Marcos
Por supuesto, Alex y mi papá no estaban muy contentos con las decisiones de Melissa, especialmente Alex, a quien no le gustó ni un poco ser desplazado.
- ¿Cómo puede confiar en él después de todo lo que ha pasado? ¿Y dejarás que se quede así? ¿Y qué hay de Ana?
- Tienes que convencer a Melissa para que presente cargos, hijo mío, esto no se puede quedar así, ¿y si todo esto es parte de sus planes? ¿Ganar su confianza y luego hacer algo peor? - Mi papá disparó la advertencia tan pronto como Alex cerró la boca.
Ambos me bombardearon con preguntas, pero yo estaba demasiado feliz como para enfadarme con nada, ella me perdonó, yo casi no podía perdonarme, pero ella lo hizo y lo hizo sin pensarlo dos veces, me imagino lo difícil que es para ella, ya que tiene una historia de vida tan complicada.
Tuve problemas con una mujer, pero no se comparan con los que ella tenía dentro de su propia casa, con su propia familia.
Después de encontrar a Ana con Rafael, imaginé que nunca más me volvería a enamorar, ya no creía en el amor, para mí se había convertido en un sentimiento que solo servía para manipularnos, y decidí que me mantendría alejado de eso. Tonterías, ni siquiera había conocido el amor todavía, ni siquiera había entendido su significado y la intensidad que lo acompaña.
He tenido el amor de un padre y una madre, eso es innegable, pero el amor de una mujer, solo lo he conocido junto a Melissa.
Desde que me uní al ejército, me he vuelto menos sentimental, actuando solo por la razón, todo ese entrenamiento, controlando las emociones, todo me hizo actuar como un robot y durante tantos años, eso funcionó bien para mí.
Realmente pensé que eso sería suficiente para mí, vivir solo con mis personas más cercanas, sin relaciones románticas, incluso tuve el ejemplo de Alex, él tampoco tuvo una buena experiencia en el amor...
Pero eso fue hasta que Melissa llegó a mi vida, ¿cómo alguien tan pequeña y sensible puede cambiar tanto a una persona?
Y fue cuando realmente vi su historia, que me di cuenta de que yo me estaba quejando con la barriga llena...
Llegó lentamente, ocupando un espacio que por mucho tiempo había estado vació e inhabitable, llenando de luz y color un mundo completamente gris, al principio daba miedo, pero después de un tiempo, lo asustador era imaginar que ella pudiera dejarme... Yo no tenía la costumbre de compartir mis pensamientos, siempre tomaba mis decisiones solo, aprendí a conversar y compartir solo cuando ella llegó, cometí muchos errores y me alegro de que los perdonara.
Nunca imaginé que podría ser así, actuar impulsivamente, no pensar con claridad, pero cuando se trata de Melissa las cosas simplemente toman un giro que me vuelve loco y me impide pensar, creo que si me detengo a pensar, debe significar que la amo, al principio todo era cuestión de pensar, todo en base a un contrato, y hasta ahí yo estaba usando la cabeza, la razón y eso fue lo último que hice razonando... de ahí en adelante, ¡todo fue seguir la corriente!
Pero me gusta... por mas desesperante que es no poder pensar con claridad, y aunque casi me quita toda la cordura desde el principio, si usara la razón, tal vez no sería amor...
- Hola, ¿Me estás escuchando? - Alex está gesticulando frente a mí, mientras yo estaba en otro lugar. - ¿Estás seguro de eso?
- Sí, Melissa confía en él y yo aprenderé a confiar en él, después de tener una conversación los dos.
Le pedí a Fernández que viniera a la empresa cuando Melissa le diera un respiro, cuando la dejó en casa él vino, Alex insistió en estar cerca.
La conversación no fue de lo más agradable. Principalmente porque Alex estaba profundamente ofendido por no haberlo descubierto antes.
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El bebé del billonario [TERMINADA]
RomanceMelissa es una joven dulce e ingenua que lleva años enamorada de Rafael, los dos estaban apunto de casarse cuando ella encuentra a su prometido y a su hermana Sarah en la cama el dia de su boda. Tiene una noche caliente con un desconocido para inten...