❧ IV. 4

126 19 16
                                    

Minseok se quedó un rato más en la oficina del mayor, sumergiéndose en la conversación sobre las víctimas. Si bien no obtuvo detalles específicos, la información que compartió el otro le ayudó a entender mejor el entorno en el que las víctimas se movían. Minseok se enteró que, en general, las tres personas asesinadas eran consideradas buenas personas y eran queridas por la comunidad estudiantil.

Entre risas y bromas, Minseok y Minhyung se desviaron del tema principal y exploraron sus experiencias en la universidad, descubriendo más detalles sobre las personas que los rodeaban. La tensión inicial que rodeaba la confesión de Minseok se desvaneció, y la conversación fluyó naturalmente entre ellos. Se burlaron amistosamente de sus compañeros de clase, compartieron historias divertidas y se sumergieron en un ambiente cómodo que sugería una nueva etapa en su relación.

Mientras Minhyung terminaba de ordenar algunos papeles en su escritorio, Minseok se topó con una libreta que yacía al borde del mismo. Mientras bromeaban sobre la posibilidad de que la libreta guardara secretos oscuros, el menor, en un gesto juguetón, intentó arrebatársela a Minhyung.

Minhyung rió, apartándola levemente como si quisiera mantenerla lejos de las garras curiosas del menor. La libreta parecía tener un aspecto personal, con una cubierta gastada de color rojo y algunas páginas dobladas. 

—¿Qué tienes ahí, Minhyung? ¿Acaso es tu diario secreto? 

—¿Te gustaría saber mis oscuros secretos, Minseok? Tal vez guardo poemas de amor secretos dedicados a alguien muy especial.

Ambos rieron, envueltos en una dinámica que, aunque nueva, les resultaba agradable y vigorosa. En el forcejeo amistoso por la libreta, esta se resbaló de las manos de Minhyung y cayó al suelo. Minseok, con rapidez, se agachó para recogerla, y mientras lo hacía, sus ojos captaron algunas palabras escritas en una de las páginas abiertas que estaban llenas de dibujos de rosas. La expresión del más bajo cambió sutilmente al notar que lo que había caído era algo más que un simple diario. Sus ojos leyeron unas líneas que le causaron curiosidad:

"Las rosas representan amor, valor, belleza y, lo más importante, secreto. Cupido ocultó los amoríos de Venus sobornando a Harpócrates, dios del silencio, con una rosa. Estas flores se convirtieron en el símbolo de confidencialidad para los romanos que decoraban el techo con rosas para recordar a sus invitados que, pasara lo que pasara en el comedor, en el comedor se quedaría. De esta práctica se origina la frase en latín 'sub rosa' o bajo la rosa, expresión que significa 'en secreto'."

Minseok no pudo evitar leer más de las líneas que se extendían por la página. Los escritos parecían ser poemas y averiguaciones, llenos de simbolismos y metáforas, todos centrados en torno a las rosas. La delicadeza de las palabras y la profundidad de los sentimientos expresados en esos escritos revelaban una faceta de Minhyung que el menor no conocía. La presencia de la rosa como símbolo de confidencialidad y secreto le intrigó, y sus pensamientos se agitaron con la posibilidad de que hubiera más detrás de la fachada alegre y extrovertida de Minhyung.

—Minhyung, ¿esto es tuyo? 

La expresión del mayor cambió de inmediato. Un destello de nerviosismo y sorpresa cruzó su rostro, y sus ojos se encontraron con los del otro, como si hubiera sido atrapado en medio de algo más íntimo de lo que estaba dispuesto a compartir.

—Oh, eso... —Minhyung murmuró, extendiendo la mano para recuperar la libreta. —Es solo un... cuaderno de ideas y pensamientos. Nada importante. —Añadió con una sonrisa forzada.

Minseok, sin embargo, no dejó que la evasiva de Minhyung pasara desapercibida. La curiosidad ahora le quemaba más que nunca, y su instinto de investigador le incitaba a profundizar. Pese a que notó el nerviosismo en la reacción del mayor, decidió abordar el tema con cuidado.

ROSE ;; Keria x GumayusiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora