfuñó y se fue del lugar. Isaac y Esther se miraron el uno al otro, Isaac decidió romper el hielo.

- Deberías ir a disculparte.- Dijo preocupado por su amiga, se le notaba la preocupación y no quería que sus dos amigas siguieran peleando. Esther miró a otra parte y su mirada cambió de ira a tristeza. Ella decidió ir a disculparse con Molly.

Una vez que empezó a buscar a Molly, pensó en ir a buscarla en la biblioteca. Esther corrió a las escaleras y bajó, realmente le preocupaba su amiga. Por eso, preguntándose a dónde fue, pensó.

- Molly ¿A dónde fuiste?- No sabía en donde más buscar pero pensó en la biblioteca y creyó que es su única opción. Y así fue, pero antes de entrar, Arthur apareció nuevamente atrás de ella y agarrándole el estómago una vez más, la miró los ojos y le dijo.

- ¡Hola, Esther! ¿Buscas a tu amiga Molly? Puedo ayudarte si quieres.- Dijo amablemente hacia Esther y le propuso ayudarla en buscar a Molly. Pero Esther le preguntó.

- Está bien... Puedes ayudarme.- Dijo Esther mientras resoplaba por la preocupación. Pero Arthur le respondió.

- ¡El pago es de una beso! Como aceptaste mi ayuda, necesito que me pagues.- Dijo el pálido contento de por fin lograr que la chica de la que está enamorado le vaya a dar un beso, pero Esther sólo lo miró con rabia y le dio un beso en la mejilla.

- Ahí tienes tu beso.

Arthur, no estaba satisfecho y negó ese beso.- No, así no, bonita. Así.- Una vez que dijo eso, Arthur besó a Esther en sus labios, pero parece que la estaba forzando a besarlo, ya que su rostro se enrojeció por completo de la vergüenza, pero ella sólo lo apartó y le dio una cachetada. Parece que no le gustó.

- ¿¡Qué te pasa?! ¿Estás loco o qué? Maldito asqueroso. Eres un enfermo.- Dijo Esther mientras se adentraba a la biblioteca. Arthur tenía más marcas de cachetadas que de una beso. Arthur estaba enojado y furioso por cómo actuó Esther. Arthur sólo agarró su mano y la siguió. Él se disculpó por su actitud.

- Mira, Esther. Lo siento, ¿si? Te ayudaré, pero, no me cuelvas a cachetear, ¿Si?.- Dijo Arthur preocupado y con vergüenza. Él tenía miedo de que Esther reaccionara de esa manera y más cuando él la quiere tanto. Una vez que entraron a la biblioteca, Esther vio un compañero del cuarto, Billy. Ella corrió hacia él y le preguntó.

- ¡Hey, Billy! ¿Sabes dónde está Molly?- Dijo Esther preocupada, se preguntó a sí misma si él sabía donde podría estar Molly. Pero parece que ella se equivocó o tal vez no.

- Mm... Puedo decirte donde está si me traes mi pelota del almacén. Miss Beverly la confiscó.- Dijo Billy, con astucia, ofreciendole buscar su pelota a cambia de ayuda. Esther se enojó con él.

- ¿Hablas en serio? ¡No tenemos permitido entrar a ese área!- Dijo Esther, no creyó que Billy la mandaría a ese área del orfanato. Pero Billy entonces le dijo.

- Bien, entomces no querrás que te diga donde se encuentra Molly.- Dijo entre risas. Pero Esther aceptó el reto de su compañero, pero en su lugar, Arthur se ofreció ir a buscarla.

- ¡No te preocupes, Esther! ¡Yo la buscaré por ti!- Dijo Arthur con una sonrisa de oreja a oreja. Luego de decir eso, corrió hacia el área que no tenían permitido ir. Entonces Billy habló.

- Se va a tomar su tiempo, créeme.- Sus palabras duraron poco, ya que Arthur regresó en un abrir y cerrar de ojos. Este tenía una sonrisa, mientras Esther y Billy estaban boquiabiertos.

- ¡Mira, Billy! ¡Aquí está tu pelota!- Dijo Arthur emocionado, se notaba su felicidad. Ellos seguían preguntándose como lo logró.

- ¿Cómo lo has hecho? ¡Hay matronas allí!- Dijeron los dos a la vez, se veían preocupados por cómo llego en un par de segundos.

- Bueno, tengo mi agilidad, pero también tuve cuidado con ellas. Se veían peligrosas si me atrapaban.- Arthur le dio la pelota a Billy y Esther le preguntó.

- ¿Puedes decirnos dónde se encuentra Molly?- Dijo con una tono de preocupación en su voz, se veía la desesperación en sus ojos. Pero Arthur estaba demasiado tranquilo, lo cual alarmó a Esther.

- Bueno, en realidad no lo sé con certeza...

Esther gritó enojada.

- ¡¿Qué?!

La respuesta de Billy fue algo dudosa pero un poco creyente.

- ¡Pero conociendo a Molly, debió haberse ido a una de la habitaciones del segundo piso, en el ala este!- Dijo Billy ansioso y asustado de que Esther le fuera a hacer algo. Ella sólo agarró la mano de Arthur y le replicó.

- Gracias, Supongo... Vamos, Arthur. Tenemos una búsqueda pendiente que hacer.- Dijo Esther angustiada, pero enojada. No le gustó para nada la respuesta. Una vez que salieron de la biblioteca, decidieron subir las escaleras y seguir buscando a Molly. Al llegar a la habitación entraron y encontraron a su amiga, Cheng, y estaba leyendo un libro sola. Esther le preguntó que hacía aquí sola.

- ¿Cheng? ¿Qué estás haciendo aquí tú sola?- Preguntó preocupada de Molly aún, pero Cheng estaba muy concentrada en la lectura que no le prestó atención. Esther sólo se despidió y se fue con Arthur- Bueno, Adiós, Cheng.-

Una vez que salieron de la habitación, fueron a buscar a Isaac, pero se encontraron a Dee en el camino, una compañera más del cuarto. Esther se acercó a ella y le preguntó.

- Hay Dee, ¿Has visto a...- Esther no pudo terminar, ya que Dee empezó a hablar.

- ¿Escuchas los susurros? El mal anda entre las paredes, ¡algo anda entre nosotros!- Dijo Dee paranoica por sus propias palabras. Pero Esther no dijo nada, sólo se alarmó más. Arthur miró a las dos y seguía en su estado tranquilo.

Cuando se alejaron un poco de Dee, siguieron buscando a Isaac, cuando llegaron al punto de encuentro, no estaba. Esther le dijo a Arthur.

- Ahora Isaac ha desaparecido. ¿No te parece extraño, Arthur?- Preguntó Esther, preocupada de que sus amigos han desaparecido de repente. Arthur no dijo nada más que una sola cosa.

- No lo sé, Esther... ¿Sabes qué? Mejor vámonos a dormir, Esther.- Respondió Arthur, sabía lo que había pasado y le había agradecido a sus amigos. Por fin tendría tiempo a solas con Esther...
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Nota: ¡Nuevo capítulo! Espero lo estén disfrutando. Me alegren sus opiniones sobre los capítulos. Lo que me importa de ustedes es su amistad, sus opiniones y ayuda! Y por cierto.

¿Les va gustando como va yendo la trama de la historia?

Atte.:
           ~4ndy_4ppl3

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