Famous ─── Riverduccion

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Pov Samantha

Me encontraba en el concierto de uno de los artistas favoritos de mis amigos: José Francisco Félix, no se el porque de la obsesión con ese chico, si es guapo, pero no es la gran cosa. Sus canciones si eran bastante pegajosas, increíbles diría yo, cantaba muy lindo.

Sebastian, al cual le apodamos "Roier" es alguien muy cercano a él, lo poco que se de esa amistad es que ellos se conocieron en la universidad y desde ahí son amigos. Gracias a él logramos estar en este concierto, Félix le regaló entradas y pues él nos invitó.

Disfrute del concierto y cuando este finalizó todos nos ibamos a dirigir a un restaurante para cenar, pero Sebastián dijo que esperemos un rato, ya que iba a llegar una persona más.

Esperamos por un buen rato en el carro, yo me encontraba en la parte trasera de este sola, el asiento tenía espacio para dos personas más, pero los demás ya habían elegido sus asientos, además así ponía sentarme lo más cómoda posible, podía acostarme, estirar mis piernas, ocupar todo el asiento, de todo, así que no me ponía mal estar sola.

Vi que Sebastián llegó junto a este curioso personaje y le dijo que se siente atrás, ya que era el único lugar vacío. Escuche la voz del chico asentir y subir a mi lado, estaba en mi celular cuando sentí un peso más al lado mio, no le tome importancia y seguí viendo fotos en instagram.

Sentí una mano tocar mi hombro y di la vuelta rápidamente, fue cuando lo vi de cerca, era el cantante Félix, me sorprendi y él sonrió.

- Mucho gusto - grito estirando su mano.

- Mucho gusto.. - dije tomando su mano

- ¿Cuál es tu nombre?

- Samantha.

- Mucho gusto Samantha, yo soy Félix.

- Sí.. Si te conozco.

- Me alegra. Y.. ¿Cómo estás?

- Bien, ¿tu?

- Un poco cansado, pero bien.

- Pero.. Puedes descansar, el restaurante aún es lejos, deberías aprovechar para dormir.

- Esta bien.. Me despiertas cuando lleguemos, por favor.

- Esta bien , no te preocupes, tu descansa.

- Gracias..

Félix se acomodó un poco y cerró sus ojos. Lo vi y de verdad sí era muy apuesto, se veía muy bien durmiendo. Deje de verlo y volvi a ver mi celular. En un momento el carro dio una fuerte vuelta y Félix cayó a mi, estaba totalmente dormido, así que no iba a despertarlo, él se acomodó en mis piernas, mis mejillas ardían por tal contacto, pero no hice nada al respecto. 

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Después de una hora llegamos al restaurante y teníamos que bajar, a pesar de que no quería despertarlo debía hacerlo, así que empece a tocar suavemente su cabello.

- Félix.. Debes despertar, ya llegamos.

Sentí como empezó a moverse y lo vi abrir sus ojos, él me vio sorprendido y se levantó rápidamente de mis piernas.

- ¿Dormi en tus piernas?

- Hemm.. Sí.

- Disculpa, de verdad, no fue mi intención.