❧ IV. 6

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Al salir al pasillo, buscó con la mirada al mayor entre la multitud de estudiantes que inundaban los corredores. Lo encontró cerca de las escaleras, charlando con algunos de sus compañeros. Al notar la presencia de Minseok, se despidió de sus amigos y se acercó con una sonrisa luminosa.

—¡Minseok! ¿Listo para almorzar? —preguntó con entusiasmo, colocando suavemente una mano en la espalda del menor mientras comenzaban a caminar hacia la cafetería.

—¡Sí, definitivamente! 

A medida que avanzaban por el campus, el sol comenzaba a disipar las nubes grises que habían marcado la mañana, reflejando la mejora en el ánimo de Minseok. La cafetería estaba animada con estudiantes que compartían risas y conversaciones mientras disfrutaban de sus comidas. Eligieron una mesa cerca de la ventana, donde la luz del sol se filtraba cálidamente. Se sentaron uno frente al otro, y el menor no pudo evitar notar cómo la sonrisa del otro iluminaba el lugar incluso más que los rayos del sol.

Mientras saboreaban su comida, Minhyung deslizó su pie por debajo de la mesa y rozó el tobillo de Minseok con el suyo. El menor se estremeció ligeramente ante el contacto, pero no apartó la mirada de los ojos chispeantes del mayor. Un juego empezó a desarrollarse bajo la mesa, una danza sutil de toques y miradas cómplices que solo ellos entendían. Los gestos cariñosos y coquetos se intercalaban con risas suaves y comentarios divertidos, creando una burbuja íntima en medio del bullicio de la cafetería.

Los gestos cariñosos de Minhyung, como robarle una patata frita o juguetear con su cabello, llenaron de alegría al menor. A mitad de su almuerzo, el mayor se inclinó hacia adelante con una mirada indescifrable en sus ojos.

—¿Sabes? He estado pensando en algo. —Susurró, como si compartiera un secreto emocionante.

Minseok, intrigado por la expresión del otro, ladeó su cabeza levemente, esperando con anticipación.

—¿En qué has estado pensando?

Minhyung se acercó aún más, su aliento cálido acariciando el rostro del menor. La tensión se intensificó, pero en lugar de compartir un secreto, Minhyung decidió sorprender al otro y, de repente, capturó sus labios en un beso tierno pero apasionado. Minseok, inicialmente sorprendido, se dejó llevar por la intensidad del momento, cerrando los ojos y correspondiendo al beso. La conexión entre ellos se profundizó, y por un instante, el mundo exterior desapareció, dejando solo la sensación de los labios del mayor sobre los suyos.

Cuando finalmente se separaron, Minseok parpadeó varias veces, procesando la repentina e inesperada muestra de afecto. Minhyung, con una sonrisa pícara, acarició la mejilla del menor con el pulgar antes de volver a su posición original. Fue un instante mágico que dejó a Minseok anhelando más, pero también consciente de su entorno. Los ojos de ambos brillaban con complicidad, y una chispa de deseo quedó suspendida en el aire.

—¿Te gustó mi pensamiento? — Rió suavemente antes de retomar su almuerzo como si nada hubiera sucedido, dejando a Minseok con el corazón latiendo acelerado y una sonrisa tonta en los labios.

—Definitivamente. Deberías pensar más seguido en esas cosas...

Antes de que pudieran continuar con su comida y sus juegos cómplices, una voz conocida los interrumpió.

—¡Ey, tortolitos! ¿Qué están haciendo aquí sin invitarme? —Exclamó Hyeonjun quien se acercaba a la mesa junto a Wooje.

Ambos, con sus mochilas al hombro, se unieron a la pareja en la mesa, ocupando los asientos vacíos a cada lado de Minseok.

—¡Hola, Hyeonjun, Wooje! —Saludó Minhyung con una sonrisa, aparentemente sin perturbarse por la interrupción.

—¡Hola, chicos! —respondió Minseok, tratando de ocultar la sorpresa y el rubor que aún perduraban en su rostro.

ROSE ;; Keria x GumayusiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora