GUSTAVO CERATI (ONE SHOTS)

Juegos de Seducción (🔞⚠️)

- Mi nombre es Alicia. Cometí un crimen y por eso estoy aquí - Dije mientras estaba completamente sentada y miraba directamente al policía que me estaba interrogando en esa sala típica, ya saben cuál. Creo que el policía se llamaba Gustavo ¿Gustavo?... no sé que más. Bue, a quien le importa.

- Sí, eso ya lo sé, pero ¿Qué crimen cometiste para que estés vos aquí? - Me respondió el policía y cada respuesta la anotaba en un pequeño cuaderno.

- Pues... atropelle a alguien - Traté de aguantar mi risa. Sí, me iba a reír, es que bueno, me imaginé a alguien volando por los aires, aunque de hecho fue menos dramático que eso. Lamentablemente. 

- ¿Y te causa risa? - Si mirada estaba fija en mis ojos. Y se había recargado de codos sobre la mesa.

Yo imite su acción.

- Pues, si no me causará risa, no hubiera estado a punto de reírme ¿O no? - Contesté con cinismo.

Él solamente dijo algo entre dientes que no alcancé a escuchar del todo.

Hubo varios minutos de silencio, a excepción del bolígrafo que hacía fricción con la hoja del cuaderno.

Realmente me estaba preguntando a mi misma que carajo hacia yo ahí, sí, sí atropelle a la señora esa. Pero es que estaba loca. Mató a uno de mis perros.

Así que cometí venganza, aunque yo la atropellé enfrente de la estación de la policía y bueno también estaba borracha, de hecho, bastante borracha, ni siquiera sé cómo es que yo misma pude encender el auto sin chocarme en el intento de atropellar a esa vieja ciruja.

Bueno, ya era imposible que la vieja esa estuviera en prisión, porque ya estaba más muerta de Freddie Mercury. Ahora más bien, está con Freddie Mercury.

- Bueno, vos me esperas acá...- El policía captó mi atención.

- Tampoco es como que me fuera a ir - Le respondí sarcástica. Él solo se fue y cerró la puerta.

Realmente estaba bastante impaciente, ya eran pasadas las 11pm y me iba a perder una de mis películas favoritas que estaban pasando en la televisión.

- Para nuestra mala suerte, me acaban de informar que te necesitas quedar hasta mañana a primera hora

Yo bufé.

Me habían jodido la poca noche que tenía. O bueno más bien, fuí yo misma, pero ellos también.

- ¿Y eso por qué? - Pregunté con fastidio.

- Escucháme una cosa... - Se acercó hacía a mi quedando a mi altura - Vos acá no haces preguntas, las hago yo ¿Queda claro? - Él me quiso intimidar.

Solté una risa en su cara.

- ¿Y eso según quién? - Sarcásticamente le respondí. - No me digas que ahora me quitan hasta el derecho de preguntar - Finalicé con esa frase y pude ver qué su enojo estaba floreciendo.

Él no dijo nada, solo me permaneció viendo por unos minutos, y yo, obviamente, siguiéndole la mirada.

- ¿Acaso no te da miedo? - Me preguntó el policía.

- ¿Miedo de qué? - Curiosamente respondí.

- Pues... Miedo de estar aquí casi toda tu vida. - Suspiró y dijo con suma tranquilidad mientras se sentaba en la mesa.

- Para mí, el miedo es subjetivo... - Quité mi mirada de él y volteé a un lado.

Él tomo mi barbilla e hizo que lo mirará a los ojos.

- ¿Y hay algo más que para ti sea subjetivo? - Susurró cerca de mi cara.

- No creo. - Dije fríamente.