SR JEON #2 +21

11- Chloé Stitch

El término "barrio peligroso" quedaba pequeño delante de lo que realmente era.

Era un lugar decadente, la pobreza abundaba, habian personas mayores en el piso, completamente sucios y pidiendo dinero a cada persona que pasara delante de ellos, llegar a un lugar así hizo que las personas que rondaban por ahí, mostraran su atención en nosotros.

Quizás con curiosidad, quizás con sorpresa e incluso podía ver cierto desconcierto en sus miradas.

Era una triste realidad que vivían las personas hoy en día, lamentablemente hay personas que llevan la vida de una manera miserable en la cabeza ¿Cómo ayudas a alguien que no quiere ser ayudado? ¿Cómo le haces ver qué la vida que llevan está mal cuando ellos están conformes con tal vida?

Esas personas no tienen solución.

El investigador caminaba seguro hasta una puerta de madera deteriorada, el lugar estába carente de pintura y bastante deteriorado, como si estuviera viniéndose abajo.

Vi como el tocaba la puerta y unos minutos después una voz aguda y aniñada se escuchó detrás de ella.

- ¿Señor Lee?

El detective Taemin se hizo a un lado dejándome ver aquella maraña de cabellos rubios, enredados y alborotados, como si hace mucho no lo lavara, sus ojos eran azules y su cara delgada, demasiado delgada.

Mis ojos se abrieron, mire al detective y este asintió.

Así que volví a poner la atención en aquella niña.

- Te dije que te ayudaría a cambio de algo ¿Lo recuerdas?- Le preguntó el detective, ella me miro y asintió abriendo la puerta, dejándome ver su cuerpo.

Su estatura quizas no pasaba de 1.50, era demasiado delgada, su barriga de embarazo no era tan grande para el tiempo se supone debía tener.

Eso me hizo sentir un fuerte escalofrío.

Tragué grueso y avance, ella bajaba su cabeza con vergüenza constante.

El lugar por dentro era peor de lo que creía, era un pequeño anexo, tenía un colchón en el suelo lleno de mantas sucias, una pequeña cocina electrica en una esquina y sillas de madera en otra.

¿Como una niña de quince años podía estar lejos de sus padres viviendo en una situación tan precaria?

- Lamento no recibirlos de una mejor manera y no tener nada que ofrecerles, por ahora solo tengo algunas sopas instantáneas y agua que la señora Somi me trae.- Jugaba con sus manos avergonzada y yo sentí morir.

Si mi hijo se fuera de mi lado, enloqueceria.

- No te preocupes Chloé, vinimos a otra cosa.

Ella asintió guiandonos a las sillas en una esquina.

- Te presento con el señor Jeon, el es quien está interesado en la información que tengas que darle.-Ella hizo una reverencia y se presentó.

- Yo...Bueno...Como ve no soy de aquí, mi familia vive en Estados Unidos.

- ¿Cómo llegaste aquí Chloé?- pregunte con interés.

- Con engaños.- Ella suspiró y se enderezó para continuar hablando.- La señorita Kim Jennie era una amiga de mi madre, ambas asistían a un club de lectura e incluso compartían tardes de té y meriendas en mi casa, siempre note que la señorita me miraba demasiado y me sonreía, siempre le decía a mi madre que yo era hermosa y que era suertuda por tener una hija como yo.

Sus ojos se cristalizaban a medida que hablaba y mi corazón agitado me hacía entender que no saldría nada bueno de todo esto.

- Mi madre murió.- Cerré los ojos como si aquello hubiera golpeado fuerte mi corazón.- Un día solo nos dieron la noticia que mi madre había sido asesinada mientras intentaban asaltarla.- Las lágrimas caían por sus ojos mientras ella sorbia sus mocos y apretaba sus manos en el vestido que llevaba.- Desde ahí todo fue en picada, mi padre cayó en depresión, se hundió en el alcohol y el negocio familiar casi quedaba en la quiebra, para mi padre el que la señorita Jennie le ofreciera una ayuda económica para levantar el negocio familiar fue como un regalo del cielo, lamentablemente sus intenciones nunca fueron ayudar, no se cómo, pero logro convencer a mi padre de que lo mejor era que ella me cuidara por un tiempo ya que el estaba deprimido y debía levantar el negocio familiar, mi padre acepto sin saber lo que realmente estaba haciendo, a pasado un año y algunos meses, esa mujer he hizo pasar por muchas cosas , me metió en un mundo retorcido y oscuro de sexo, me hizo su sumisa, abuso de mi, me hizo jugar de maneras que no me gustaban y disfrutaba metiendo sus dedos dentro de mi y que otros hombres me tomaran.

Mi estómago se retorció ante aquella información, era algo sucio y banal, era una mierda de persona.

- Fue entonces cuando la escuché decir que había alguien que fue un mal agradecido con ella y había llegado el momento de hacerlo ver quién tenía en control.

Mi corazón se agitó, como si estuviera a punto de escuchar algo que no quería, en el fondo lo sabía.

- Entonces me trajo aquí, fue aquí donde mis síntomas empezaron y después de una prueba se confirmó que yo estaba embarazada, ella se enojo y empezó a golpear cosas, me dijo que iba a matarme y mataría a el bebé dentro de mi, en ese momento dónde ella perdió el control yo pude huir, corrí con todas mis fuerzas sabiendo que nadie me iba a perseguir porque sus hombres no estaban en el perímetro, corrí tanto que no supe dónde pare y mi cuerpo perdió fuerza, entonces me desmaye y cuando desperté ya estaba aquí, la señora Somi me había traído con ella.

Asentí tragando grueso ante aquella información.

- Chloé dime algo - Ella me miro y asintió.- ¿La persona a la que ella vino a buscar se llama Jeon Jungkook?

Ella puso su dedo en su barbilla y miro hacia arriba, como si estuviera pensando.

- Jungkookie, recuerdo que lo llamo así, Jungkookie.

Apreté mi mandíbula con fuerza y mire al detective que escribía el caso en una hoja.

- ¡Oh! - Rápidamente voltee a mirar a la chiquilla que se había sobresaltado con una leve expresión de dolor.

- ¿Qué? ¿Qué sucede?

- Se mueve, duele cuando se mueve.

Dirigí mi mirada hacia el vientre abultado,mirando las ondas que el bebé hacia al moverse, aún que...

Parecía demasiado, como si moviera todo su cuerpo al mismo tiempo ¿Era eso posible?

- ¿Has ido a un médico? - Pregunté sin dejar de mirar los movimientos extraños en aquel vientre.

- No... A penas puedo alimentarme y no puedo salir, no sé cuando ella pueda parecer y quiera matarme.

Asentí y la miré.

- ¿Regresaras a casa con el bebé? ¿Cómo crees que reaccione tu padre?

Ella bajo la cabeza con vergüenza.

- Yo...L daré en adopción.- Abrí mis ojos con sorpresa.- No puedo quedarmelo, no tengo nada que ofrecerle, a penas tengo quince años y no me he graduado de la escuela ¿Qué ejemplo podría darle? Prefiero que una familia que si pueda cuidar de el, lo adopte.

Asentí porque aquello tenía sentido, aún así no podía evitar sentir como mi corazón palpitaba con fuerza.

- Mira, se que no sabes nada de mi y quizás desconfíes, pero ¿Me dejas ayudarte?- Ella levantó su cabeza y me miro con asombro al igual que el detective a mi lado.

- ¿Cómo haría eso?

- Empezaremos por buscar un lugar nuevo para que vivas, me encargare de la comida e incluso de que seas revisada por un médico.

- ¿Que quiere a cambio?

Tragué grueso y mire su vientre.

- Quiero al bebé...