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15. olvida lo que nos hizo daño.

Enzo

Vi como la rubia negaba reiteradas veces con la cabeza mientras hacía fuerza con sus piernas para quedarse estática en el lugar.

—Dale Grecia, no podes estar más tiempo sin verlos, son tus amigos también y están preocupados—expliqué acercándome a ella para agarrarla de la mano y tironear de esta.

—No es por todos En, es porque no tengo ganas de ver a Matias—declaró la ojiverde sacando todo el aire de sus pulmones.

Sonreí al escuchar el diminutivo de mi nombre, estos últimos días se le había hecho costumbre decirme así y a mi me encantaba, ya que era la primera vez que alguien me decía así.

—Un rato aunque sea—pedí provocando que ella resoplara y terminara aceptando. Me acerqué hasta la puerta para tocar el timbre y escondí a la rubia detrás mío, no tardó mucho en abrirse la puerta dándome como campo de visión a Kuku con el mate en la mano,—Les traje una sorpresa.

Di un paso hacia la derecha dejando ver a Grecia, el pecoso se acercó a ella sin dudarlo dos veces y la abrazó con toda la fuerza y el amor del mundo.

Todos la querían muchísimo, me incluía.
Grecia se hacía querer muy rápido.

No me equivoqué cuando le dije que tenía mucha suerte de haberla conocido y que era una chica súper especial para mí.

Desde el día que la conocí me transmitió muchas cosas lindas y no quería decir que había sentido mariposas en la panza porque básicamente había sentido el zoológico entero.

Tenía un conocimiento previo de cómo era ella gracias a lo que me habían contado los chicos, además de que Matías me había incluso amenazado con que tenía que seguirla en Instagram antes de conocerla para ver qué a lo que me enfrentaba el día de la bienvenida, sumándole que el castaño hizo de las suyas para que al día siguiente de conocer a Grecia me juntara con ella para ir a desayunar.

Estos últimos días, en los que prácticamente estábamos juntos desde las ocho de la mañana hasta las once de la noche, había terminado de confirmar que ella era una de la mejores personas que había conocido en mi vida y que quería seguir disfrutándola todo el tiempo que ella me permitiese.

En pocas palabras; Grecia me gustaba y muchísimo.

—¡Por fin loquita pensé que te había tragado la tierra o este!—exclamo señalándome a mi haciéndola reír, se hizo a un costado para que pudiéramos pasar y antes de que yo pudiera hacerlo, el levantó la mano para que hicieron el típico saludo de hombres,—Gracias por traerla.

Le regalé una sonrisa y pasé.

Esteban nos había invitado a todos los del grupo y a Juan Caruso, quien a veces venía a alguna que otra juntada para comer unas pizzas caseras que había preparado su mamá.

—¡Viniste Colo hermosa!—anunció Pipe mientras se levantaba y se acercaba a ella para darle un abrazo como los de siempre.

Todos la recibieron de igual manera o incluso mejor.

—¿Matías?—me animé a preguntarle a Agustín que era el que más cerca estaba, ya que todos los demás estaban hablando con Grecia.

—Se la agarró con todos nosotros porque saltamos a defenderla a Grecia y se fue del grupo—argumentó el ojiverde haciendo que su respuesta me asombrara,—Que se arregle Enzo, ya es bastante grandecito para tener esos comportamientos de pendejo, ni Pipe y Blas se animaron a tanto.

Después de un rato charlando, empezamos a comer las pizzas había de todo tipo; cebolla con queso, de salchichas, jamón queso y huevo duro hasta de ananá.

—¿Cómo te podes comer eso Grecia? Es un asco—comentó Blas mientras arrugaba la cara al ver la pizza que se estaba comiendo la rubia,—Como se nota que sos la favorita de todos que te hacen esa pizza rancia siempre.

—Y bueno, algunos nacen estrellas y otros estrellados—contestó con egocentrismo la ojiverde sacándole la lengua para mostrarle la comida—Aparte ¿Qué te quejas de que yo coma pizza con ananá? si vos cada vez que vas al Mc, te comes las papas fritas con el helado, querido.

—No amigo, que asco.

—Bueno rubia, ¿vas a contar que te pasó que desapareciste una semana? O sea, sabemos que es por Matías pero queremos saber qué pasó; porque se bardearon y por qué no ví ninguna trompada por tu parte—manifestó Pipe al ver que estaban hablando de pelotudeces, el más grande que ningún quería saber qué es lo que realmente había pasado.

Grecia alzó la vista buscándome para hacer contacto visual, yo asentí con una sonrisa para animarla a que le contara a los chicos todo con lujo de detalles como lo había hecho conmigo hacía cuatro días atrás.

La rubia se acomodó en su sitio y dejó el trozo de pizza que estaba a medio terminar sobre su servilleta porque sabía que no iba a poner comer nada hasta que no acabara de contar toda la secuencia.

No le importaba que estuviera Juan Caruso porque sabía que si estaba ahí era porque los chicos le tenían mucha confianza, además de que lo que se hablara esa noche ahí, ahí se iba a quedar.

Cómo era de esperarse todos se quedaron totalmente callados cuando Grecia empezó a contar la historia desde el principio, la cara de todos era un cuadro; algunos no paraban de comer mientras que otros habían dejando todo para prestarle toda la atención del mundo.

—Ah bueno, tranqui la historia—concluyó Kuku sarcásticamente—No, pero ahora posta, Matías es un pelotudo, ¿Como te va decir esas cosas solo habiendo escuchando una campana?

Grecia se encogió de hombros e hizo una mueca.

—O sea, ¿es torta entonces?—cuestiono Pipe un poco confundido después de unos minutos haciéndonos reír a todos.

—Tira para los dos bandos salamín, no escuchaste que se quiso garchar al padre de Grecia y esta de novia con Matías—acotó el nuevo integrante el grupo mientras le daba toquecitos en la cabeza,—Yo si fuera Mati estaría cagado hasta las patas, ¿Imagínate que tu novia te hace cornudo con una mina? me corto los huevos.

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holissss, yo se que el drama de malena es muuuuy flashero pero cabe la posibilidad de que hayan pasado alguna vez en la vida real ahre (?) es muy extremista obvio pero bueno dybalayeta no es dybalayeta sin del drama tmb soy leonina chicxs sepan entenderrrrr jajajajs

kilig ; enzo vogrincic Donde viven las historias. Descúbrelo ahora