11.

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Sanzu me texteo que no va a llegar temprano ya que Mikey lo mando a una misión con los Haitani. Maldita sea, con el que menos lo quiero es con ellos dos. Ellos dos son raros, y me pueden llevar a Haru a un camino raro.

Comienzo a cocinar para cuando venga Haruchiyo, no soy buen cocinero pero intento lo mejor. Además en unos pocos días será el cumpleaños de Haruchiyo y no sé qué regalarle o que hacer por su cumpleaños 17.

Hago curry y la puerta suena, Sanzu se quita la mascarilla u la tira en el sillón, su pelo rubio está hecho un desastre al igual que su cara, su ropas llenas de lodo y sangre. Me acerco preocupado verificando su cara, el agarra mis manos y niega con la cabeza.

-Fue un empujón-dice-la sangre no es mía-dice-voy a tomar un baño.

-Por favor, ten más cuidado para la próxima-digo mirándo su espalda camino al baño el asiente y continúa su camino.

Comienzo a servir el agua y a poner la mesa, escucho la bañera sonar y después nada, así que asumo que esta duchando. Comienzo a preparar la comida en los platos y a ponerlas y justamente en esos momentos Sanzu sale del baño y me sonríe. Con una toalla se limpia y seca su cabello, beso su frente y se sienta.

Comemos en silencio mientras el mira al frente, no se que estará mirando pero mueve la cabeza de lado a lado. El termina su comida y agradece por ella.

-Estaba deliciosa-dice

-Gracias, no soy bien cocinero pero lo intento.-le respondo a lo que él me sonríe.

El se levanta para lavar los trastes y yo recojo la mesa, me acerco a él mientras lava y lo agarro por su cintura y lo acerco a mi, el se queda estático en mis brazos pero continúa el trabajo que hacía. Beso su nuca y pongo mi barbilla en su cabeza.

-¿Sucede algo?-pregunta

-No, solo quiero abrazar a mi novio-digo.Sanzu mira a los platos pero puedo creer que vi un sonrojo. El simplemente asiente mientras sigue lavando los trastes, termina, se seca sus manos y se gira. Poso mis labios en sus labios, un beso que dura hasta que nos quedamos sin aire.-¿bailamos?-preguntó y extiendo mi mano

-¿Sin músicos?-pregunta

-Si-digo-acapella.Lo agarro por su cintura y el pone sus manos en mis manos y la otra en mi hombro. Comenzamos a movernos de lado a lado.-Quiero que esto dure para siempre.-le digo

Sus ojos se abren a más no poder mientras piensa algo y se queda en silencio, luego asiente y pone su cabeza en mi pecho. No quiero cambiar este momento por nada, este momento de paz y tranquilidad.

-Yo también-susurra

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